Amazon apela a los precios bajos y las entregas gratuitas
A diferencia de los tres fines de año anteriores, el actual pinta muy favorable para Amazon.com. Al parecer, la librería virtual consigue hacer funcionar una receta que arruinó a muchas puntocom: rebajas de precios y envíos sin cargo.
3 diciembre, 2002
Por de pronto, la firma pudo sortear su peor trimestre, el cuarto de 2001, con
pérdidas superiores a US$ 500 millones, ventas muy por debajo de las expectativas
y 15% del personal despedido. Este año, el panorama fue mejorando, inclusive
en lo tocante a la deuda, que empezó 2002 en alrededor de US$ 2.100 millones.
Así, las ventas se mantuvieron algo encima de los US$ 800 millones en los
primeros tres trimestre de 2002 y, estima la empresa, probablemente superen este
trimestre el nivel de 2001 (US$ 1.100 millones).
Paralelamente, los costos operativos han bajado de 37,5% (IV trimestre de 2001)
a 28% de los ingresos (III trimestre de este año). Pero, como es casi normal
en las puntocom, el problema básico es que no consiguen superávit.
Sin llegar alas pérdidas de 2001 -por ejemplo, US$ 240 millones en el primer
trimestre o 160 millones en el último-, los rojos llegaron a US$ 90 millones
en abril-junio pasados.
“Amazon se maneja ahora como Wal-Mart: menos novedades, precios bajos, descuentos
e incentivos para vender cantidad, más que calidad”, señalaban
dos analistas sectoriales. “Sí. Hemos optado por el modelo de Sam
Walton”, admitió luego Jeff Bezos, fundador y CEO de la firma. A primera
vista, Wall Street aprueba la nueva estrategia: hasta el cierre del miércoles,
la acción de Amazon ha avanzado 118% en el año. Aun así,
el valor de la empresa en el mercado, US$ 8.900 millones, es mucho más
exiguo que en su auge (1998/9).
Por de pronto, la firma pudo sortear su peor trimestre, el cuarto de 2001, con
pérdidas superiores a US$ 500 millones, ventas muy por debajo de las expectativas
y 15% del personal despedido. Este año, el panorama fue mejorando, inclusive
en lo tocante a la deuda, que empezó 2002 en alrededor de US$ 2.100 millones.
Así, las ventas se mantuvieron algo encima de los US$ 800 millones en los
primeros tres trimestre de 2002 y, estima la empresa, probablemente superen este
trimestre el nivel de 2001 (US$ 1.100 millones).
Paralelamente, los costos operativos han bajado de 37,5% (IV trimestre de 2001)
a 28% de los ingresos (III trimestre de este año). Pero, como es casi normal
en las puntocom, el problema básico es que no consiguen superávit.
Sin llegar alas pérdidas de 2001 -por ejemplo, US$ 240 millones en el primer
trimestre o 160 millones en el último-, los rojos llegaron a US$ 90 millones
en abril-junio pasados.
“Amazon se maneja ahora como Wal-Mart: menos novedades, precios bajos, descuentos
e incentivos para vender cantidad, más que calidad”, señalaban
dos analistas sectoriales. “Sí. Hemos optado por el modelo de Sam
Walton”, admitió luego Jeff Bezos, fundador y CEO de la firma. A primera
vista, Wall Street aprueba la nueva estrategia: hasta el cierre del miércoles,
la acción de Amazon ha avanzado 118% en el año. Aun así,
el valor de la empresa en el mercado, US$ 8.900 millones, es mucho más
exiguo que en su auge (1998/9).