Sigue sin resolverse la situación
Los principales partidos incluidos los de la Alianza condicionan su apoyo al acuerdo de unidad. El PJ no quiere conceder los poderes especiales que reclamó De la Rúa.
(DYN).- El gran acuerdo de unidad nacional al que convocó el presidente Fernando de la Rúa parecía estancado esta noche (lunes 19) a raíz de la decisión de los partidos políticos mayoritarios de condicionar su apoyo a una profunda discusión del plan económico, mientras permanecía siendo incierto el futuro rol del ex ministro Domingo Cavallo en la administración nacional.
En tanto, mientras continuaban a medianoche las reuniones para intentar salir de la delicada situación, tanto De la Rúa desde Chile, como su vocero Ricardo Ostuni al regresar del vecino país, dijeron que mañana se conocerá el nuevo gabinete nacional.
Al mediodía, De la Rúa destacó que prefirió “dejar para mañana la asunción del nuevo gabinete” para asistir hoy a la inauguración de la Asamblea del BID.
Por la noche, Ostuni afirmó desde Aeroparque que “mañana posiblemente se conozca el gabinete”.
La probable decisión del Parlamento de no delegar facultades excepcionales al Poder Ejecutivo actuaba como un obstáculo para la incorporación inmediata de Cavallo al gabinete, a pesar de que el jefe del Estado consideró desde Chile como una “posibilidad cierta” el ingreso del ex funcionario menemista al elenco de ministros.
Luego de arduas deliberaciones y contactos reservados entre sus principales integrantes, el radicalismo y el Frepaso condicionaron, por separado, su participación en el futuro gobierno de unidad a una rediscusión del rumbo económico y el debate de las medidas anunciadas el último viernes por el ministro Ricardo López Murphy.
Las deliberaciones entre los radicales cobrarán mañana un voltaje superior al de la jornada con la llegada del titular de la UCR, Raúl Alfonsín, un archienemigo de Cavallo, que, a pesar de todo, estaría dispuesto a no sacarle el hombro al Presidente ante la grave crisis.
Pero, igual que el resto de su partido, quiere conocer en detalle los planes del Gobierno.
En tanto, diputados, senadores y gobernadores peronistas rehusaron darle “un cheque en blanco” al Gobierno sin conocer cuáles serán las medidas económicas del futuro.
De la Rúa pidió ayer al Congreso facultades especiales a través del artículo 76 de la Constitución Nacional para poder definir por decreto los trazos gruesos de su política económica pero recibió hoy la rotunda respuesta negativa del peronismo, que evaluó con recelo el reclamo presidencial.
El ex presidente Carlos Menem y el gobernador Carlos Ruckauf –quienes ven bien el ingreso de Cavallo a la administración aliancista– fueron, junto a José de la Sota, los ejes de una jornada cargada de consultas.
“El dialogo es imprescindible también un acuerdo de unidad nacional, pero este acuerdo debate tener una base de análisis. No es que tire medidas y después decidan que tenemos que ir a aceptarlas”, dijo Ruckauf al término de una reunión de gobernadores peronistas.
(DYN).- El gran acuerdo de unidad nacional al que convocó el presidente Fernando de la Rúa parecía estancado esta noche (lunes 19) a raíz de la decisión de los partidos políticos mayoritarios de condicionar su apoyo a una profunda discusión del plan económico, mientras permanecía siendo incierto el futuro rol del ex ministro Domingo Cavallo en la administración nacional.
En tanto, mientras continuaban a medianoche las reuniones para intentar salir de la delicada situación, tanto De la Rúa desde Chile, como su vocero Ricardo Ostuni al regresar del vecino país, dijeron que mañana se conocerá el nuevo gabinete nacional.
Al mediodía, De la Rúa destacó que prefirió “dejar para mañana la asunción del nuevo gabinete” para asistir hoy a la inauguración de la Asamblea del BID.
Por la noche, Ostuni afirmó desde Aeroparque que “mañana posiblemente se conozca el gabinete”.
La probable decisión del Parlamento de no delegar facultades excepcionales al Poder Ejecutivo actuaba como un obstáculo para la incorporación inmediata de Cavallo al gabinete, a pesar de que el jefe del Estado consideró desde Chile como una “posibilidad cierta” el ingreso del ex funcionario menemista al elenco de ministros.
Luego de arduas deliberaciones y contactos reservados entre sus principales integrantes, el radicalismo y el Frepaso condicionaron, por separado, su participación en el futuro gobierno de unidad a una rediscusión del rumbo económico y el debate de las medidas anunciadas el último viernes por el ministro Ricardo López Murphy.
Las deliberaciones entre los radicales cobrarán mañana un voltaje superior al de la jornada con la llegada del titular de la UCR, Raúl Alfonsín, un archienemigo de Cavallo, que, a pesar de todo, estaría dispuesto a no sacarle el hombro al Presidente ante la grave crisis.
Pero, igual que el resto de su partido, quiere conocer en detalle los planes del Gobierno.
En tanto, diputados, senadores y gobernadores peronistas rehusaron darle “un cheque en blanco” al Gobierno sin conocer cuáles serán las medidas económicas del futuro.
De la Rúa pidió ayer al Congreso facultades especiales a través del artículo 76 de la Constitución Nacional para poder definir por decreto los trazos gruesos de su política económica pero recibió hoy la rotunda respuesta negativa del peronismo, que evaluó con recelo el reclamo presidencial.
El ex presidente Carlos Menem y el gobernador Carlos Ruckauf –quienes ven bien el ingreso de Cavallo a la administración aliancista– fueron, junto a José de la Sota, los ejes de una jornada cargada de consultas.
“El dialogo es imprescindible también un acuerdo de unidad nacional, pero este acuerdo debate tener una base de análisis. No es que tire medidas y después decidan que tenemos que ir a aceptarlas”, dijo Ruckauf al término de una reunión de gobernadores peronistas.
