Paro en Aerolíneas y Austral
La Asociación de Personal Técnico Aeronáutico decretó un paro por tiempo indeterminado en oposición al plan de reducción de personal que comenzó a poner en práctica la Sepi.
(EFE).- El personal técnico de las empresas Aerolíneas Argentinas y Austral inició hoy (martes 24) un paro por tiempo indefinido en protesta por el plan de saneamiento de ambas compañías aéreas controladas por la sociedad estatal española Sepi.
La protesta se inició a las 10 y afecta a las secciones de mantenimiento de las dos empresas en todos los aeropuertos del país.
Según Ricardo Cirielli, secretario general de la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), el paro obedece a que algunos empleados “ya comenzaron a recibir telegramas de despido”.
Aerolíneas Argentinas y Austral, privatizadas en 1990, están bajo control de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) de España, que el pasado octubre acordó con el Gobierno argentino un plan de saneamiento de ambas compañías para revertir su crítica situación, marcada por grandes deudas y pérdidas operativas.
Tres sindicatos de trabajadores de Aerolíneas Argentinas y Austral -los de personal de cabina, personal técnico y personal técnico aeronáutico- se oponen a la puesta en marcha de ese plan, que comprende una capitalización de ambas empresas, pero también medidas para racionalizar sus gastos y aumentar su competitividad.
Con 6.700 empleados en conjunto, Aerolíneas Argentinas y Austral tienen pérdidas anuales del orden de los US$ 240 millones y unas deudas acumuladas de más de US$ 900 millones.
Hoy, desde Madrid, el presidente de la Sepi, Pedro Ferreras, dijo que la sociedad estatal aplicará el Plan Director de la compañía aérea a pesar de la oposición de dos de los siete sindicatos de la empresa.
El directivo realizó estas declaraciones ante la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso español de los Diputados al referirse a ese plan director, que contempla reducir la plantilla en 1.315 empleados.
Ferreras señaló que una vez agotado el plazo para negociar con los dos sindicatos que rechazan el plan, el de técnicos de mantenimiento (APTA) y el de azafatas (AAA), la Sepi ha decidido seguir adelante.
La aerolínea comunicará la rescisión de sus contratos a 250 empleados pertenecientes a los colectivos con cuyos sindicatos no hay acuerdo, ya que el resto de las bajas se ha negociado con las cinco centrales con las que sí se ha logrado un compromiso.
En los últimos meses, se han producido 700 bajas voluntarias en la compañía aérea argentina.
Ferreras reconoció que transferir la gestión de Aerolíneas Argentinas a American Airlines fue “un error que se ha pagado caro”.
Según el presidente de la Sepi, esta decisión retrasó su saneamiento un año, periodo en el que se acumularon unas pérdidas adicionales de 230.000 millones de pesetas (US$ 1.243 millones al cambio actual).
Desde 1990, Aerolíneas Argentinas ha costado a la Sepi US$ 1.800 millones, una cifra que Ferreras calificó de “escandalosa”.
(EFE).- El personal técnico de las empresas Aerolíneas Argentinas y Austral inició hoy (martes 24) un paro por tiempo indefinido en protesta por el plan de saneamiento de ambas compañías aéreas controladas por la sociedad estatal española Sepi.
La protesta se inició a las 10 y afecta a las secciones de mantenimiento de las dos empresas en todos los aeropuertos del país.
Según Ricardo Cirielli, secretario general de la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), el paro obedece a que algunos empleados “ya comenzaron a recibir telegramas de despido”.
Aerolíneas Argentinas y Austral, privatizadas en 1990, están bajo control de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) de España, que el pasado octubre acordó con el Gobierno argentino un plan de saneamiento de ambas compañías para revertir su crítica situación, marcada por grandes deudas y pérdidas operativas.
Tres sindicatos de trabajadores de Aerolíneas Argentinas y Austral -los de personal de cabina, personal técnico y personal técnico aeronáutico- se oponen a la puesta en marcha de ese plan, que comprende una capitalización de ambas empresas, pero también medidas para racionalizar sus gastos y aumentar su competitividad.
Con 6.700 empleados en conjunto, Aerolíneas Argentinas y Austral tienen pérdidas anuales del orden de los US$ 240 millones y unas deudas acumuladas de más de US$ 900 millones.
Hoy, desde Madrid, el presidente de la Sepi, Pedro Ferreras, dijo que la sociedad estatal aplicará el Plan Director de la compañía aérea a pesar de la oposición de dos de los siete sindicatos de la empresa.
El directivo realizó estas declaraciones ante la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso español de los Diputados al referirse a ese plan director, que contempla reducir la plantilla en 1.315 empleados.
Ferreras señaló que una vez agotado el plazo para negociar con los dos sindicatos que rechazan el plan, el de técnicos de mantenimiento (APTA) y el de azafatas (AAA), la Sepi ha decidido seguir adelante.
La aerolínea comunicará la rescisión de sus contratos a 250 empleados pertenecientes a los colectivos con cuyos sindicatos no hay acuerdo, ya que el resto de las bajas se ha negociado con las cinco centrales con las que sí se ha logrado un compromiso.
En los últimos meses, se han producido 700 bajas voluntarias en la compañía aérea argentina.
Ferreras reconoció que transferir la gestión de Aerolíneas Argentinas a American Airlines fue “un error que se ha pagado caro”.
Según el presidente de la Sepi, esta decisión retrasó su saneamiento un año, periodo en el que se acumularon unas pérdidas adicionales de 230.000 millones de pesetas (US$ 1.243 millones al cambio actual).
Desde 1990, Aerolíneas Argentinas ha costado a la Sepi US$ 1.800 millones, una cifra que Ferreras calificó de “escandalosa”.
