<p>Esas 416 entidades financieras representan activos totales por casi US$ 300.000 millones. Son bancos que, en el segundo trimestre, ya no lograban mantener calificación aceptable según las normas de la FDIC en lo tocante a calidad, liquidez y rentabilidad.<br />
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Atendiendo una recomendación de la Reserva Federal –conocida este jueves-, no se divulgan nombres. Pero, tratándose de entidades locales, no es difícil ubicarlas. Sea como fuere, desde junio de 1994 no había tantos prestamistas de su tipo en aprietos.<br />
En cuanto va de 2009, a la sazón, el estado federal ha tomado o intervenido 81 bancos regionales. Entre los mayores, los medios sindican a Guaranty Financial Group (Texas) y Colonial BancCorp (Alabama). Esta “crisis dentro de una crisis” obligó a la FDIC a juntar US$ 5.600 millones vía una tasa de emergencia para el fondo. A fin de junio, éste había cedido a US$ 10.400 millones, contra 13.000 millones en marzo, y era el mínimo desde 1993.<br />
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Mientras tanto, US$ 11.600 millones congelados en previsión de falencias afectan el fondo de reserva, indica la agencia. Si en efecto quedase ilíquida, la FDIC podría apelar a una línea de crédito por US$ 100.000 millones, otorgada en mayo por el Congreso y, ulteriormente, otros US$ 500.000 millones temporarios de ahora a 2010. Esto aproximará este rescate al de activos tóxicos (US$ 700.000 millones, en buena parte no recobrados todavía). <br />
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También a agosto, más de 150 entidades financieras registradas en Bolsa tienen créditos desactivados y malas acreencias por 5% o más de sus carteras. Estos niveles, insisten ex reguladores, pueden eliminar utilidades, castigar acciones y amenazar la sobrevivencia misma de un banco. Los más expuestos incluyen Marshall & Ilsley (Wisconsin), Synovus Financial (Georgia) y Flagstar Bancorp (Michigan).</p>
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416 en la lista de bancos regionales en problemas
La agencia federal de seguro sobre depósitos (FDIC en inglés) añade en agosto 111 prestamistas a los 309 que afrontaban severas dificultades. Este aumento de 34,6% puede agotar los fondos del sistema. Ya en enero-julio, se había drenado 40%.