Venezuela perdió la bonanza petrolera
El país dejó de ahorrar US$ 150.000 millones. Hoy tiene solo US$ 3 millones en el Fondo de Estabilización Macroeconómica, una situación diferente de la de Kuwait, que ahorró 200.000 millones de dólares.
Venezuela necesita un barril de petróleo de US$ 120 el barril para nivelar sus gastos, por lo que avizora meses difíciles ante un mercado petrolero de bajos precios luego de que la OPEP decidiera mantener su producción en los niveles actuales.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, decretó el viernes un recorte de los sueldos de la plana mayor del Gobierno y gastos suntuarios, pero sin precisar el porcentaje para enfrentar la baja de los ingresos petroleros, principal fuente de ingresos del país y de financiamiento para amplios programas sociales.
No obstante, el presupuesto que está calculado en US$ 60 por barril, solo cubre una parte del gasto público.
Los precios del petróleo han caído 30% desde junio de este año, según informó el canciller de Venezuela, Rafael Ramírez. Este hecho ha presionado a la baja la cesta venezolana de crudo, que se cotizó a finales de noviembre en US$ 68,08 por barril.
“Nos aguardan tiempos muy duros porque 96% de los dólares que le ingresan al país proviene del petróleo”, dijo el economista y ex director de Petróleos de Venezuela, José Toro Hardy. “Esta situación se traduce en tiempos oscuros y difíciles para Venezuela”.
El banco de inversión Barclays Capital estimó que el precio del Brent bajará a US$ 72 el barril de los US$ 93 que cotizaba hace poco meses. Mientras que en el primer trimestre del año entrante ven un promedio de US$ 66 dólares, casi US$ 5 dólares menos que el precio actual.
La firma señala que la caída de los precios del crudo en Nigeria y Venezuela supone conflictos internos, lo que podría afectar el suministro de petróleo.
Con el promedio anual estimado para el año 2015, la cesta de crudo venezolano estaría US$ 10 ó 15 por debajo del promedio internacional, lo que la ubicaría en unos US$ 57-62 por barril.
Sin embargo, Barclays tiene la expectativa de que los precios comenzarán a repuntar sobre los US$ 80 a finales del 2015.
“Si la OPEP asume su papel de estabilizador de los precios, entonces el mercado aguantará incluso una mayor volatilidad en los próximos meses”.
Manos atadas
Uno de los aspectos que más preocupa al ex directivo de PDVSA es que el país no tiene ninguna posibilidad de enfrentar la caída del precio del barril de petróleo. Explica que “en 1997 se aprobó un fondo de estabilización macroeconómica que actualmente solo tiene US$ 3 millones, cuando debería tener US$ 150 mil millones”.
Una situación muy diferente a la de Arabia Saudita y Kuwait (los cuales recientemente se negaron a que la OPEP reduzca sus niveles de producción), que tienen US$ 800 mil millones y 200 mil millones ahorrados, respectivamente.
Toro Hardy explica que una de las razones por las cuales la mayoría de los países miembros de la OPEP se negaron a reducir la producción de crudo fue el temor a que aumente la extracción no convencional (fracking) en otras partes del mundo y que eso provoque a la organización una pérdida de mercado.
El economista estima que el próximo año aumentará la escasez porque no estarán las divisas suficientes para importar lo que se necesita para abastecer el consumo interno. “Lo mismo pasará con las materias primas, mientras la producción nacional seguirá mermando. Todo esto va a conducir a una caída del Producto Interno Bruto y aumentará la inflación”, advierte.
Proyecciones 2015
Conindustria también prevé que el año 2014 cerrará con un decrecimiento de la economía de -2,4% con una inflación de 71,8%. Para el próximo año, igualmente están calculando un crecimiento negativo del PIB de -2,5% con una contracción de la industria manufacturera de -2%. La inflación para el cierre de 2015 la estiman en 87,2%.
Sin embargo, ninguna de las proyecciones hechas por los analistas se puede comprobar debido a la opacidad del Banco Central de Venezuela, que no publica cifras de inflación desde el mes de agosto y desde principios de año, las de la escasez de bienes de consumo.
A pesar de esto, existen ciertos indicios de la situación económica del país: el dólar paralelo alcanzó récords históricos llegando a 155 bolívares por dólar, lo que representa hasta 24 veces el precio que establece Cencoex, con la tasa en 6,30.
Marisela Castillo Apitz / Dinero
