Sectores clave alcanzarán su límite de producción en 2010
Podría quedar comprometida la competitividad nacional cuando en 2010-2011 según pronostica abeceb.com lleguen al tope de su capacidad la refinación de petróleo, la industria de alimentos y bebidas, el sector textil y el de papel.
<p> En 2010-2011, si continúa el repunte de la demanda internacional y local, la industria recuperará los niveles máximos de producción alcanzados en 2008. Eso significa, en principio, que la utilización de capacidad instalada volvería a los máximos de ese año, ya que el flujo de inversiones comenzó a contraerse a partir del segundo trimestre de 2008.</p>
<p> En este sentido, resulta de importancia identificar los sectores en los que la utilización de la capacidad instalada estaba llegando a un máximo a principios de 2008, para que, ante una recomposición de la demanda, las restricciones de la capacidad instalada no se vuelvan limitaciones en la competitividad.</p>
<p> Por ejemplo, la industria de refinación del petróleo superó el 95% de utilización de capacidad instalada en mayo de 2008. Le siguieron las industrias de papel y cartón, la de edición e impresión y la de alimentos y bebidas, en las que la utilización máxima de capacidad instalada se ubicó entre un 87% y un 93% en el período.</p>
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<p><strong>Análisis de la utilización de la Capacidad Instalada / Perspectivas 2010</strong></p>
<p>Los indicadores de la industria comenzaron a dar señales de recuperación a partir del segundo semestre de este año. En su serie desestacionalizada, el EMI presentó la quinta suba mensual consecutiva en el mes de noviembre, con un aumento del 1,1% en relación a octubre.</p>
<p>Esa tendencia también se refleja en las estadísticas privadas: En su último informe, la UIA afirmó, que si bien la producción industrial tuvo en octubre un descenso del 5,8% en la comparación interanual, en la serie desestacionalizada, se observó un crecimiento del 0,5% con respecto a septiembre, lo que consolida un aumento acumulado del 8,5% con respecto al piso alcanzado en febrero.</p>
<p>El mayor aporte al repunte de la producción industrial en el último bimestre provino de las industrias automotriz y siderúrgica. En ambos casos, en octubre se alcanzó el máximo nivel mensual de producción en 2009 (57.439 unidades y 430 mil toneladas respectivamente) aunque en la comparación interanual todavía se observaron descensos. En noviembre, en cambio, si bien la producción fue inferior a la de octubre, en la comparación interanual ambas presentaron por primera vez incrementos respecto a noviembre de 2008 (32,1% y 5,9% respectivamente). Cabe recordar, que en dicho mes las industrias automotriz y siderúrgica comenzaban a sentir el impacto de la crisis internacional, con caídas interanuales superiores al 20% respecto a 2007.</p>
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<p>Otros sectores que impulsaron el crecimiento de la producción industrial en el segundo semestre fueron el de alimentos y bebidas y el de sustancias y productos químicos. Estos son los que mayor crecimiento presentan en el acumulado del año (9,4% y 10,4% respectivamente según el INDEC) y, por su participación en el índice, los que más explican el crecimiento de la industria en 2009. También aportó la reversión de la caída que venía presentando la producción textil, que pasó de una caída promedio del 13% en el primer semestre a un crecimiento interanual promedio del 8,4% entre septiembre y noviembre.</p>
<p>Otra manera de evaluar el desempeño de la producción industrial es mediante la utilización en la capacidad instalada. En un análisis de la evolución mensual, se observa que en la medición del INDEC esta se ubicó por debajo de los niveles de 2008 en todos los meses del año, a excepción de febrero y noviembre.</p>
<p>De acuerdo a la estadística oficial, la industria hizo uso de un 79,2% de su capacidad instalada en el último mes, superando el nivel de utilización de noviembre de 2008 (78,2%) en plena crisis internacional, y ubicándose muy cerca del máximo de la serie alcanzado en el mismo mes de 2007 (79,3%).</p>
<p>Estadísticas alternativas con datos hasta octubre, reflejan una utilización de la capacidad instalada inferior, de 68,2% (FIEL), que a su vez se encuentra a mayor distancia del máximo alcanzado en la serie (seis puntos porcentuales).</p>
<p>Más allá de la diferencia de niveles, tanto las estadísticas oficiales como las privadas reflejan que la brecha de utilización de la capacidad instalada respecto al año 2008 se fue reduciendo.</p>
<p>De acuerdo con el INDEC, luego de alcanzar una caída interanual máxima de 3,3 puntos en la utilización de la capacidad instalada en mayo, se produjo por primera vez en 2009 un aumento de 1 punto en noviembre. En las estadísticas privadas, la caída máxima en la utilización de la capacidad instalada se observó en marzo (6,7 puntos porcentuales) y se fue reduciendo hasta una caída interanual de 3 puntos en octubre.<br />
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<p>En la desagregación por sector se observa que los que mayor uso hicieron de su capacidad instalada en el último trimestre fueron las industrias textil, de papel y cartón, y de edición e impresión. En todos los casos, la utilización superó el 84% de la capacidad instalada según el INDEC.</p>
<p>En cambio, los sectores que más se vieron afectados por la desaceleración de la demanda internacional y la actividad local son los que actualmente hacen un menor uso relativo de su capacidad instalada. En ese grupo, se destacan la industria automotriz y la de metalmecánica, ambas con una utilización interior al 68% de su capacidad instalada de acuerdo a las estadísticas oficiales.</p>
<p>En 2010-2011, si continúa el repunte de la demanda internacional y local, la industria recuperará los niveles máximos de producción alcanzados en 2008. Eso significa, en principio, que la utilización de capacidad instalada volvería a los máximos de ese año, ya que el flujo de inversiones comenzó a contraerse a partir del segundo trimestre de 2008.</p>
<p>En este sentido, resulta de importancia identificar los sectores en los que la utilización de la capacidad instalada estaba llegando a un máximo a principios de 2008, para que, ante una recomposición de la demanda, las restricciones de la capacidad instalada no se vuelvan limitaciones en la competitividad.</p>
<p>Por ejemplo, la industria de refinación del petróleo superó el 95% de utilización de capacidad instalada en mayo de 2008. Le siguieron las industrias de papel y cartón, la de edición e impresión y la de alimentos y bebidas, en las que la utilización máxima de capacidad instalada se ubicó entre un 87% y un 93% en el período. En la otra punta, se ubicaron la metalmecánica y la industria automotriz, con una utilización de la capacidad instalada que por debajo del 75%.<br />
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