(EFE).- El Gobierno reforzó los controles sanitarios en las fronteras para impedir el ingreso de ganado vacuno “potencialmente portador” de la enfermedad de las “vacas locas”, además de suspender temporalmente las importaciones de determinados productos europeos.
El director del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), Víctor Machinea, dijo que la medida busca proteger al ganado bovino argentino, que está libre de ese mal, en vista de que “no existe el riesgo cero” de contagio.
Señaló que en la zona del nordeste del país, que limita con Brasil, Paraguay y Uruguay, el ganado extranjero puede ingresar a pie gracias a la baja de las aguas de los ríos que marcan la frontera.
El director del Sanasa subrayó, sin embargo, que “no hay que entrar en pánico” y recordó que se profundizaron los controles para proteger a los consumidores del mal de las “vacas locas”, como se llama a la encefalopatía espongiforme bovina (BSE) que afecta al ganado en Europa.
Las autoridades anunciaron el martes la suspensión temporal de las importaciones de alimentos europeos que contienen carne, vísceras o huesos de vacunos y la realización de controles sanitarios a los que ingresaron al país antes de que se tomara esa medida.
“La Argentina ha tomado el asunto como una cuestión de estado y se ha visto obligada a profundizar más las medidas de prevención que estaban vigentes”, comentó.
Víctor Machinea dijo que no está comprobado que la leche vacuna sea también portadora del mal de las “vacas locas”, por lo que no se prohibió la importación de productos con derivados lácteos.
Mientras, el presidente de la Coordinadora de la Industria de la Alimentación (Copal), Alberto Alvarez Gaiani, destacó que “de una vez por todas, la Argentina reacciona como debe” ante la amenaza de que el ganado se infecte con enfermedades que proceden del extranjero.
“Esta vez hay que felicitar al Gobierno por la celeridad con la que han actuado en esta materia”, apuntó.
Los exportadores argentinos de carne vacuna perdieron en los últimos tres meses unos $ 16,5 millones en ventas a Europa, debido al temor de los consumidores europeos a contraer el mal de las “vacas locas”.
El año pasado, perdieron US$ 75 millones cuando Estados Unidos y Canadá prohibieron temporalmente el ingreso de carne argentina a raíz de un rebrote de aftosa, presuntamente por contacto con vacas paraguayas.
El secretario de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, Antonio Berhongaray, consideró que el temor a las “vacas locas” puede ser “una oportunidad” para convencer a los europeos de que consuman más carne argentina, “que está libre de ese mal y sobre todo es más rica”.
“Ayer hablé con importadores de carne de Italia y España y me dijeron que la disminución del consumo de carne argentina es mucho menor que la de otros países, pero lamentablemente, cuando se crea una psicosis, la gente no distingue demasiado”, comentó.
Berhongaray confirmó que el mes próximo se hará una exposición para promover la carne argentina en Italia, con la ayuda del goleador argentino Gabriel Batistuta, del Roma, mientras que la ex tenista Gabriela Sabatini participará en otra que se hará en la ciudad alemana de Hamburgo.
Batistuta y Sabatini, al igual que otras personalidades del deporte nacional, fueron designados “embajadores” honorarios para promover los productos argentinos.
(EFE).- El Gobierno reforzó los controles sanitarios en las fronteras para impedir el ingreso de ganado vacuno “potencialmente portador” de la enfermedad de las “vacas locas”, además de suspender temporalmente las importaciones de determinados productos europeos.
El director del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), Víctor Machinea, dijo que la medida busca proteger al ganado bovino argentino, que está libre de ese mal, en vista de que “no existe el riesgo cero” de contagio.
Señaló que en la zona del nordeste del país, que limita con Brasil, Paraguay y Uruguay, el ganado extranjero puede ingresar a pie gracias a la baja de las aguas de los ríos que marcan la frontera.
El director del Sanasa subrayó, sin embargo, que “no hay que entrar en pánico” y recordó que se profundizaron los controles para proteger a los consumidores del mal de las “vacas locas”, como se llama a la encefalopatía espongiforme bovina (BSE) que afecta al ganado en Europa.
Las autoridades anunciaron el martes la suspensión temporal de las importaciones de alimentos europeos que contienen carne, vísceras o huesos de vacunos y la realización de controles sanitarios a los que ingresaron al país antes de que se tomara esa medida.
“La Argentina ha tomado el asunto como una cuestión de estado y se ha visto obligada a profundizar más las medidas de prevención que estaban vigentes”, comentó.
Víctor Machinea dijo que no está comprobado que la leche vacuna sea también portadora del mal de las “vacas locas”, por lo que no se prohibió la importación de productos con derivados lácteos.
Mientras, el presidente de la Coordinadora de la Industria de la Alimentación (Copal), Alberto Alvarez Gaiani, destacó que “de una vez por todas, la Argentina reacciona como debe” ante la amenaza de que el ganado se infecte con enfermedades que proceden del extranjero.
“Esta vez hay que felicitar al Gobierno por la celeridad con la que han actuado en esta materia”, apuntó.
Los exportadores argentinos de carne vacuna perdieron en los últimos tres meses unos $ 16,5 millones en ventas a Europa, debido al temor de los consumidores europeos a contraer el mal de las “vacas locas”.
El año pasado, perdieron US$ 75 millones cuando Estados Unidos y Canadá prohibieron temporalmente el ingreso de carne argentina a raíz de un rebrote de aftosa, presuntamente por contacto con vacas paraguayas.
El secretario de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, Antonio Berhongaray, consideró que el temor a las “vacas locas” puede ser “una oportunidad” para convencer a los europeos de que consuman más carne argentina, “que está libre de ese mal y sobre todo es más rica”.
“Ayer hablé con importadores de carne de Italia y España y me dijeron que la disminución del consumo de carne argentina es mucho menor que la de otros países, pero lamentablemente, cuando se crea una psicosis, la gente no distingue demasiado”, comentó.
Berhongaray confirmó que el mes próximo se hará una exposición para promover la carne argentina en Italia, con la ayuda del goleador argentino Gabriel Batistuta, del Roma, mientras que la ex tenista Gabriela Sabatini participará en otra que se hará en la ciudad alemana de Hamburgo.
Batistuta y Sabatini, al igual que otras personalidades del deporte nacional, fueron designados “embajadores” honorarios para promover los productos argentinos.