Hidrocarburos: alianza indoitaliana y límites rusos a Gazprom
Acaba de firmarse una carta de intención entre Ente Nazionale Idrocarburi (ENI) y Oil & Natural Gas, monopolio indio. Los italianos ya tienen concesiones en Radyastán y las islas Andamán. También hay novedades en Moscú.
El acuerdo no pudo llegar en mejor momento para ambos países. Por un lado, Delhi había perdido la puja con Beijing por PyetroKadzajstán. Por el otro, ENI tenía urgencia en complementar las concesiones de cateo en el noroeste de India y la plataforma submarina del archipiélago, frente a Tailandia y la cuenca gasífera de la californiana Unocal, recién adquirida por Chrevron, tras un intento chino frustrado.
Este compromiso coincide con una interna en Fiat. Por una parte, Luca Montezemolo –presidente del directorio y hombre de los Agnelli- no desmiente contactos personales con Tata Motor. Por la otra, el director ejecutivo los niega. Sergio Marchionne viene distanciándose de Montezemolo (que tiene más poder real en el grupo) y, además, se opone a alianzas en el exterior.
En el complejo juego eurasiático de hidrocarburos, se mueven otras piezas claves. Gazprom, coloso estatal ruso –el mayor del mundo en ese campo-, ya no podrá comprar firmas rivales en el país. Así ha dictaminado la junta antimonopólica de la Federación.
Lo curioso es que veredicto coincida con la adquisición de 51% en el paquete NorthGas, una firma extranjera. Pero quizás el objeto real sea invalidar la oferta pública accionaria (US$ 10.000 millones) de Gazprom sobre Syíbñeft, una de las petroleras antes controladas por Yukos (o sea, Míjail Jodorkovsky, aún entre rejas).
Ahora bien, ha trascendido en Milán que Gazprom ha puesto los ojos en la italiana Snam Rete Gas. Los vericuetos del negocio continental explican, de paso, que el monopolio chino del gas (Cnooc, por supuesto) también esté interesado en activos italianos.
El acuerdo no pudo llegar en mejor momento para ambos países. Por un lado, Delhi había perdido la puja con Beijing por PyetroKadzajstán. Por el otro, ENI tenía urgencia en complementar las concesiones de cateo en el noroeste de India y la plataforma submarina del archipiélago, frente a Tailandia y la cuenca gasífera de la californiana Unocal, recién adquirida por Chrevron, tras un intento chino frustrado.
Este compromiso coincide con una interna en Fiat. Por una parte, Luca Montezemolo –presidente del directorio y hombre de los Agnelli- no desmiente contactos personales con Tata Motor. Por la otra, el director ejecutivo los niega. Sergio Marchionne viene distanciándose de Montezemolo (que tiene más poder real en el grupo) y, además, se opone a alianzas en el exterior.
En el complejo juego eurasiático de hidrocarburos, se mueven otras piezas claves. Gazprom, coloso estatal ruso –el mayor del mundo en ese campo-, ya no podrá comprar firmas rivales en el país. Así ha dictaminado la junta antimonopólica de la Federación.
Lo curioso es que veredicto coincida con la adquisición de 51% en el paquete NorthGas, una firma extranjera. Pero quizás el objeto real sea invalidar la oferta pública accionaria (US$ 10.000 millones) de Gazprom sobre Syíbñeft, una de las petroleras antes controladas por Yukos (o sea, Míjail Jodorkovsky, aún entre rejas).
Ahora bien, ha trascendido en Milán que Gazprom ha puesto los ojos en la italiana Snam Rete Gas. Los vericuetos del negocio continental explican, de paso, que el monopolio chino del gas (Cnooc, por supuesto) también esté interesado en activos italianos.
