Kodak sigue restructurándose y despide a otros cinco mil
Eastman Kodak, la mayor compañía mundial de artículos para fotografía, eliminará cinco mil puestos laborales más que los previstos. Ello debe a que se retira del segmento minorista de películas.
Por ende, proyecta despedir de 28.000 a 30.000 personas, con lo cual la organización se habrá achicado a la mitad de lo era hace cuatro años. El cálculo original iba de 25.00 a 28.000. Eso elevará los gastos por indemnizaciones hasta US$ 3.800 millones.
Antonio Pérez, director ejecutivo, se ha comprometido ante la junta a transformar la empresas en proveedora exclusiva de material digital este mismo año. En un contexto de menor demanda analógica entre el público lego de las economías centrales (los profesionales son otra cosa), los nuevo recortes –empero- afectan a una división de vanguardia, dedicada a imágener para uso médico.
El ejecutivo inició el achique en 2004 y, hasta ahora, había prescindido de 23.400 puestos a un costo de US$ 2.700 millones. Ya no podìa caminar por Rochester. En esta ciudad, la compañía había llegado inclusive a mantener una orquesta sinfónica durante cuarenta años. Se dedicaba a repertorio norteamericano.
A criterio de algunos analistas, esta metamorfosis puede tomar más tiempo del asegurado por Pérez. En realidad, gente de Wall Street ve en Kodak un paciente terminal en terapia intensiva. Sólo este año, la restructuración exigirá de US$ 575 a 625 millones. En el cuarto trimestre de 2006, la firma logró su primer superávit en más de dos años, pero sólo tras eliminar 1.200 puestos laborales.
Kodak insiste en proyectar 28 a 29% como margen de utilidad para 2009, contra 25,5% en 2006. Pero eso excluye la división médica. Los réditos operativos debieran alcanzar 8/9% de las ventas en un par de años, contra el actual 2,6%. A juicio de la empresa, en 2007 las operaciones digitales aportarán este año ganancias por US$ 300 millones. Entretanto, la futura fuerza de trabajo oscilará en alrededor de 35.000 personas, un tercio de los 143.000 que había en 1998.
Los ingresos totales sumarán en 2007 entre US$ 10.000 y 10.400 millones, contra 10.800 millones en 2006. Los márgenes brutos serán casi iguales a los de 2006 (25,5%).
Por ende, proyecta despedir de 28.000 a 30.000 personas, con lo cual la organización se habrá achicado a la mitad de lo era hace cuatro años. El cálculo original iba de 25.00 a 28.000. Eso elevará los gastos por indemnizaciones hasta US$ 3.800 millones.
Antonio Pérez, director ejecutivo, se ha comprometido ante la junta a transformar la empresas en proveedora exclusiva de material digital este mismo año. En un contexto de menor demanda analógica entre el público lego de las economías centrales (los profesionales son otra cosa), los nuevo recortes –empero- afectan a una división de vanguardia, dedicada a imágener para uso médico.
El ejecutivo inició el achique en 2004 y, hasta ahora, había prescindido de 23.400 puestos a un costo de US$ 2.700 millones. Ya no podìa caminar por Rochester. En esta ciudad, la compañía había llegado inclusive a mantener una orquesta sinfónica durante cuarenta años. Se dedicaba a repertorio norteamericano.
A criterio de algunos analistas, esta metamorfosis puede tomar más tiempo del asegurado por Pérez. En realidad, gente de Wall Street ve en Kodak un paciente terminal en terapia intensiva. Sólo este año, la restructuración exigirá de US$ 575 a 625 millones. En el cuarto trimestre de 2006, la firma logró su primer superávit en más de dos años, pero sólo tras eliminar 1.200 puestos laborales.
Kodak insiste en proyectar 28 a 29% como margen de utilidad para 2009, contra 25,5% en 2006. Pero eso excluye la división médica. Los réditos operativos debieran alcanzar 8/9% de las ventas en un par de años, contra el actual 2,6%. A juicio de la empresa, en 2007 las operaciones digitales aportarán este año ganancias por US$ 300 millones. Entretanto, la futura fuerza de trabajo oscilará en alrededor de 35.000 personas, un tercio de los 143.000 que había en 1998.
Los ingresos totales sumarán en 2007 entre US$ 10.000 y 10.400 millones, contra 10.800 millones en 2006. Los márgenes brutos serán casi iguales a los de 2006 (25,5%).
