<p>Simbólicamente, la adjudicación –no es una venta lisa y llana-, coincide con la restitución formal de la seguridad urbana (hasta ahora en manos norteamericanas) a las fuerzas iraquíes. La subasta es una forma de recobrar dominio sobre sectores económicos. <br />
<br />
En el concurso (definido como de relevancia clave), cada participante cotiza en sobre sellado especificando metas de extracción y montos a percibir por barril producido. Esta apertura implica un giro en la política petrolera iraquí pues, hace casi treinta años, se impuso una nacionalización casi tan drástica como la de Irán. <br />
Hoy, el país intenta ir revirtiendo las guerras de 1980/88 (con Teherán) 1990/1 (primer conflicto del golfo) y 2004 hasta el momento. No obstante, la primera ronda de ofertas –para el yacimiento de Rumail, el mayor- se trabó cuando Exxon Mobil y el consorcio British Petroleum/China National Petroleum pidieron más de lo especificado en los pliegos (US$ 2 por barril). <br />
<br />
Exxon exige US$ 3,10 por barril diario adicional y un canon de 4,80. BP/CNP propone extraer 2.850.000 b/d y demanda US$ 3,99 por b/d adicional. Presionado, BP/CNP aceptó los dos dólares y ganó la puja. Huséin as-Sharistaní, ministro del ramo, debe elevar la documentación al parlamento. <br />
No hubo ofertas por Mansuriya (gas natural), pues los yacimientos están en la violenta provincia de Diyala, pegada a Irán. Un grupo conducido por ConocoPhillips aspiraba al yacimiento de Bai Hasán (Kirkuk, Kurdistán iraquí), pero su propuesta era muy baja.</p>
<p> </p>
Irak: una subasta con ciertas dificultades
Tras un año de preparativos, Bagdad comienza el proceso para desarrollar grandes reservas de hidrocarburos. Pero surgen trabas: algunas de las compañías involucradas exigen cánones superiores a los ofrecidos en los pliegos licitatorios.