En la segunda economía de la Unión Europea, todavía remisa a la moneda común, “la industria parece ir a una recesión, tras algunas señales aisladas de repunte, y los consumidores se muestran cautos”, explicaba Gerrard Ltd, fondo londinense que maneja unos US$ 27.300 millones. Pero la diferencia con la eurotasa (un punto) y la honda brecha con la estadounidense (tres puntos y medio) sugieren que el emisor volverá a rebajar su tipo este mismo semestre.
Por cierto, la economía británica creció en 2002 apenas 1,7% en términos de PBI, el menor margen desde 1993. Banca, aerolínea y hotelería perdieron ritmo y las compras mayoristas bajaron respecto de 2001. Esto en un país cuyo público pagar precios exorbitantes por casi todo, aun respecto de Eurolandia.
En la segunda economía de la Unión Europea, todavía remisa a la moneda común, “la industria parece ir a una recesión, tras algunas señales aisladas de repunte, y los consumidores se muestran cautos”, explicaba Gerrard Ltd, fondo londinense que maneja unos US$ 27.300 millones. Pero la diferencia con la eurotasa (un punto) y la honda brecha con la estadounidense (tres puntos y medio) sugieren que el emisor volverá a rebajar su tipo este mismo semestre.
Por cierto, la economía británica creció en 2002 apenas 1,7% en términos de PBI, el menor margen desde 1993. Banca, aerolínea y hotelería perdieron ritmo y las compras mayoristas bajaron respecto de 2001. Esto en un país cuyo público pagar precios exorbitantes por casi todo, aun respecto de Eurolandia.