Italia: otra tangentopoli, pero ahora en el fútbol

Por fin, fiscales e investigadores empiezan a desenredar el ovillo de corrupción en el negocio del fútbol. Como en la Tangentopoli original o en el caso P-2, las claves aparecen en cuentas suizas.

15 agosto, 2003

Una parte todavía no precisada de sobornos vinculados a fraudes atribuidos
a cuatro clubes -que son también sociedades civiles- apareció en
banco helvéticos. El dinero pagado por garantías y avales falsos,
para que Napoli, Roma, Cosenza y Spal pudiesen inscribirse en el próximo
campeonato italiano, fue parcialmente sacado del país.

Por ahora, los sobornos individuales suman cerca de € 1.000.000. La policía
ya ha detenido al agente financiero Paolo Landi, mientras intentaba cruzar la
frontera cerca de Lugano, con parte de ese dinero y documentación comprometedora.

A raíz de eso, el tribunal romano a cargo de la causa indagará
a Luca Rigone, agente de seguros que actuó como intermediario en el trámite
de garantías falsas para Cosenza y Spal. También citó como
imputado al empresario Amedeo Santoro, ex ejecutivo de SBC, brazo financiero
de Fedecalcio (la AFA italiana), como fuente de los avales fraguados que recibió
Landi.

El escándalo incluye a Giovanni de Vita, abogado y presunto "ideólogo"
del fraude. También a Gabriele Turchetti, secretario de Covisoc (la SEC
italiana, reguladora contable, que acaba de pedir licencia por tiempo indeterminado.
Si se confirman maquillajes de balances, la situación de los clubes será
muy delicada.

En el plano político, mientras tanto, presiones de Silvio Berlusconi
-primer ministro y virtual dueño del Milan- le han torcido el brazo al
consejo directivo de Federcalcio (Coni). Así, ha resuelto no intervenir
los cuatro clubes infractores y permitirles jugar en el campeonato.

Una parte todavía no precisada de sobornos vinculados a fraudes atribuidos
a cuatro clubes -que son también sociedades civiles- apareció en
banco helvéticos. El dinero pagado por garantías y avales falsos,
para que Napoli, Roma, Cosenza y Spal pudiesen inscribirse en el próximo
campeonato italiano, fue parcialmente sacado del país.

Por ahora, los sobornos individuales suman cerca de € 1.000.000. La policía
ya ha detenido al agente financiero Paolo Landi, mientras intentaba cruzar la
frontera cerca de Lugano, con parte de ese dinero y documentación comprometedora.

A raíz de eso, el tribunal romano a cargo de la causa indagará
a Luca Rigone, agente de seguros que actuó como intermediario en el trámite
de garantías falsas para Cosenza y Spal. También citó como
imputado al empresario Amedeo Santoro, ex ejecutivo de SBC, brazo financiero
de Fedecalcio (la AFA italiana), como fuente de los avales fraguados que recibió
Landi.

El escándalo incluye a Giovanni de Vita, abogado y presunto "ideólogo"
del fraude. También a Gabriele Turchetti, secretario de Covisoc (la SEC
italiana, reguladora contable, que acaba de pedir licencia por tiempo indeterminado.
Si se confirman maquillajes de balances, la situación de los clubes será
muy delicada.

En el plano político, mientras tanto, presiones de Silvio Berlusconi
-primer ministro y virtual dueño del Milan- le han torcido el brazo al
consejo directivo de Federcalcio (Coni). Así, ha resuelto no intervenir
los cuatro clubes infractores y permitirles jugar en el campeonato.

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