Pese a las amenazas a los banqueros, el ministro de Economía, Domingo Cavallo no logró reducir el costo de financiamiento del Estado y convalidó tasas superiores a 10% en una licitación de Letras del Tesoro (Letes) por US$ 700 millones.
En la colocación de Letes a tres meses de plazo por US$ 350 millones se pactaron intereses de 10,35% anual, informó la secretaría de Finanzas.
Los intereses fueron de 11,91% anual en la colocación de títulos a seis meses de plazo por otros US$ 350 millones, indicó.
Los expertos del mercado financiero calculaban que el costo de la emisión de estos títulos iba a oscilar entre 9,5 y 10% anual para los de vencimiento a tres meses y entre 10 y 11% anual en el caso de los de seis meses de plazo.
El 27 de marzo pasado, se colocaron Letes por US$ 350 millones a tres meses de plazo con intereses de 10,96% anual y Cavallo dijo que no estaba dispuesto a aceptar más “tasas ruinosas” para financiar la deuda pública.
Las declaraciones de Cavallo fueron interpretadas como una advertencia a los bancos sobre la posibilidad de que el gobierno dejara de colocar Letes en caso de que el costo fuera considerado alto.
Pese a las amenazas a los banqueros, el ministro de Economía, Domingo Cavallo no logró reducir el costo de financiamiento del Estado y convalidó tasas superiores a 10% en una licitación de Letras del Tesoro (Letes) por US$ 700 millones.
En la colocación de Letes a tres meses de plazo por US$ 350 millones se pactaron intereses de 10,35% anual, informó la secretaría de Finanzas.
Los intereses fueron de 11,91% anual en la colocación de títulos a seis meses de plazo por otros US$ 350 millones, indicó.
Los expertos del mercado financiero calculaban que el costo de la emisión de estos títulos iba a oscilar entre 9,5 y 10% anual para los de vencimiento a tres meses y entre 10 y 11% anual en el caso de los de seis meses de plazo.
El 27 de marzo pasado, se colocaron Letes por US$ 350 millones a tres meses de plazo con intereses de 10,96% anual y Cavallo dijo que no estaba dispuesto a aceptar más “tasas ruinosas” para financiar la deuda pública.
Las declaraciones de Cavallo fueron interpretadas como una advertencia a los bancos sobre la posibilidad de que el gobierno dejara de colocar Letes en caso de que el costo fuera considerado alto.