En efecto, la Federal Housing Enterprise Oversight (FHEO, contraloría de firmas inmobiliarias) ha puesto bajo la lupa a Fannie Mae y Freddie Mac, las dos mayores re-compradoras de créditos hipotecarios, cuya masa de futuros y opciones –es decir, derivados financieros- en el aire suma más de US$ 1 billón (o sea, un noveno del PBI estadounidense).
La FHEO ha reunido expertos de cuatro divisiones (revisión, políticas, legales y capitales) en una fuerza de tareas. Su misión consiste en “vigilar el uso de instrumentos y contratos derivados, a los cuales ambas firmas apelan para reducir riesgos ligados a cambios en intereses o en el mercado de bonos”, indicó James Barton, subdirector de la contraloría y jefe del nuevo equipo.
Quienes objetan la especulaciones de Fannie Mae y Freddie Mac – incluyendo FM Watch, una organización creada por Wells Fargo, y American International Group—afirman que las dos empresas han tomado excesivos riesgos adicionales, justamente a través de los derivados. Esto puede perjudicar a los contribuyentes, pues el gobierno federal y los de algunos estados podrían terminar viéndose obligados a rescatar a ambas empresas, debido a su papel clave en el mercado hipotecario nacional.
Virtualmente desconocidas fuera de EE.UU., Fannie Mae y Freddie Macson son pivotes del negocio inmobiliario a través de créditos. Juntas, las dos han recomprado 63% de las llamadas “hipotecas convencionales” entre 1996 y 2000. Pero, a medida que crecía su participación en la plaza, también lo hacía su endeudamiento en futuros y opciones, que aumenta a razón de 25% anual, acumulativo desde 1997.
En efecto, la Federal Housing Enterprise Oversight (FHEO, contraloría de firmas inmobiliarias) ha puesto bajo la lupa a Fannie Mae y Freddie Mac, las dos mayores re-compradoras de créditos hipotecarios, cuya masa de futuros y opciones –es decir, derivados financieros- en el aire suma más de US$ 1 billón (o sea, un noveno del PBI estadounidense).
La FHEO ha reunido expertos de cuatro divisiones (revisión, políticas, legales y capitales) en una fuerza de tareas. Su misión consiste en “vigilar el uso de instrumentos y contratos derivados, a los cuales ambas firmas apelan para reducir riesgos ligados a cambios en intereses o en el mercado de bonos”, indicó James Barton, subdirector de la contraloría y jefe del nuevo equipo.
Quienes objetan la especulaciones de Fannie Mae y Freddie Mac – incluyendo FM Watch, una organización creada por Wells Fargo, y American International Group—afirman que las dos empresas han tomado excesivos riesgos adicionales, justamente a través de los derivados. Esto puede perjudicar a los contribuyentes, pues el gobierno federal y los de algunos estados podrían terminar viéndose obligados a rescatar a ambas empresas, debido a su papel clave en el mercado hipotecario nacional.
Virtualmente desconocidas fuera de EE.UU., Fannie Mae y Freddie Macson son pivotes del negocio inmobiliario a través de créditos. Juntas, las dos han recomprado 63% de las llamadas “hipotecas convencionales” entre 1996 y 2000. Pero, a medida que crecía su participación en la plaza, también lo hacía su endeudamiento en futuros y opciones, que aumenta a razón de 25% anual, acumulativo desde 1997.