En número, el sector más perjudicado influye ricos e influyentes clanes judías, mayormente ortodoxos, residentes en Nueva York y Florida. Esto no sorprende, dada la presencia de esa colectividad en las finanzas norteamericanas y británicas. Un solo fondo vinculado a ella, Fairfield Greenwich, había colocado US$ 7.500 millones, en una espectacular muestra de insensatez.
<p> </p>
<p>Según medios como “Financial times, Wall Street Journal, Los Ángeles Times” o “Journal de Génève”, el este fraude piramidal para magnates salpica a BNP Paribas, Banco de Santander Central Hispano (pierde unos US$ 3.000 millones), Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), Neue Privatbank (Zürich), Nomura Securities (Japón), a fundación Wunderkinder (niños prodigios, de Steven Spielberg), Elie Wiesel (Nobel literario), Frederick Wilton (New York Mets), Norman Braman (ex Philadelphia Eagles), etc. </p>
<p>Detenido y arrestado en Nueva Cork, Madoff se declaró culpable y recobró la libertad tras abonar US$ 10 millones. Pero la justicia y muchos expertos se preguntan por qué una maxiestafa múltiple por una cifra que supera el producto bruto interno de varios países tardó tanto en salir a luz. Este factor explican que algunas entidades (BSCH, BNP Paribas) hayan abierto sumarios internos y suspendido equipos gerenciales enteros. </p>
<p>Madoff no era cualquiera. Como presidente del panel electrónica Nasdaq, clave de las acciones tecnológicas, debió haber sido detectado por la Securities & Exchange comisión (SEC, comisión federal de valores) y las entidades paralelas de Gran Bretaña, Francia, Suiza, Alemania España e Italia. Amén de su influencia al frente del Nasdaq, el estafador de 72 años era conocido filántropo, igual que sus antecesores ítalonortemericanos Ponzi y Vesco. Hasta el momento, los grupos más expuesto por el “scam” son norteamericanos (unos US$ 35.000 millones) y españoles (5.000 millones). </p>
En libertad bajo fianza de diez millones, no habrá Januká para Madoff
Aumentan las víctimas de una estafa estilo Carlo Ponzi (años 20), Roberto Vesco (1968) o la que acaba de despojar a tres millones de colombianos. Aún se la estima en torno de US$ 50.000 millones, más de tres veces el auxilio a automotrices.