Crisis en el mercado de la salud

Según un estudio de la Fundación Isalud, el sistema sanitario argentino perdió ingresos por $ 14.000 millones en los últimos cinco años. Las obras sociales perdieron más de dos millones de afiliados.

10 agosto, 2001

(NA). – Las sucesivas reformas y recortes aplicados al sistema de seguridad social en los últimos cinco años hicieron resignar ingresos por unos $ 14.000 millones al sistema sanitario argentino, mientras que también las obras sociales se desfinanciaron, al perder más de dos millones de afiliados por el incremento de la desocupación y del trabajo en
negro.

Así lo reveló el ex ministro de Salud bonaerense y rector del Instituto Universitario Isalud, Ginés González García, al disertar en el IV Congreso Argentino de Salud organizado por la Asociación Civil de Actividades Médicas Integradas en Córdoba.

En este marco, explicó, además, que el desfinanciamiento del sistema sanitario “condiciona el nivel de productividad” y termina “atentando contra el crecimiento económico de una Nación”.

Según un estudio elaborado por la Fundación Isalud, en los últimos cinco años el sistema sanitario argentino dejó de percibir $ 14.726,4 millones, como consecuencia de las medidas
implementadas para hacer “más competitiva la economía y la salud, e incluyeron una fuerte rebaja de aportes patronales, que benefició principalmente a las empresas privatizadas”.

Sólo por la baja de los costos laborales, el sector sanitario perdió $ 3.752,3 millones desde 1995, indica asimismo el estudio.

Al exponer durante la segunda jornada del IV Congreso Argentino de Salud organizado por Acami, González García criticó la “desfinanciación” que sufrió el sector en los últimos años, y consideró “ridículo y absurdo no entender que el nivel sanitario pauta la productividad de un país”.

En el marco de este Congreso, los especialistas elaboraron un diagnóstico preciso sobre la crisis que atraviesa el sistema sanitario argentino, donde una de cada tres personas carece de cobertura médica, por lo cual debe recurrir a un hospital público en crisis como única alternativa de atención y tiene vedado el acceso a descuentos en los precios de medicamentos, por no tener obra social.

“El 20% más pobre de la población deja de adquirir medicamentos con una frecuencia cinco veces mayor que el 20% más rico, y muchos argentinos que se sienten enfermos, ni siquiera concurren a los hospitales por no enfrentarse con una revisión médica que terminará con una receta que no podrán pagar”, señala González García.

Esta crisis generó una mayor demanda sobre los hospitales, que no fue compensada con incrementos presupuestarios y llevó a la crítica situación que atraviesan hoy los nosocomios: en la Capital Federal, las consultas crecieron 20% en el último año, mientras que en el ámbito bonaerense aumentaron 27%, según indicaron los expertos que debatieron en este encuentro.

La desigualdad que sufren los habitantes de la Argentina en materia sanitaria también se refleja en la cantidad de médicos por distrito, ya que 35% de los profesionales matriculados atiende en la Capital Federal, donde se desempeñan 106 facultativos cada 10.000 habitantes, cuando la media del país es de 30 por 10.000, y en algunas provincias hay apenas 10 cada 10.000, como en Tierra del Fuego.

Acami –entidad organizadora del Congreso de Salud– nuclea a prestadores sin fines de lucro y la integran, entre otros, los hospitales Alemán, Británico, Italiano, San Juan de Dios, sanatorio San José, Mater Dei, William Hope, Clínica Reina Fabiola, Hospital Italiano de Córdoba, Cemic, Osde y la Fundación Favaloro.

(NA). – Las sucesivas reformas y recortes aplicados al sistema de seguridad social en los últimos cinco años hicieron resignar ingresos por unos $ 14.000 millones al sistema sanitario argentino, mientras que también las obras sociales se desfinanciaron, al perder más de dos millones de afiliados por el incremento de la desocupación y del trabajo en
negro.

Así lo reveló el ex ministro de Salud bonaerense y rector del Instituto Universitario Isalud, Ginés González García, al disertar en el IV Congreso Argentino de Salud organizado por la Asociación Civil de Actividades Médicas Integradas en Córdoba.

En este marco, explicó, además, que el desfinanciamiento del sistema sanitario “condiciona el nivel de productividad” y termina “atentando contra el crecimiento económico de una Nación”.

Según un estudio elaborado por la Fundación Isalud, en los últimos cinco años el sistema sanitario argentino dejó de percibir $ 14.726,4 millones, como consecuencia de las medidas
implementadas para hacer “más competitiva la economía y la salud, e incluyeron una fuerte rebaja de aportes patronales, que benefició principalmente a las empresas privatizadas”.

Sólo por la baja de los costos laborales, el sector sanitario perdió $ 3.752,3 millones desde 1995, indica asimismo el estudio.

Al exponer durante la segunda jornada del IV Congreso Argentino de Salud organizado por Acami, González García criticó la “desfinanciación” que sufrió el sector en los últimos años, y consideró “ridículo y absurdo no entender que el nivel sanitario pauta la productividad de un país”.

En el marco de este Congreso, los especialistas elaboraron un diagnóstico preciso sobre la crisis que atraviesa el sistema sanitario argentino, donde una de cada tres personas carece de cobertura médica, por lo cual debe recurrir a un hospital público en crisis como única alternativa de atención y tiene vedado el acceso a descuentos en los precios de medicamentos, por no tener obra social.

“El 20% más pobre de la población deja de adquirir medicamentos con una frecuencia cinco veces mayor que el 20% más rico, y muchos argentinos que se sienten enfermos, ni siquiera concurren a los hospitales por no enfrentarse con una revisión médica que terminará con una receta que no podrán pagar”, señala González García.

Esta crisis generó una mayor demanda sobre los hospitales, que no fue compensada con incrementos presupuestarios y llevó a la crítica situación que atraviesan hoy los nosocomios: en la Capital Federal, las consultas crecieron 20% en el último año, mientras que en el ámbito bonaerense aumentaron 27%, según indicaron los expertos que debatieron en este encuentro.

La desigualdad que sufren los habitantes de la Argentina en materia sanitaria también se refleja en la cantidad de médicos por distrito, ya que 35% de los profesionales matriculados atiende en la Capital Federal, donde se desempeñan 106 facultativos cada 10.000 habitantes, cuando la media del país es de 30 por 10.000, y en algunas provincias hay apenas 10 cada 10.000, como en Tierra del Fuego.

Acami –entidad organizadora del Congreso de Salud– nuclea a prestadores sin fines de lucro y la integran, entre otros, los hospitales Alemán, Británico, Italiano, San Juan de Dios, sanatorio San José, Mater Dei, William Hope, Clínica Reina Fabiola, Hospital Italiano de Córdoba, Cemic, Osde y la Fundación Favaloro.

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