Fiat: mejoran las cifras y las alianzas van de China a Argentina

Según el director ejecutivo, Sergio Marchionne, “se han cumplido las metas propuestas y se confirman las de 2007. Todas las divisiones del grupo generan efectivo y utilidades”. Igual señala Luca Cordero Montezemolo, presidente del directorio.

24 abril, 2007

Durante el primer trimestre del año, los ingresos sumaron € 13.675 millones, 8,9% sobre igual lapso de 2006 (12.555 millones). Los resultados operativos ascendieron a 595 millones, nada menos que 84,2% más que los 323 millones en enero-marzo de 2006.

El rédito neto fue € 574 millones, o sea 147,4% sobre igual período del año pasado. Las ganancias netas, por ende, alcanzaron € 376 millones. Ello equivale a 150,7% por encima del primer trimestre de 2006.

“Estos resultados demuestran que nuestra política de alianzas globales es efectiva”, comentaba Montezemolo. Presidente de Confederazione nazionale dell’industria, es artífice justamente de ese esquema y, en un plano más discreto, logró substituir a los Agnelli en el comando.

La expansión del Lingote es evidente. En la Unión Europea, la porción de mercado toca 8,5% y marcha rumbo a 10%, particularmente por la vuelta del 500. En Polonia y alrededores, el caballito de batalla es el Panda, que también entra en China e India.

Esas dos potencias asiáticas están cubiertas por la alianza Fiat-Tata, igual que Argentina, donde se avecinan más cambios. En este caso, influirán acuerdos con la china Chery (coches económicos) y otros modelos destinados a Brasil.

Sin duda, éste es la clave latinoamericana del grupo y bate récords casi mensuales. Para julio, el 500 ingresará a ese mercado. Al cabo de dos generaciones, el panorama se ha dado vuelta: en los años 50/60, el 600 era punta de lanza para desarrollar un gran mercado argentino para modelos baratos (Fiat, Citroën, Renaulty marcas menores). Ahora, ese papel lo cumple Brasil, mientras los vecinos meridionales se dedican a vehículos más caros, para exportación.

Durante el primer trimestre del año, los ingresos sumaron € 13.675 millones, 8,9% sobre igual lapso de 2006 (12.555 millones). Los resultados operativos ascendieron a 595 millones, nada menos que 84,2% más que los 323 millones en enero-marzo de 2006.

El rédito neto fue € 574 millones, o sea 147,4% sobre igual período del año pasado. Las ganancias netas, por ende, alcanzaron € 376 millones. Ello equivale a 150,7% por encima del primer trimestre de 2006.

“Estos resultados demuestran que nuestra política de alianzas globales es efectiva”, comentaba Montezemolo. Presidente de Confederazione nazionale dell’industria, es artífice justamente de ese esquema y, en un plano más discreto, logró substituir a los Agnelli en el comando.

La expansión del Lingote es evidente. En la Unión Europea, la porción de mercado toca 8,5% y marcha rumbo a 10%, particularmente por la vuelta del 500. En Polonia y alrededores, el caballito de batalla es el Panda, que también entra en China e India.

Esas dos potencias asiáticas están cubiertas por la alianza Fiat-Tata, igual que Argentina, donde se avecinan más cambios. En este caso, influirán acuerdos con la china Chery (coches económicos) y otros modelos destinados a Brasil.

Sin duda, éste es la clave latinoamericana del grupo y bate récords casi mensuales. Para julio, el 500 ingresará a ese mercado. Al cabo de dos generaciones, el panorama se ha dado vuelta: en los años 50/60, el 600 era punta de lanza para desarrollar un gran mercado argentino para modelos baratos (Fiat, Citroën, Renaulty marcas menores). Ahora, ese papel lo cumple Brasil, mientras los vecinos meridionales se dedican a vehículos más caros, para exportación.

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