Extrañamente, altos funcionarios políticos, económicos y financieros de la Eurozona (los trece adherentes a la moneda común) eludan comentar semejante y tan prolongado impulso. Este silencio se parece al del gobierno norteamericano ante un dólar tan barato que promueve exportaciones de todo tipo.
En forma aislada, un grupo de industriales alemanes salió a sostener que puede resistir un euro de US$ 1,50 sin grandes transtornos. Parte del nuevo avance deriva de rumores circulantes ambos lados del Atlántico: la Reserva Federal rebajará de 4,5 a 4,25% anual la tasa basica, en diciembre.
Por el contrario, varios productores de hidrocarburos, dentro o fuera de la Organización de Países Exportadores Petroleros (OPEP), empiezan a sentirse muy incómodos con un dólar tan exiguo. Dentro del ente, sólo Saudiarabia –opera para Estados Unidos- se aferra a la divisa como unidad tarifaria. Otro preferirían una canasta euro-dólar-yen.
Sin Wall Street, el panorama bursátil mostraba divergencias. En Asia oriental y sudoriental, Tokio ganaba 0,34%, pero Singapur perdía 1,03% y 2,3% Hongkong. En Europa occidental, Londres subía 1,39%, pero Frácfort sólo 0,58%.
Extrañamente, altos funcionarios políticos, económicos y financieros de la Eurozona (los trece adherentes a la moneda común) eludan comentar semejante y tan prolongado impulso. Este silencio se parece al del gobierno norteamericano ante un dólar tan barato que promueve exportaciones de todo tipo.
En forma aislada, un grupo de industriales alemanes salió a sostener que puede resistir un euro de US$ 1,50 sin grandes transtornos. Parte del nuevo avance deriva de rumores circulantes ambos lados del Atlántico: la Reserva Federal rebajará de 4,5 a 4,25% anual la tasa basica, en diciembre.
Por el contrario, varios productores de hidrocarburos, dentro o fuera de la Organización de Países Exportadores Petroleros (OPEP), empiezan a sentirse muy incómodos con un dólar tan exiguo. Dentro del ente, sólo Saudiarabia –opera para Estados Unidos- se aferra a la divisa como unidad tarifaria. Otro preferirían una canasta euro-dólar-yen.
Sin Wall Street, el panorama bursátil mostraba divergencias. En Asia oriental y sudoriental, Tokio ganaba 0,34%, pero Singapur perdía 1,03% y 2,3% Hongkong. En Europa occidental, Londres subía 1,39%, pero Frácfort sólo 0,58%.