Reacciones al voto contra Cuba
De la Rúa defendió personalmente la decisión. El Frepaso lamentó el voto y consideró que el país debería abstenerse. El embajador cubano en la Argentina criticó la condena.
La decisión de votar nuevamente en contra de Cuba en Naciones Unidas volvió a generar este año un debate en el seno de la Alianza, donde surgieron las más duras manifestaciones de condena a la decisión de apoyar la postura de Estados Unidos en este tema.
Antes de partir hacia Estados Unidos, el presidente Fernando de la Rúa defendió en persona la decisión y dijo que estaba “satisfecho” porque su Gobierno llevó adelante “el trabajo, analizando objetivamente la situación”.
Aseguró, en tal sentido, que en esta decisión “no ha influido nada de carácter subjetivo, ninguna motivación política, ni siquiera de ataques desconocidos.
El titular provisional del Senado, a cargo del Ejecutivo, Mario Losada, pidió “prudencia” y “respeto” a las autoridades cubanas, al salir al cruce del calificativo de “traición” que el embajador de Cuba en Buenos Aires, Alejandro González Galiano, lanzó contra el gobierno argentino.
La conducción del Frepaso dio a conocer su rechazo al voto mediante un texto firmado por su presidente Carlos Alvarez, el presidente del bloque de diputados frepasista Darío Alessandro, el vicepresidente de la comisión de Relaciones Exteriores, Carlos Raimundi, y el secretario general del Partido Socialista Popular, Rubén Giustiniani.
El Frepaso lamentó, de este modo, “el voto favorable de la Argentina a la resolución que condena al estado cubano” y explicó que su postura tiene como argumento dos puntos: Primero se inclina por la abstensión a fin de “no involucrar a nuestro país en un problema político muy delicado, que excede el marco de los derechos humanos”. En segundo lugar, critica “haber desaprovechado una excelente oportunidad para evitar esta encrucijada mediante un planteo integral y superador en materia de derechos humanos”.
En tanto, el ministro del Interior, Ramón Mestre, se definió como un “defensor del Gobierno de Cuba”, aunque opinó que “hay violación de los derechos humanos” en el país gobernador por Fidel Castro.
No obstante, no abundó sobre la postura oficial expuesta ayer en Ginebra: fue “una decisión del canciller Adalberto Rodríguez Giavarini”, indicó, en un intento por distanciarse.
Por su parte, el senador radical Leopoldo Moreau calificó de “vergonzoso, vergonzante y poco inteligente” el voto de condena y consideró que la determinación argentina revela un “alineamiento automático” a los Estados Unidos “parecido al de la época menemista”.
La decisión de votar nuevamente en contra de Cuba en Naciones Unidas volvió a generar este año un debate en el seno de la Alianza, donde surgieron las más duras manifestaciones de condena a la decisión de apoyar la postura de Estados Unidos en este tema.
Antes de partir hacia Estados Unidos, el presidente Fernando de la Rúa defendió en persona la decisión y dijo que estaba “satisfecho” porque su Gobierno llevó adelante “el trabajo, analizando objetivamente la situación”.
Aseguró, en tal sentido, que en esta decisión “no ha influido nada de carácter subjetivo, ninguna motivación política, ni siquiera de ataques desconocidos.
El titular provisional del Senado, a cargo del Ejecutivo, Mario Losada, pidió “prudencia” y “respeto” a las autoridades cubanas, al salir al cruce del calificativo de “traición” que el embajador de Cuba en Buenos Aires, Alejandro González Galiano, lanzó contra el gobierno argentino.
La conducción del Frepaso dio a conocer su rechazo al voto mediante un texto firmado por su presidente Carlos Alvarez, el presidente del bloque de diputados frepasista Darío Alessandro, el vicepresidente de la comisión de Relaciones Exteriores, Carlos Raimundi, y el secretario general del Partido Socialista Popular, Rubén Giustiniani.
El Frepaso lamentó, de este modo, “el voto favorable de la Argentina a la resolución que condena al estado cubano” y explicó que su postura tiene como argumento dos puntos: Primero se inclina por la abstensión a fin de “no involucrar a nuestro país en un problema político muy delicado, que excede el marco de los derechos humanos”. En segundo lugar, critica “haber desaprovechado una excelente oportunidad para evitar esta encrucijada mediante un planteo integral y superador en materia de derechos humanos”.
En tanto, el ministro del Interior, Ramón Mestre, se definió como un “defensor del Gobierno de Cuba”, aunque opinó que “hay violación de los derechos humanos” en el país gobernador por Fidel Castro.
No obstante, no abundó sobre la postura oficial expuesta ayer en Ginebra: fue “una decisión del canciller Adalberto Rodríguez Giavarini”, indicó, en un intento por distanciarse.
Por su parte, el senador radical Leopoldo Moreau calificó de “vergonzoso, vergonzante y poco inteligente” el voto de condena y consideró que la determinación argentina revela un “alineamiento automático” a los Estados Unidos “parecido al de la época menemista”.
