¿Silvani se va de la AFIP?

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El lo niega, pero no es la primera vez que corre el rumor. Pero, esta vez, Chacho Alvarez admitió que hay insatisfacción por su labor. Y la semana pasada, Terragno dijo que quería investigarlo.

El vicepresidente de la Nación, Carlos Chacho Alvarez, admitió hoy (lunes 29) elípticamente la posibilidad de que el gobierno se desprenda del titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Carlos Silvani, al reconocer que existe en la Alianza “un grado de insatisfacción muy alto” con los niveles de recaudación.

No es la primera vez, desde que asumió el gobierno la Alianza, que circulan insistentes rumores sobre el probable desplazamiento de Silvani del cargo que ocupa desde la administración Menem.

Al respecto, fuentes cercanas al gobierno admitieron hoy que Silvani nunca gozó de simpatías entre los miembros del equipo del ministro de Economía, José Luis Machinea, razón por la cual su labor siempre fue cuestionada y seguida muy de cerca.

Incluso, en la Casa de Gobierno circuló el nombre del secretario de Hacienda, Mario Vicens, como el posible reemplazante de Silvani.

No obstante, el propio Silvani negó que vaya a renunciar y afirmó que su relación con el resto del equipo gubernamental “no podría ser mejor”.

“La última decisión la tienen el presidente (Fernando de la Rúa) y el ministro de Economía, pero lo que yo le puedo decir es que hay un grado de insatisfacción muy alto sobre cómo funcionó el sistema recaudatorio en nuestro país”, advirtió Alvarez.

Minutos después de que la administración nacional anunciara el ajuste económico más duro de los últimos años para el sector público, Alvarez reconoció, asimismo, que la evasión impositiva “sigue en cifras muy altas”.

“Hay que poner otra política en la Aduana, que nos cuide del contrabando y que nos sirva para proteger a la industria y a las pymes, que muchas veces se ven confrontadas por la recesión y por una política que no es rigurosa para controlar el contrabando”, dijo.

El vicepresidente aclaró que la suya era “una opinión personal”, aunque “compartida por la mayoría de la Alianza”.

La semana pasada, el vicepresidente de la Cámara de Diputados bonaerense, el frepasista Alejandro Mosquera, presentó una denuncia ante la Oficina Anticorrupción para que ésta investigue si Silvani incurrió en incumplimiento de los deberes de funcionario público.

La denuncia busca determinar si correspondía a la AFIP retener US$ 14 millones que pagó al grupo Yoma en concepto de reintegros por exportaciones, puesto que ese conglomerado debe a bancos públicos alrededor de US$ 100 millones.

Un día más tarde, el jefe del Gabinete, Rodolfo Terragno, se hizo eco de la denuncia y dijo públicamente que iba a investigar la actuación de Silvani.

El vicepresidente de la Nación, Carlos Chacho Alvarez, admitió hoy (lunes 29) elípticamente la posibilidad de que el gobierno se desprenda del titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Carlos Silvani, al reconocer que existe en la Alianza “un grado de insatisfacción muy alto” con los niveles de recaudación.

No es la primera vez, desde que asumió el gobierno la Alianza, que circulan insistentes rumores sobre el probable desplazamiento de Silvani del cargo que ocupa desde la administración Menem.

Al respecto, fuentes cercanas al gobierno admitieron hoy que Silvani nunca gozó de simpatías entre los miembros del equipo del ministro de Economía, José Luis Machinea, razón por la cual su labor siempre fue cuestionada y seguida muy de cerca.

Incluso, en la Casa de Gobierno circuló el nombre del secretario de Hacienda, Mario Vicens, como el posible reemplazante de Silvani.

No obstante, el propio Silvani negó que vaya a renunciar y afirmó que su relación con el resto del equipo gubernamental “no podría ser mejor”.

“La última decisión la tienen el presidente (Fernando de la Rúa) y el ministro de Economía, pero lo que yo le puedo decir es que hay un grado de insatisfacción muy alto sobre cómo funcionó el sistema recaudatorio en nuestro país”, advirtió Alvarez.

Minutos después de que la administración nacional anunciara el ajuste económico más duro de los últimos años para el sector público, Alvarez reconoció, asimismo, que la evasión impositiva “sigue en cifras muy altas”.

“Hay que poner otra política en la Aduana, que nos cuide del contrabando y que nos sirva para proteger a la industria y a las pymes, que muchas veces se ven confrontadas por la recesión y por una política que no es rigurosa para controlar el contrabando”, dijo.

El vicepresidente aclaró que la suya era “una opinión personal”, aunque “compartida por la mayoría de la Alianza”.

La semana pasada, el vicepresidente de la Cámara de Diputados bonaerense, el frepasista Alejandro Mosquera, presentó una denuncia ante la Oficina Anticorrupción para que ésta investigue si Silvani incurrió en incumplimiento de los deberes de funcionario público.

La denuncia busca determinar si correspondía a la AFIP retener US$ 14 millones que pagó al grupo Yoma en concepto de reintegros por exportaciones, puesto que ese conglomerado debe a bancos públicos alrededor de US$ 100 millones.

Un día más tarde, el jefe del Gabinete, Rodolfo Terragno, se hizo eco de la denuncia y dijo públicamente que iba a investigar la actuación de Silvani.

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