GM cierra Saab tras el fracaso de gestiones
Canceladas las tratativas con la sueca Königsegg y anulados los contactos con la holandesa Spyker Cars, General Motors tira la toalla. Vale decir, desactiva Saab, que cumple 72 años. No obstante, la compañía de Detroit sólo la manejó en los últimos.
<p>Dos fracasos en cuatro semanas era demasiado, máxime sumando el desistimiento de vender Opel-Vauxhall al consorcio Magna-Gaz-Sbyerbank. De todos modos, un matrimonio con Spyker habría sido problemático: esta empresa fabrica coches deportivos que cuestan de US$ 250.000 para arriba.<br />
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En lo tocante a Saab (ex Saab-Scania), cubrirá todas sus deudas, inclusive a los proveedores. También continuará entregando partes y repuestos, amén de satisfacer garantías y servicios posventa. <br />
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El fin de Saab en cierto modo corona dos meses de reestructuraciones en las actividades europeas de GM. El 3 de noviembre, la compañía estadounidense dejó sin efecto la venta de Opel-Vauxhall y resolvió conservar ambas marcas, originalmente independientes, aun cerrando algunas plantas.<br />
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Edward Whitacre, director ejecutivo de la hoy segunda automotriz en Detroit, había anticipado hace poco el fin de la aventura sueca. Por su parte, Spyker se manifestó “profundamente desilusionada”, en palabras de Viktor Müller, su director gerente.</p>
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