El congelamiento de la propuesta Unipol, resuelto días atrás por Banca d’Italia (central) por incumplimiento de requisitos patrimoniales, lleva a un desenlace anticipado semanas atrás en este sitio: los españoles vuelven a interesarse en BNL. El BBVA había desistido, el 22 de julio, de pelear el paquete con la aseguradora, arguyendo maniobras irregulares y las interferencias de Antonio Fazio, piadoso ex presidente del central.
Según fuentes allegadas a la firma de valores y banca de inversión neoyorquina, la entidad española –tachada por Fazio y su esposa como “instrumento de la masonería vasca”- esta analizando su nueva oferta desde principios de enero. Cabe recordar que la primera propuesta no era hostil y se basaba en un intercambio de acciones. La nueva incluirá efectivo.
Mientras tanto, la junta directiva de Unipol ha conferido facultades a su presidente, Pierluigi Stefanini, para explorar todas las salidas factibles y apartarse de BNL. Por otra parte, la aseguradora boloñesa remitió este fin de semana a Banca d’Italia un informe exhaustivo sobre la frustrada oferta y su escaso sustento patrimonial.
En cuanto a Merrill Lynch, sus expertos señalan que la eventual toma de BNL por BBVA podrá financiarse con € 700 millones en efectivo, producto de ceder participaciones y elevar el capital operativo. En lo tocante a BBVA, la firma estadounidense estima que la toma de BNL es compatible con la estrategia de fusiones y adquisiciones encarada desde hace tiempo por los españoles.
Ahora, se espera ver cómo cristaliza la compra de Banca Antoniana Popolare Veneta por ABN Amro, para ver si BBVA incorpora los activos BNL o la mantiene como entidad separada. En su caso, la “marca” BNL no ha sufrido el deterioro de “AntonVeneta”, en sí un anacronismo: no es antoniana ni popular.
El congelamiento de la propuesta Unipol, resuelto días atrás por Banca d’Italia (central) por incumplimiento de requisitos patrimoniales, lleva a un desenlace anticipado semanas atrás en este sitio: los españoles vuelven a interesarse en BNL. El BBVA había desistido, el 22 de julio, de pelear el paquete con la aseguradora, arguyendo maniobras irregulares y las interferencias de Antonio Fazio, piadoso ex presidente del central.
Según fuentes allegadas a la firma de valores y banca de inversión neoyorquina, la entidad española –tachada por Fazio y su esposa como “instrumento de la masonería vasca”- esta analizando su nueva oferta desde principios de enero. Cabe recordar que la primera propuesta no era hostil y se basaba en un intercambio de acciones. La nueva incluirá efectivo.
Mientras tanto, la junta directiva de Unipol ha conferido facultades a su presidente, Pierluigi Stefanini, para explorar todas las salidas factibles y apartarse de BNL. Por otra parte, la aseguradora boloñesa remitió este fin de semana a Banca d’Italia un informe exhaustivo sobre la frustrada oferta y su escaso sustento patrimonial.
En cuanto a Merrill Lynch, sus expertos señalan que la eventual toma de BNL por BBVA podrá financiarse con € 700 millones en efectivo, producto de ceder participaciones y elevar el capital operativo. En lo tocante a BBVA, la firma estadounidense estima que la toma de BNL es compatible con la estrategia de fusiones y adquisiciones encarada desde hace tiempo por los españoles.
Ahora, se espera ver cómo cristaliza la compra de Banca Antoniana Popolare Veneta por ABN Amro, para ver si BBVA incorpora los activos BNL o la mantiene como entidad separada. En su caso, la “marca” BNL no ha sufrido el deterioro de “AntonVeneta”, en sí un anacronismo: no es antoniana ni popular.