Solá admitió que le gustaría que “Chiche” Duhalde sea su compañera de fórmula

El gobernador bonaerense admitió que le gustaría que su compañera de fórmula en los próximos comicios provinciales sea la actual primera dama al tiempo que se pronunció a favor de que el PJ no haga elecciones internas.

23 enero, 2003

Al respecto, Solá pronosticó que en el Congreso Nacional
Justicialista de mañana “la mayoría se va a inclinar por los
neolemas”, y consideró que ese mecanismo es el más adecuado ante
“el nivel de enfrentamiento al que se ha llegado” en el PJ.

Advirtió que, en caso de que se hiciera una interna, se corre
el riesgo de que “en lugar de solucionar el tema, lo empaste, lo
atranque y lo judicialice”, por lo cual “lo mejor es que el
peronismo aproveche la primera vuelta (de la elección nacional)
para dilucidar” sus diferencias.

En declaraciones a varias radios formuladas esta mañana, el
gobernador sostuvo que la mejor solución “era la ley de elecciones
internas simultáneas y abiertas, que fue suspendida”, ya que en
ellas iba a haber un control ejercido por el Estado.

“Cuando se deja que cada partido haga su interna, el nivel de
control es bajo, y la carga de enfrentamiento y rivalidad es más
fuerte”, indicó, coincidiendo de esta manera con la postura del
presidente Eduardo Duhalde.

Sobre el Congreso partidario de mañana, dijo que “lo que
importa es cuántos congresales tiene cada uno y cómo termina la
votación final”.

“Los de afuera son de palo; y por la idea de las barras bravas
y los ´aprietes´, que cada uno se haga responsable”, dijo el
gobernador.

Respecto de la afirmación del presidente Duhalde acerca de que
“los padrones son truchos”, aclaró que el calificativo
“trucho” no le gusta, “porque parece que todos los padrenes
son falsos”.

Si bien admitió que “es posible que los padrones tengan
problemas”, recordó que “también es cierto que se ha votado con
estos padrones en el año 2001 y entonces no apareció este
problema”.

Por otra parte, descalificó el pedido del menemismo de pedir a
la OEA que fiscalice las elecciones, al afirmar que “forma parte
del humor”, y obedece a que “se trata de impresionar al público, a
que se está perdido, o las dos cosas”.

“Si no podemos resolver nuestros problemas elementales de
alguna manera, también le podemos pedir al comando sur del
Ejército norteamericano que nos venga a ayudar con la seguridad en
el Gran Buenos Aires”, agregó irónicamente.

En otro orden, aseguró que “no está definido que sea un
peronista bonaerense” quien acompañe en la fórmula presidencial a
Néstor Kirchner, y sostuvo que “si uno elige a alguien como
candidato a presidente, debe dejarlo elegir a su compañero”.
Respecto de su candidatura a la gobernación, dijo que no está
resuelto quién lo acompañará como vice, pero indicó su preferencia
por “Chiche” Duhalde.

“Si ella quiere venir, sería una buena fórmula”, concluyó el
gobernador.

Al respecto, Solá pronosticó que en el Congreso Nacional
Justicialista de mañana “la mayoría se va a inclinar por los
neolemas”, y consideró que ese mecanismo es el más adecuado ante
“el nivel de enfrentamiento al que se ha llegado” en el PJ.

Advirtió que, en caso de que se hiciera una interna, se corre
el riesgo de que “en lugar de solucionar el tema, lo empaste, lo
atranque y lo judicialice”, por lo cual “lo mejor es que el
peronismo aproveche la primera vuelta (de la elección nacional)
para dilucidar” sus diferencias.

En declaraciones a varias radios formuladas esta mañana, el
gobernador sostuvo que la mejor solución “era la ley de elecciones
internas simultáneas y abiertas, que fue suspendida”, ya que en
ellas iba a haber un control ejercido por el Estado.

“Cuando se deja que cada partido haga su interna, el nivel de
control es bajo, y la carga de enfrentamiento y rivalidad es más
fuerte”, indicó, coincidiendo de esta manera con la postura del
presidente Eduardo Duhalde.

Sobre el Congreso partidario de mañana, dijo que “lo que
importa es cuántos congresales tiene cada uno y cómo termina la
votación final”.

“Los de afuera son de palo; y por la idea de las barras bravas
y los ´aprietes´, que cada uno se haga responsable”, dijo el
gobernador.

Respecto de la afirmación del presidente Duhalde acerca de que
“los padrones son truchos”, aclaró que el calificativo
“trucho” no le gusta, “porque parece que todos los padrenes
son falsos”.

Si bien admitió que “es posible que los padrones tengan
problemas”, recordó que “también es cierto que se ha votado con
estos padrones en el año 2001 y entonces no apareció este
problema”.

Por otra parte, descalificó el pedido del menemismo de pedir a
la OEA que fiscalice las elecciones, al afirmar que “forma parte
del humor”, y obedece a que “se trata de impresionar al público, a
que se está perdido, o las dos cosas”.

“Si no podemos resolver nuestros problemas elementales de
alguna manera, también le podemos pedir al comando sur del
Ejército norteamericano que nos venga a ayudar con la seguridad en
el Gran Buenos Aires”, agregó irónicamente.

En otro orden, aseguró que “no está definido que sea un
peronista bonaerense” quien acompañe en la fórmula presidencial a
Néstor Kirchner, y sostuvo que “si uno elige a alguien como
candidato a presidente, debe dejarlo elegir a su compañero”.
Respecto de su candidatura a la gobernación, dijo que no está
resuelto quién lo acompañará como vice, pero indicó su preferencia
por “Chiche” Duhalde.

“Si ella quiere venir, sería una buena fórmula”, concluyó el
gobernador.

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