Richard Wagoner no descarta la quiebra de GM
Tal vez apostando a permanecer al frente de General Motors, el director ejecutivo abandonó la oposición a una convocatoria negociada. En realidad, es el mecanismo definido en el título XI de la ley federal para concursos de acreedores.
18 marzo, 2009


<p> Ahora, sostiene que la segunda automotriz mundial podría emerger fortalecida de una reestructuración manejada por el eventual tribunal de quiebra. No obstante, prefiere agotar las negociaciones para un salvamento vía inyección de US$ 16.400 millones adicionales a los 13.400 millones otorgados ya.</p>
<p>En el clima actual, para el gobierno es una suma lo bastante desmedida como para optar por la bancarrota. Significaría llevar a US$ 30.000 millones la factura a pagar por el contribuyente. Estas cifras sobrepasan en 235 y 184% las de Chrysler (Cerberus Capital Management); respectivamente, US$ 4.000 millones y 5.000 millones.</p>
<p>Pero existe un problema “político”: ¿cuánta gente le compraría autos a una compañía en concurso? A diferencia de un artículo de consumo, los bienes durables de uso final están atados a la imagen (marca) de sus fabricantes. Ademán, esta salida le exigiría al estado conceder un financiamiento como “deudor a cargo”.</p>
<p>En lo atinente a Wagoner, desde 2000 conduce una empresa con crecientes problemas. Sólo su influencia personal en Detroit (medios especializados inclusive) y la línea gerencial –asociadas a las camionetas de lujo, entre otros errores- explican tan larga sobrevivencia. </p>
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