Andersen: arreglo rechazado
Ha sido rechazada una oferta de Arthur Andersen LLP por US$ 600 millones para resolver demandas extrajudicialmente. Estaba dirigida a un grupo de accionistas, ex empleados y acreedores en Enron Corporation.
22 febrero, 2002
La propuesta data de enero e incluía US$ 260 millones a pagar por el propio estudio –quinto en Estados Unidos- y un monto, algo mayor, por aseguradoras. Poco antes de este rechazo, el martes, Andersen formuló una oferta por US$ 800 millones, en este caso elevada a la propia junta de acreedores.
En general, expertos allegados a acreedores grandes y analistas contables coinciden con la junta. La complejidad de la quiebra y sus ramificaciones impide tener idea clara de las indemnizaciones y compensaciones resultantes. Algunos temen que esa masa alcance los US$ 3.000 millones.
Después de todo, Enron es el mayor colapso registrado desde que existe el Capítulo XI de la ley federal en vigencia. Hasta el momento, inversores, personal y otros perjudicados están reclamando un total superior a US$ 26.000 millones en daños colaterales, o sea originados en la firma matriz y sus 3.000 subsidiarias ocultas. Andersen también afronta problemas propios, que pueden acabar con la firma, derivados de su pasividad durante el derrumbe de Enron que prescindió de los auditores el 17 de enero- , en cuyo curso encubrió pérdidas por no menos de mil millones.
La propuesta data de enero e incluía US$ 260 millones a pagar por el propio estudio –quinto en Estados Unidos- y un monto, algo mayor, por aseguradoras. Poco antes de este rechazo, el martes, Andersen formuló una oferta por US$ 800 millones, en este caso elevada a la propia junta de acreedores.
En general, expertos allegados a acreedores grandes y analistas contables coinciden con la junta. La complejidad de la quiebra y sus ramificaciones impide tener idea clara de las indemnizaciones y compensaciones resultantes. Algunos temen que esa masa alcance los US$ 3.000 millones.
Después de todo, Enron es el mayor colapso registrado desde que existe el Capítulo XI de la ley federal en vigencia. Hasta el momento, inversores, personal y otros perjudicados están reclamando un total superior a US$ 26.000 millones en daños colaterales, o sea originados en la firma matriz y sus 3.000 subsidiarias ocultas. Andersen también afronta problemas propios, que pueden acabar con la firma, derivados de su pasividad durante el derrumbe de Enron que prescindió de los auditores el 17 de enero- , en cuyo curso encubrió pérdidas por no menos de mil millones.