(EFE).- El gerente de la Cámara de la Industria Automotriz de Uruguay (Ciau), Oscar Ramos, denunció hoy (jueves 3) que la falta de “diligencia” de la Argentina ha originado una suspensión temporal de las exportaciones de automóviles uruguayos al país.
Ramos subrayó que actualmente hay 470 automóviles de la marca Renault fabricados en Uruguay que no pueden ser enviados a la Argentina porque este país “no ha cumplido con el trámite” de refrendar ante la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi) la prórroga de un acuerdo entre ambos países.
“Algunos funcionarios argentinos no han actuado con diligencia para refrendar lo acordado con el gobierno uruguayo, lo que ha generado esta situación enojosa y de incertidumbre”, destacó.
La Argentina no ratificó aún la prorroga hasta el 31 de agosto del Convenio Argentino-Uruguayo de Complementación Económica, acordada a fines del junio tras el fracaso del intento de sumar a Paraguay y Uruguay a la política para el sector automotor impulsada por los otros dos socios del Mercosur (la Argentina y Brasil).
“Esta situación crea incertidumbre y nerviosismo, porque desde enero se viene negociando para definir la política regional automotriz sin que se llegue a un acuerdo y se continúan aprobando prórrogas mensuales”, agregó.
“No es posible planificar una estrategia industrial que en algunos casos exige inversión millonaria, cumplir con los compromisos con proveedores y financieros y atender los asuntos de ocupación sin tener reglas claras, conocidas y permanentes”, afirmó el industrial uruguayo.
Para Ramos, el resultado de las negociaciones con el resto de los países del Mercosur para definir la Política Automotriz Común “no es el mejor, pero necesitamos que se defina y saber qué va a pasar de aquí hasta 2005”.
El presidente de la Argentina, Fernando de la Rúa, firmó el pasado 1 de agosto el decreto de entrada en vigor del régimen automotor acordado con Brasil, que regirá hasta la liberalización completa prevista para el 1 de enero de 2006.
Los ministros del bloque volverán a reunirse entre el 24 y el 25 de agosto en Brasil para tratar de superar los obstáculos y llegar a un acuerdo sobre la política del sector del automóvil.
(EFE).- El gerente de la Cámara de la Industria Automotriz de Uruguay (Ciau), Oscar Ramos, denunció hoy (jueves 3) que la falta de “diligencia” de la Argentina ha originado una suspensión temporal de las exportaciones de automóviles uruguayos al país.
Ramos subrayó que actualmente hay 470 automóviles de la marca Renault fabricados en Uruguay que no pueden ser enviados a la Argentina porque este país “no ha cumplido con el trámite” de refrendar ante la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi) la prórroga de un acuerdo entre ambos países.
“Algunos funcionarios argentinos no han actuado con diligencia para refrendar lo acordado con el gobierno uruguayo, lo que ha generado esta situación enojosa y de incertidumbre”, destacó.
La Argentina no ratificó aún la prorroga hasta el 31 de agosto del Convenio Argentino-Uruguayo de Complementación Económica, acordada a fines del junio tras el fracaso del intento de sumar a Paraguay y Uruguay a la política para el sector automotor impulsada por los otros dos socios del Mercosur (la Argentina y Brasil).
“Esta situación crea incertidumbre y nerviosismo, porque desde enero se viene negociando para definir la política regional automotriz sin que se llegue a un acuerdo y se continúan aprobando prórrogas mensuales”, agregó.
“No es posible planificar una estrategia industrial que en algunos casos exige inversión millonaria, cumplir con los compromisos con proveedores y financieros y atender los asuntos de ocupación sin tener reglas claras, conocidas y permanentes”, afirmó el industrial uruguayo.
Para Ramos, el resultado de las negociaciones con el resto de los países del Mercosur para definir la Política Automotriz Común “no es el mejor, pero necesitamos que se defina y saber qué va a pasar de aquí hasta 2005”.
El presidente de la Argentina, Fernando de la Rúa, firmó el pasado 1 de agosto el decreto de entrada en vigor del régimen automotor acordado con Brasil, que regirá hasta la liberalización completa prevista para el 1 de enero de 2006.
Los ministros del bloque volverán a reunirse entre el 24 y el 25 de agosto en Brasil para tratar de superar los obstáculos y llegar a un acuerdo sobre la política del sector del automóvil.