Unión de Yacyreta y Corpus Christi

Los constructores de la represa paraguaya completarán la planta downstream de la binacional.

24 diciembre, 1999

Los constructores del proyecto hidroeléctrico Corpus Christi del río Paraná que
separa Argentina de Paraguay tendrán la responsabilidad de completar la planta
downstream Yacyreta, señaló a BNA el presidente de la consultora de ingeniería
Knight Piesold, Peter Garratt.

Autoridades argentinas y paraguayas están considerando alcanzar la capacidad
total de generación de Yacyreta al aumentar el nivel de agua a 83m por sobre el
nivel del mar desde 76m. Como esto tendrá una repercusión inmediata en el
proyecto Corpus Cristi, “sería lógico que se ofrecieran al sector privado los dos
proyectos juntos”, señaló Garratt.

Una vez definidos los parámetros de operación de Yacyreta, los desarrolladores
de Corpus Christi podrán planificar las características y la capacidad exacta del
proyecto upstream, señaló Garratt. Los planificadores de Corpus Christi ya bajaron la escala de capacidad máxima de los 4.600MW planeados originalmente a 3.000MW.

Si bien los estudios originales favorecían el sitio de Itacua, los desarrolladores están ahora reconsiderando el sitio de Itacurubi que fue inicialmente descartado por ser demasiado pequeño y geográficamente problemático. Una vez decidido el proyecto más pequeño, los geólogos volvieron a Itacurubi y emprenderán perforaciones exploratorias para confirmar que el terreno es apropiado para el proyecto. Itacurubi ofrece también importantes beneficios ambientales, argumentó Garrat.

Las turbinas Bulb en vez de las Kaplan ofrecen una construcción alternativa atractiva para el sitio Itacurubi, y reducirán el tiempo de construcción del proyecto a aproximadamente tres años y medio.

Tres consorcios están considerando el proyecto: ABB-Alstom/Kvaerner/Enron, el Grupo de Empresas del Mercosur (GEM) un consorcio de 14 importantes compañías ingenieras de Latinoamérica, y un consorcio japonés compuesto por Toshiba, Mitsubishi e Hitachi. De los tres, “es extremadamente difícil ver cómo se podría desarrollar el proyecto sin la participación de GEM”, señaló Garratt.

Las indicaciones políticas son favorables para el desarrollo del proyecto, continuó Garratt. Fuentes argentinas han señalado que la nueva administración de De la Rúa considera que la realización de un proyecto de este tipo sería “políticamente atractivo”, ya que ayudaría a reducir el desempleo y para reactivar la economía. El gobierno paraguayo también estaría a favor del proyecto por motivos similares, dijo Garratt.

Brasil será el mercado principal para la energía de Corpus Christi, señaló Garratt. La energía del proyecto será “altamente competitiva” en el mercado brasileño que necesita urgentemente nuevas generaciones, indicó.

Fuera de los trabajos de transmisión, el costo de la construcción de Corpus Christi será de aproximadamente US$2.800mn lo que en precios de 1996 sería cerca de US$2.500mn, dijo Garratt, agregando que la inversión aproximada a la fecha en el sitio en estudios de investigación, viabilidad e medio ambiente ascienden a cerca de US$5mn.

Knight Piesold ha estado aconsejando a la comisión argentino-paraguaya, Comisión Mixta del Río Paraná (Comip) desde 1991, y por tanto tiene un entendimiento considerable sobre el proyecto, concluyó Garratt.

Fuente: BNA

Los constructores del proyecto hidroeléctrico Corpus Christi del río Paraná que
separa Argentina de Paraguay tendrán la responsabilidad de completar la planta
downstream Yacyreta, señaló a BNA el presidente de la consultora de ingeniería
Knight Piesold, Peter Garratt.

Autoridades argentinas y paraguayas están considerando alcanzar la capacidad
total de generación de Yacyreta al aumentar el nivel de agua a 83m por sobre el
nivel del mar desde 76m. Como esto tendrá una repercusión inmediata en el
proyecto Corpus Cristi, “sería lógico que se ofrecieran al sector privado los dos
proyectos juntos”, señaló Garratt.

Una vez definidos los parámetros de operación de Yacyreta, los desarrolladores
de Corpus Christi podrán planificar las características y la capacidad exacta del
proyecto upstream, señaló Garratt. Los planificadores de Corpus Christi ya bajaron la escala de capacidad máxima de los 4.600MW planeados originalmente a 3.000MW.

Si bien los estudios originales favorecían el sitio de Itacua, los desarrolladores están ahora reconsiderando el sitio de Itacurubi que fue inicialmente descartado por ser demasiado pequeño y geográficamente problemático. Una vez decidido el proyecto más pequeño, los geólogos volvieron a Itacurubi y emprenderán perforaciones exploratorias para confirmar que el terreno es apropiado para el proyecto. Itacurubi ofrece también importantes beneficios ambientales, argumentó Garrat.

Las turbinas Bulb en vez de las Kaplan ofrecen una construcción alternativa atractiva para el sitio Itacurubi, y reducirán el tiempo de construcción del proyecto a aproximadamente tres años y medio.

Tres consorcios están considerando el proyecto: ABB-Alstom/Kvaerner/Enron, el Grupo de Empresas del Mercosur (GEM) un consorcio de 14 importantes compañías ingenieras de Latinoamérica, y un consorcio japonés compuesto por Toshiba, Mitsubishi e Hitachi. De los tres, “es extremadamente difícil ver cómo se podría desarrollar el proyecto sin la participación de GEM”, señaló Garratt.

Las indicaciones políticas son favorables para el desarrollo del proyecto, continuó Garratt. Fuentes argentinas han señalado que la nueva administración de De la Rúa considera que la realización de un proyecto de este tipo sería “políticamente atractivo”, ya que ayudaría a reducir el desempleo y para reactivar la economía. El gobierno paraguayo también estaría a favor del proyecto por motivos similares, dijo Garratt.

Brasil será el mercado principal para la energía de Corpus Christi, señaló Garratt. La energía del proyecto será “altamente competitiva” en el mercado brasileño que necesita urgentemente nuevas generaciones, indicó.

Fuera de los trabajos de transmisión, el costo de la construcción de Corpus Christi será de aproximadamente US$2.800mn lo que en precios de 1996 sería cerca de US$2.500mn, dijo Garratt, agregando que la inversión aproximada a la fecha en el sitio en estudios de investigación, viabilidad e medio ambiente ascienden a cerca de US$5mn.

Knight Piesold ha estado aconsejando a la comisión argentino-paraguaya, Comisión Mixta del Río Paraná (Comip) desde 1991, y por tanto tiene un entendimiento considerable sobre el proyecto, concluyó Garratt.

Fuente: BNA

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