Alan Greenspan está preocupado por la caída de la actividad económica de los Estados Unidos, un peligro potencial tan grande, para él, como la fue hasta hace unos meses, la inflación.
En un principio, la Fed combatió el riesgo de suba de precios con seis alzas de tasas, tratando de provocar, de esa manera, un “aterrizaje suave” de la actividad.
Pero en el último mes disminuyó el consumo y los balances de las empresas, particularmente las vinculadas a Internet y computadoras, quedaron castigados. El Nasdaq, donde se agrupan las electrónicas, cayó casi 25% en un mes ,arrastrando al Dow Jones.
Los economistas y analistas financieros coinciden, en general, en sostener que en la reunión que tendrá la Reserva Federal en 15 días, se mantendrán igual las tasas, pero dirán que las bajarían en el corto plazo.
El descenso de las tasas se concretaría en enero y favorecería a la Argentina. Hoy el flujo de dólares al país está virtualmente detenido y sólo se consiguen créditos del exterior de organismos internacionales.
La crisis interna es una de las causas, pero es cierto que en Estados Unidos las empresas de segunda línea tampoco tienen crédito. Si Alan Greenspan baja las tasas, crecen las chances de que rápidamente retornen inversores extranjeros a interesarse en los altos rendimientos en la Argentina; un título a 5 años ofrece 14% anual de rendimiento en dólares.
Analistas de Wall Street piensan que la postura de la Fed cambiará efectivamente cuando el Comité Federal de Mercado Abierto, que decide la política de las tasas de interés, realice su última reunión de este año, el 19 de diciembre.
Inclusive, «The Wall Street Journal» informó que la Reserva Federal podría sorprender a los mercados financieros recortando las tasas en el caso de que el informe de empleo y los datos de ventas minoristas de la próxima semana, resultan ser más débiles que lo esperado.
La economía más grande del mundo se ha desacelerado de una rápida tasa de crecimiento de 5,6% en el segundo trimestre a 2,4% en el tercero, y muchos economistas están revisando a la baja sus predicciones de crecimiento hasta fines de año.
Los mercados financieros están muy pendientes de un discurso que pronunciará hoy (martes 5) el presidente de la Fed, Alan Greenspan, en Nueva York, en busca de las últimas claves sobre lo que piensa el banco central.
Los pronósticos del mercado apuntan a que la Reserva mantendrá las tasas pero cambiará su panorama a un punto de vista equilibrado en cuanto a los riesgos económicos futuros, frente a sus anteriores advertencias de que la inflación es el principal peligro para la economía; eso podría abrir las puertas para que las tasas bajen en los primeros meses del año próximo.
Alan Greenspan está preocupado por la caída de la actividad económica de los Estados Unidos, un peligro potencial tan grande, para él, como la fue hasta hace unos meses, la inflación.
En un principio, la Fed combatió el riesgo de suba de precios con seis alzas de tasas, tratando de provocar, de esa manera, un “aterrizaje suave” de la actividad.
Pero en el último mes disminuyó el consumo y los balances de las empresas, particularmente las vinculadas a Internet y computadoras, quedaron castigados. El Nasdaq, donde se agrupan las electrónicas, cayó casi 25% en un mes ,arrastrando al Dow Jones.
Los economistas y analistas financieros coinciden, en general, en sostener que en la reunión que tendrá la Reserva Federal en 15 días, se mantendrán igual las tasas, pero dirán que las bajarían en el corto plazo.
El descenso de las tasas se concretaría en enero y favorecería a la Argentina. Hoy el flujo de dólares al país está virtualmente detenido y sólo se consiguen créditos del exterior de organismos internacionales.
La crisis interna es una de las causas, pero es cierto que en Estados Unidos las empresas de segunda línea tampoco tienen crédito. Si Alan Greenspan baja las tasas, crecen las chances de que rápidamente retornen inversores extranjeros a interesarse en los altos rendimientos en la Argentina; un título a 5 años ofrece 14% anual de rendimiento en dólares.
Analistas de Wall Street piensan que la postura de la Fed cambiará efectivamente cuando el Comité Federal de Mercado Abierto, que decide la política de las tasas de interés, realice su última reunión de este año, el 19 de diciembre.
Inclusive, «The Wall Street Journal» informó que la Reserva Federal podría sorprender a los mercados financieros recortando las tasas en el caso de que el informe de empleo y los datos de ventas minoristas de la próxima semana, resultan ser más débiles que lo esperado.
La economía más grande del mundo se ha desacelerado de una rápida tasa de crecimiento de 5,6% en el segundo trimestre a 2,4% en el tercero, y muchos economistas están revisando a la baja sus predicciones de crecimiento hasta fines de año.
Los mercados financieros están muy pendientes de un discurso que pronunciará hoy (martes 5) el presidente de la Fed, Alan Greenspan, en Nueva York, en busca de las últimas claves sobre lo que piensa el banco central.
Los pronósticos del mercado apuntan a que la Reserva mantendrá las tasas pero cambiará su panorama a un punto de vista equilibrado en cuanto a los riesgos económicos futuros, frente a sus anteriores advertencias de que la inflación es el principal peligro para la economía; eso podría abrir las puertas para que las tasas bajen en los primeros meses del año próximo.