Según se estima, la defensa delineada por el constitucionalista
Gregorio Badeni sostendría entre sus argumentos que el magistrado
no puede ser acusado por decisiones que adoptó en fallos de la
Corte.
La estrategia apuntaría de esa forma contra los cargos que
pesan en contra de Nazareno por sus sentencias en los casos
“Meller” y “Macri”.
En el “caso Meller”, el juez Nazareno, junto a otros ministros,
mediante una sentencia del 5 de noviembre de 2002, convalidó el
reclamo de la empresa Meller S.A, contratista de la ex Entel, por
29 millones de pesos.
Los magistrados dieron por válida la resolución de la entonces
liquidadora de la empresa telefónica, María Julia Alsograray, pero
los diputados consideran que se incurrió “en un despojo al
patrimonio estatal”.
En el “caso Macri”, los diputados cuestionan una decisión de la
Corte por dos causas contra los directivos de Sevel y Oplasen por
supuesta “evasión fiscal” y “contrabando” de automóviles.
Nazareno está acusado en total por quince cargos derivados de
sus decisiones en esas dos causas, además del denominado “caso
Magariños” y declaraciones públicas que realizó.
El juez tiene la posibilidad de concurrir a realizar su
descargo en forma personal ante la Comisión de Juicio Político,
pero se estima que optará por presentar sus argumentos por
escrito.
En tanto, la Comisión encabezada por el justicialista Ricardo
Falú sumará mañana nuevos cargos contra Nazareno, los que serían
reunidos en un dictamen definitivo la semana próxima.
La acusación contra Nazareno se da por descontada: diputados de
todas las bancadas calificaron de “graves” las faltas por las que
se cuestiona al magistrado, a quien el Gobierno nacional apuntó
por un supuesto intento de “extorsionar” a la gestión de Néstor
Kirchner.
De todos modos, los legisladores no descartan que Nazareno
renuncie antes de enfrentar una acusación con más de dos tercios
de los votos en la Cámara baja.
El Presidente de la Corte quedó aún más aislado ayer, cuando
intentó promover a su hija, que es su secretaria privada, a una
categoría superior en el alto Tribunal, pero no obtuvo el respaldo
de sus pares.
Según trascendió hoy, los jueces Augusto Belluscio, Antonio
Boggiano, Enrique Petracchi y Juan Carlos Maqueda se negaron a
firmar el nombramiento.
La decisión, sin embargo, contaba con el apoyo de los
magistrados Eduardo Moliné O´Connor, Carlos Fayt y Guillermo
López.
Florencia Nazareno trbaja como secretaria privada de su padre,
quien intentó ascenderla al cargo de prosecretaria administrativa
en el área del Cuerpo de Auditores de la Corte.
Según se estima, la defensa delineada por el constitucionalista
Gregorio Badeni sostendría entre sus argumentos que el magistrado
no puede ser acusado por decisiones que adoptó en fallos de la
Corte.
La estrategia apuntaría de esa forma contra los cargos que
pesan en contra de Nazareno por sus sentencias en los casos
“Meller” y “Macri”.
En el “caso Meller”, el juez Nazareno, junto a otros ministros,
mediante una sentencia del 5 de noviembre de 2002, convalidó el
reclamo de la empresa Meller S.A, contratista de la ex Entel, por
29 millones de pesos.
Los magistrados dieron por válida la resolución de la entonces
liquidadora de la empresa telefónica, María Julia Alsograray, pero
los diputados consideran que se incurrió “en un despojo al
patrimonio estatal”.
En el “caso Macri”, los diputados cuestionan una decisión de la
Corte por dos causas contra los directivos de Sevel y Oplasen por
supuesta “evasión fiscal” y “contrabando” de automóviles.
Nazareno está acusado en total por quince cargos derivados de
sus decisiones en esas dos causas, además del denominado “caso
Magariños” y declaraciones públicas que realizó.
El juez tiene la posibilidad de concurrir a realizar su
descargo en forma personal ante la Comisión de Juicio Político,
pero se estima que optará por presentar sus argumentos por
escrito.
En tanto, la Comisión encabezada por el justicialista Ricardo
Falú sumará mañana nuevos cargos contra Nazareno, los que serían
reunidos en un dictamen definitivo la semana próxima.
La acusación contra Nazareno se da por descontada: diputados de
todas las bancadas calificaron de “graves” las faltas por las que
se cuestiona al magistrado, a quien el Gobierno nacional apuntó
por un supuesto intento de “extorsionar” a la gestión de Néstor
Kirchner.
De todos modos, los legisladores no descartan que Nazareno
renuncie antes de enfrentar una acusación con más de dos tercios
de los votos en la Cámara baja.
El Presidente de la Corte quedó aún más aislado ayer, cuando
intentó promover a su hija, que es su secretaria privada, a una
categoría superior en el alto Tribunal, pero no obtuvo el respaldo
de sus pares.
Según trascendió hoy, los jueces Augusto Belluscio, Antonio
Boggiano, Enrique Petracchi y Juan Carlos Maqueda se negaron a
firmar el nombramiento.
La decisión, sin embargo, contaba con el apoyo de los
magistrados Eduardo Moliné O´Connor, Carlos Fayt y Guillermo
López.
Florencia Nazareno trbaja como secretaria privada de su padre,
quien intentó ascenderla al cargo de prosecretaria administrativa
en el área del Cuerpo de Auditores de la Corte.