Nuevo logro de Trump: China alineada con la UE
Todo espacio vacío se ocupa de inmediato, como lo acaba de demostrar el gobierno de Beijing que cerró filas con los europeos en torno al acuerdo de París sobre el clima, y promete liderar el proceso global.
Las apuestas están a favor de que ocurra lo siguiente: Donald Trump anunciará ya mismo que Estados Unidos se retira del acuerdo firmado en diciembre de 2015 en la capital francesa. Quedará aislado. 195 naciones firmaron el pacto, y hasta ahora, 147 de ellas lo han ratificado formalmente.
Si se cumple lo pronosticado, Estados Unidos quedará en un magnífico aislamiento. El acuerdo sobre el clima no es bien visto por Trump y su entorno, pero la mayoría de los estadounidenses está en su favor. Incluso los que votaron por el singular candidato del partido Republicano.
China impulsa una nueva alianza que abarca impedir más deterioro del clima (y el abandono de los combustibles fósiles, como el petróleo, que son el nudo del asunto), pero también impulsar el comercio global en su beneficio. Algo que no es tan fácil puesto que la Unión Europea debería reconocer a este país como “economía de mercado”, algo que hasta ahora no ha ocurrido.
Pero en el curso de las actuales negociaciones, una cosa puede facilitar la otra, de ahí el singular interés de los chinos en acordar en el territorio del clima.
El anuncio de la Casa Blanca será anticipado, como de costumbre, por un tuit de Trump.
Es el corolario natural de lo que ocurrió en las recientes reuniones del G7 y de la UE, donde Trump pareció muy alejado de las posiciones de los antiguos aliados estadounidenses, en todos los terrenos.
Hace un año en plena campaña, Trump prometió que EE.UU se retiraría del acuerdo de París y que cancelaría todos los aportes a los programas de Naciones Unidas contra el calentamiento global.
Los analistas recuerdan que el gobierno todavía puede dar un paso más, y renunciar el acuerdo anterior sobre clima, de 1992 (en el gobierno de George H W Bush). Si da ese paso, en un año queda formalmente fuera del acuerdo de París. Si no lo hace, los plazos se alargan hasta el final de 2020.
Partidarios y detractores de Donald Trump advierten que, como lo ha hecho en otras materias, todavía puede dar una sorpresa y permanecer dentro de lo firmado en París, aunque con algunas vías de escape.
