Se vienen más retenciones, esta vez a la minería
Las subas de las retenciones a los cereales y petróleo no alcanzan a cubrir los mayores gastos y llegar al superávit presupuestado. El oro y la plata ahora también serían gravados para cumplir con la meta fiscal.
Un nuevo aumento a las retenciones, esta vez al oro y la plata, está por
aplicar el gobierno de Néstor Kirchner antes de la entrega del mando, lo
cual reforzaría las arcas fiscales en $ 2.000 millones que le permitirían
completar los $ 10.000 millones con las ya dispuestas al campo y al petróleo.
Las exportaciones mineras, que está regidas por una ley especial que
permite a las compañías gozar de estabilidad fiscal por 30 años
y disponer de las divisas, superan los US$ 8.500 millones al año y, precisamente,
el oro y la plata han sido los metales que registraron los mayores incrementos
en la cotización internacional.
El gobierno aplicó en consecuencia el mismo criterio que para los cereales
y el petróleo, que consiste en compartir el alza del precio de los commodities
en los mercados mundiales con un mayor gravamen.
La medida está siendo cuidadosamente estudiada por la oficina legal
del Palacio de Hacienda, por cuanto podría ser protestada por el sector
empresario esgrimiendo la legislación específica gracias a la
cual se atrajeron las inversiones.
La minería ha sido la actividad de mayor crecimiento relativo dentro
del PBI, como consecuencia directa del interés que despertó en
los inversionistas extranjeros en toda la región e hizo que el sector
fuera uno de los más dinámicos de la economía real en materia
de inyecciones de capital.
Hasta ahora, uno de los principales problemas que traía la evolución
del negocio minero en el país había sido el relacionado con denuncias
de contaminación.
El más sonado fue el protagonizado en Esquel cuando se concesionó
la explotación de oro y las movilizaciones populares impidieron que se
concretaran las obras en los plazos estipulados en el contrato.
La entidad que representa a los mineros ha tomado un papel activo en imagen
pública, ya que sale a defenderse en los medios, con solicitadas y publicidad
institucional, ante los ataques de las organizaciones ecologistas
La mayor parte de los minerales que se extraen en el país se exportan,
y en la década del 90 se produjo un boom de empresas que llegaron al
país para explotar el negocio. Todo ello fue posible de la mano de una
ley especial que, entre otras cuestiones, les permitió a las empresas
no liquidar las divisas en el país. El esquema se mantendría sin
cambios, salvo en lo que respecta al tratamiento impositivo.
Algunos empresarios estiman, por ejemplo, que el hierro subsidiaría
hasta 40% en 2008, lo que muestra el boom que está viviendo este sector.
Cambio en las reglas
Tal como sucedió con el agro y el petróleo, las mayores retenciones
también generan incertidumbre en el sector minero ante el repentino cambio
de las reglas de juego.
Las principales compañías que operan en el país empezaron
a preparar un descargo jurídico para responder a la medida, si es que
se concreta.
Los dirigentes del campo ya se preparan para una larga puja judicial contra
las retenciones a las exportaciones de granos, que podría durar varios
años.
En este contexto, esta semana las principales entidades del sector comenzarán
a analizar cómo y cuándo harán los primeros planteos en
los tribunales, según informa “La Nación”.
A la decisión adelantada hace unos días por Confederaciones Rurales
Argentinas (CRA) y la Federación Agraria Argentina (FAA) de avanzar por
la vía judicial, se sumaría ahora la Sociedad Rural Argentina
(SRA). Coninagro, que tradicionalmente se ha llevado mejor con la administración
K, tampoco descarta avanzar por esta vía.
Las entidades están definiendo la letra chica de los argumentos que
llevarán a los jueces del fuero Contencioso Administrativo Federal. Sin
embargo, a pesar de la coincidencia en recurrir a la Justicia, cada una hará
su propio camino.
El refuerzo fiscal al que apelaría el gobierno obedece a que las retenciones
al campo y el petróleo no alcanzan para cumplir con el superávit
fiscal comprometido en el proyecto de Presupuesto.
Las erogaciones se incrementaron 48% respecto del año anterior: en los
diez primeros meses de 2007, ya se gastaron $36.000 millones más que
en el mismo período de 2006, lo cual implica un aumento inédito
equivalente a US$ 12.000 millones.
El Ministerio de Economía adujo que dos tercios de esa expansión
se produjo por la suba de las jubilaciones, el régimen de jubilación
anticipada y moratoria provisional, por el lado de la seguridad social, y subsidios
al sector eléctrico.
Un nuevo aumento a las retenciones, esta vez al oro y la plata, está por
aplicar el gobierno de Néstor Kirchner antes de la entrega del mando, lo
cual reforzaría las arcas fiscales en $ 2.000 millones que le permitirían
completar los $ 10.000 millones con las ya dispuestas al campo y al petróleo.
Las exportaciones mineras, que está regidas por una ley especial que
permite a las compañías gozar de estabilidad fiscal por 30 años
y disponer de las divisas, superan los US$ 8.500 millones al año y, precisamente,
el oro y la plata han sido los metales que registraron los mayores incrementos
en la cotización internacional.
El gobierno aplicó en consecuencia el mismo criterio que para los cereales
y el petróleo, que consiste en compartir el alza del precio de los commodities
en los mercados mundiales con un mayor gravamen.
La medida está siendo cuidadosamente estudiada por la oficina legal
del Palacio de Hacienda, por cuanto podría ser protestada por el sector
empresario esgrimiendo la legislación específica gracias a la
cual se atrajeron las inversiones.
La minería ha sido la actividad de mayor crecimiento relativo dentro
del PBI, como consecuencia directa del interés que despertó en
los inversionistas extranjeros en toda la región e hizo que el sector
fuera uno de los más dinámicos de la economía real en materia
de inyecciones de capital.
Hasta ahora, uno de los principales problemas que traía la evolución
del negocio minero en el país había sido el relacionado con denuncias
de contaminación.
El más sonado fue el protagonizado en Esquel cuando se concesionó
la explotación de oro y las movilizaciones populares impidieron que se
concretaran las obras en los plazos estipulados en el contrato.
La entidad que representa a los mineros ha tomado un papel activo en imagen
pública, ya que sale a defenderse en los medios, con solicitadas y publicidad
institucional, ante los ataques de las organizaciones ecologistas
La mayor parte de los minerales que se extraen en el país se exportan,
y en la década del 90 se produjo un boom de empresas que llegaron al
país para explotar el negocio. Todo ello fue posible de la mano de una
ley especial que, entre otras cuestiones, les permitió a las empresas
no liquidar las divisas en el país. El esquema se mantendría sin
cambios, salvo en lo que respecta al tratamiento impositivo.
Algunos empresarios estiman, por ejemplo, que el hierro subsidiaría
hasta 40% en 2008, lo que muestra el boom que está viviendo este sector.
Cambio en las reglas
Tal como sucedió con el agro y el petróleo, las mayores retenciones
también generan incertidumbre en el sector minero ante el repentino cambio
de las reglas de juego.
Las principales compañías que operan en el país empezaron
a preparar un descargo jurídico para responder a la medida, si es que
se concreta.
Los dirigentes del campo ya se preparan para una larga puja judicial contra
las retenciones a las exportaciones de granos, que podría durar varios
años.
En este contexto, esta semana las principales entidades del sector comenzarán
a analizar cómo y cuándo harán los primeros planteos en
los tribunales, según informa “La Nación”.
A la decisión adelantada hace unos días por Confederaciones Rurales
Argentinas (CRA) y la Federación Agraria Argentina (FAA) de avanzar por
la vía judicial, se sumaría ahora la Sociedad Rural Argentina
(SRA). Coninagro, que tradicionalmente se ha llevado mejor con la administración
K, tampoco descarta avanzar por esta vía.
Las entidades están definiendo la letra chica de los argumentos que
llevarán a los jueces del fuero Contencioso Administrativo Federal. Sin
embargo, a pesar de la coincidencia en recurrir a la Justicia, cada una hará
su propio camino.
El refuerzo fiscal al que apelaría el gobierno obedece a que las retenciones
al campo y el petróleo no alcanzan para cumplir con el superávit
fiscal comprometido en el proyecto de Presupuesto.
Las erogaciones se incrementaron 48% respecto del año anterior: en los
diez primeros meses de 2007, ya se gastaron $36.000 millones más que
en el mismo período de 2006, lo cual implica un aumento inédito
equivalente a US$ 12.000 millones.
El Ministerio de Economía adujo que dos tercios de esa expansión
se produjo por la suba de las jubilaciones, el régimen de jubilación
anticipada y moratoria provisional, por el lado de la seguridad social, y subsidios
al sector eléctrico.
