Obama: no más torturas y una opción diplomática para Irán-Siria
Volveremos a respetar la convención de Ginebra, sostuvo el presidente electo. Eso comprometerá la ley patriótica dictada en 2002 por George W. Bush, el vice Richard Cheney, Donald Rumsfeld (defensa) y un equipo neoconservador.
10 enero, 2009
Barack Obama aseguró que su gobierno no cometerá abusos y excesos como los de Abú Ghreib o Guantánamo. De hecho, Robert Gates (titular de defensa común a ambas administraciones) proyecta desmontar la cárcel en la base cubana. Además, México sugirió reservadamente devolver a La Habana esas instalaciones, ocupadas desde 1895.
<p> </p>
<p> En forma indirecta, el presidente electo sindicó a su antecesor como responsable de haber desacatado la convención de Ginebra. Lo hizo ante una audiencia muy particular de funcionarios designados: Leon Panetta (agencia central de inteligencia, CIA) y el almirante retirado Dennis Blair (inteligencia interior). O sea, el instrumento de Bush para ejercer espionaje sobre ciudadanos norteamericanos en su propio país.</p>
<p> Por cierto, el cometido del nuevo equipo será desmantelar los programas más controvertidos que, en verdad, nunca lograron detectar terroristas propios ni ajenos. Esto abarca las “técnicas avanzadas” de interrogación. Entre ellas, una viejo recurso del KGM o militares rioplatenses: el submarino. De paso, Obama señaló que Estados Unidos “ha aprendido una lección: no depender de inteligencia de mala calidad o engañosa, como ocurrió en Irak”. En suma, no inventar datos por razones ideológicas.</p>
<p> Respecto de Irán y Siria, “representan amenazas a nuestra seguridad. Pero deben afrontarse por canales diplomáticos”. El futuro mandatario reivindicó las cualidades de Panetta –jefe de gabinete con William Clinton-, pese a su falta de antecedentes en materia de inteligencia. </p>