Chrysler recortará hasta 25% los costos de abastecimientos
Primero fue la tercerización de modelos económicos vía Nissan-Renault. Ahora, la sexta automotriz mundial intenta reducir gastos en insumos de ahora a 2011. Así lo reveló Giovanni Campi, vicepresidente a cargo de procuración.
18 agosto, 2008


<p>Según explicaba este fin de semana el ejecutivo, los recortes “se efectuarán de varias maneras. Una de ellas será simplificar estructuras y disminuir partes de los automotores. Otra, mantener un cronograma estable de fabricación”. Usando un lenguaje poco habitual en Detroit, Campì sostuvo que “nuestra meta es 25% en recortes”. Naturalmente, medios sindicales sospechan que el plan arriesga perder calidad, ventas y, claro, puestos laborales. “Esto no es Wal-Mart”, ironizaban en United Auto Workers.</p>
<p>La nueva iniciativa de Chrysler complementa y, al mismo tiempo, contradice la anterior. La firma controlada por el fondo Cerberus Capital negocia con Nissan-Renault, que la supera en el “ranking” mundial, una salida a su creciente inviabilidad industrial, la tercerización. La misma idea podría tentar a General Motors o Ford.<br />
<br />
Allegados a la alianza francojaponesa que conduce Carlos Ghosn –brasileño de origen árabe- y a Chrysler misma admiten que Nissan-Renault fabricará medianos de la otra marca. Razones sobran. En Estados Unidos-Canadá, la lista de los sedán cuatro puertas la encabezan el Toyota Camry (42.130 vendidos en julio), el Honda Accord (41.380) y el Nissan Altima (24.430).</p>
<p>Por el contrario, el Dodge Avenger (4.320) y el Chrysler Sebring (3.140) van la cola. Entre ambas puntas figuran modelos como Chrevrolet Malibu (16.630), Pontiac G6 (13.260), Hyundai Sonata (11.400), Ford Fusion (10.600), VW Jetta (8.910), Saturn Aura (7.200) y Subaru Legacy (5.495). Como se ve, en general las marcas de Detroit pìerden ante Asia oriental.</p>
<p>En realidad, Nissan coopera desde 2007 en el desarrollo de camiones y compactos. Ahora se plantea un acuerdo más amplio, pues los japoneses producirán medianos Chrysler, que ésta colocará en la plaza norteamericana. En otras palabras, un nuevo modelo de negocios que puede tentar a GM y Ford. La primera ya controla la surcoreana Daewoo, que compite bien en Asia -oriental, meridional, occidental-, manejada por un director estadounidense ajeno a la trenza de Richard Wagoner.</p>
<p>Por supuesto, Roberto Nardelli y su grupo no quieren hablar del acuerdo con Nissan. Por dos motivos: es una capitulación de Detroit ante Tokio y puede liquidar al ex ejecutivo de Home Depot impuesto en Chrysler por Cerberus. Pero el presidente de junta, James Press, parece pensar de otra manera: “el proyecto D –así se llama es esquema- está centrado en el mercado y los usuarios, no ya en vehículos caros y de alto consumo”.</p>
<p>Al margen de sus problemas de efectivo, entre los 28 modelos que ofrece Chrysler hay apenas dos compactos, el Dodge Avenger y el canadiense Sebring, muy poco vendidos. Pese al silencio de Nardelli y los suyos, Nissan también fabricará este año un subcompacto para colocar a fines de 2009. Para entonces, aparecerá un coche chico tercerizado en China vía Chery Automobile.</p>
<p>Otro síntoma de la vulnerabilidad que exhibe Detroit es la omisión de Renault en medios, comunicados, etc. No obstante, la alianza Nissan-Renault es hoy la quinta automotriz mundial luego de Toyota, GM, Volkswagen y Ford.</p>
<p> </p>
<p> </p>