En el caso norteamericano, la proximidad del verano y la mayor demanda de nafta por parte del turismo interno tienden a inquietar a medida como se acerca junio. Máxime porque, en forma sorpresiva, están cerrándose refinerías dentro del país.
La semana pasada, las existencias de nafta estaban 7,5% por debajo del promedio quinquenal, informó el departamento federal de energía y combustibles. Entretanto, las refinerías elevaban 0,6%, o sea a 89,5%, el uso de capacidad instalada, lo cual revela que el sector exhibe cifras por demás altas.
Algunos expertos temen, inclusive, que las refinerías estén ya usando 95% de capacidad disponible. Ello deja escasísimo margen de maniobra. En general, el sistema norteamericano de refinación es viejo o anacrónico, sostienen analistas de la propia industria y fondos que especulan en combustibles.
En ese contexto, el crudo con entrega en junio avanzó en Nueva York 2,8%, a US$ 64,85 el barril. Es el máximo desde principios de mayo, auque todavía esté 6,2% bajo un año atrás. Londres cerró a US$ 70,25 el barril de Brent nórdico, pico del año. Volviendo a EE.UU., la nafta a término llega a US$ 2,42 el galón o 75,5 centavos el litro (que el público ya paga casi un dólar).
En el caso norteamericano, la proximidad del verano y la mayor demanda de nafta por parte del turismo interno tienden a inquietar a medida como se acerca junio. Máxime porque, en forma sorpresiva, están cerrándose refinerías dentro del país.
La semana pasada, las existencias de nafta estaban 7,5% por debajo del promedio quinquenal, informó el departamento federal de energía y combustibles. Entretanto, las refinerías elevaban 0,6%, o sea a 89,5%, el uso de capacidad instalada, lo cual revela que el sector exhibe cifras por demás altas.
Algunos expertos temen, inclusive, que las refinerías estén ya usando 95% de capacidad disponible. Ello deja escasísimo margen de maniobra. En general, el sistema norteamericano de refinación es viejo o anacrónico, sostienen analistas de la propia industria y fondos que especulan en combustibles.
En ese contexto, el crudo con entrega en junio avanzó en Nueva York 2,8%, a US$ 64,85 el barril. Es el máximo desde principios de mayo, auque todavía esté 6,2% bajo un año atrás. Londres cerró a US$ 70,25 el barril de Brent nórdico, pico del año. Volviendo a EE.UU., la nafta a término llega a US$ 2,42 el galón o 75,5 centavos el litro (que el público ya paga casi un dólar).