En realidad, los ministros agrícolas de ambos sectores han sacado del medio un serio obstáculo en el ya prolongado camino hacia un acuerdo general. Durante los tramos más duros, Brasil, Argentina y Australia –entre otros- tuvieron fuertes enfrentamientos con la UE.
El destrabe ocurrió luego de que la UE (no “Europa” a secas, como suele decirse) accedió a concesiones políticamente difíciles, que debieran facilitar el acceso a determinados mercados agrícolas. Pero hay una incógnita: ¿cómo afectarán esas concesiones el plebiscito francés sobre la constitución europea, previsto en tres semanas? Por un lado, las encuestan dan más de 53% de voto negativo. Por el otro, los países exportadores objetan que los subsidios agrícolas formen parte del texto constitucional.
En concreto, el arrglo cierra una compleja dispuita sobre métodos para evaluar gravámenes a la importación existentes. Éstos influirán mucho en eventuales rebajas tarifarias, prescriptas por la ronda Dohá (OMC). Tal como queda, el acuerdo es un compromiso entre las exigencias europeas y las de Brasil -líder del grupo negociador-, que había acusado a la UE de aprovecar el “impasse” para arrancas concesionbes a países pobres. Ahora falta presentar el pacto ante los 148 miembros de la organización (inclusive docenas de microestados insubstanciales).
En realidad, los ministros agrícolas de ambos sectores han sacado del medio un serio obstáculo en el ya prolongado camino hacia un acuerdo general. Durante los tramos más duros, Brasil, Argentina y Australia –entre otros- tuvieron fuertes enfrentamientos con la UE.
El destrabe ocurrió luego de que la UE (no “Europa” a secas, como suele decirse) accedió a concesiones políticamente difíciles, que debieran facilitar el acceso a determinados mercados agrícolas. Pero hay una incógnita: ¿cómo afectarán esas concesiones el plebiscito francés sobre la constitución europea, previsto en tres semanas? Por un lado, las encuestan dan más de 53% de voto negativo. Por el otro, los países exportadores objetan que los subsidios agrícolas formen parte del texto constitucional.
En concreto, el arrglo cierra una compleja dispuita sobre métodos para evaluar gravámenes a la importación existentes. Éstos influirán mucho en eventuales rebajas tarifarias, prescriptas por la ronda Dohá (OMC). Tal como queda, el acuerdo es un compromiso entre las exigencias europeas y las de Brasil -líder del grupo negociador-, que había acusado a la UE de aprovecar el “impasse” para arrancas concesionbes a países pobres. Ahora falta presentar el pacto ante los 148 miembros de la organización (inclusive docenas de microestados insubstanciales).