El Gobierno volverá a someterse al examen de los mercados de capitales, que esperan una pronta firma del decreto de reforma previsional y del pacto fiscal con las provincias para que el país logre el blindaje financiero.
Mañana, el Ministerio de Economía buscará en el mercado local US$ 550 millones en una licitación de Letras y Bonos del Tesoro, donde se pondrá a prueba la confianza de los inversores en el Gobierno mediante la tasa de interés que le exigirán para prestarle los fondos requeridos.
La búsqueda de recursos en el mercado por parte del Gobierno genera una gran expectativa en el mercado, ya que la indefinición en torno del acuerdo político con los gobernadores y la demora de la anunciada reforma previsional pueden generar desconfianza en los inversores y provocar que el Estado deba pagar más caro sus necesidades de financiamiento.
El economista Roberto Alemann afirmó que ,la semana pasada, se fueron del país US$ 1.000 millones como consecuencia de la incertidumbre y las reiteradas pujas políticas, lo que provoca una menor liquidez en el mercado.
El presidente de la Caja de Valores, Luis Corsiglia, dijo que el mercado apuesta a que se firmen la reforma previsional y el pacto fiscal.
“No hay otro camino; se esperan esas señales para despegar; si no, seguirá una gran volatilidad en los mercados”, dijo.
El Presidente, por su parte, busca agilizar el cumplimiento de las exigencias de la banca internacional para sustentar el blindaje financiero.
Fernando de la Rúa habría recibido otro reclamos para que garantice la rápida concreción del acuerdo fiscal y la reforma previsional; éstos fueron hechos por mandatarios y funcionarios de distintos países de la región.
En el encuentro que se llevara a cabo en Panamá, el jefe de Estado argentino escuchó las inquietudes de sus pares del Mercosur; éstos hicieron saber su temor respecto de que una eventual falta de confianza en la economía argentina llegue a perjudicar a los países vecinos.
El viernes último la tasa de riesgo país tocó los 880 puntos por la indefinición del acuerdo entre la Nación y las provincias.
A los inversores los volvió a invadir el temor de que la Argentina no tenga capacidad para el pago de su deuda y entre en default.
Para el economista Martín Redrado, de la Fundación Capital, “tarde o temprano el pacto se va a firmar porque la clase política no se suicida; lo que han querido hacer hasta último momento es llevarse ventajas, pero esto no va más allá de esta semana”, pronosticó.
De todos modos, fue escéptico respecto del aire fresco que pueden recibir los inversores una vez que los gobernadores pongan su firma en el documento. “No creo que la perspectiva vaya a cambiar radicalmente, porque todavía no hay respuesta del Gobierno sobre cómo va a crecer la Argentina”, dijo.
Luciano Rolón, de Allaria Ledesma Sociedad de Bolsa, coincidió en que “los tiempos se están aplazando más de lo previsto y hasta que no se definan las medidas, mayor será la intranquilidad de los inversores”.
Para el analista, el mercado endureció su posición frente al Gobierno la semana última ante la evidencia de que no le será fácil a la gestión de De la Rúa convencer al PJ de la necesidad de firmar un nuevo pacto fiscal.
El Gobierno volverá a someterse al examen de los mercados de capitales, que esperan una pronta firma del decreto de reforma previsional y del pacto fiscal con las provincias para que el país logre el blindaje financiero.
Mañana, el Ministerio de Economía buscará en el mercado local US$ 550 millones en una licitación de Letras y Bonos del Tesoro, donde se pondrá a prueba la confianza de los inversores en el Gobierno mediante la tasa de interés que le exigirán para prestarle los fondos requeridos.
La búsqueda de recursos en el mercado por parte del Gobierno genera una gran expectativa en el mercado, ya que la indefinición en torno del acuerdo político con los gobernadores y la demora de la anunciada reforma previsional pueden generar desconfianza en los inversores y provocar que el Estado deba pagar más caro sus necesidades de financiamiento.
El economista Roberto Alemann afirmó que ,la semana pasada, se fueron del país US$ 1.000 millones como consecuencia de la incertidumbre y las reiteradas pujas políticas, lo que provoca una menor liquidez en el mercado.
El presidente de la Caja de Valores, Luis Corsiglia, dijo que el mercado apuesta a que se firmen la reforma previsional y el pacto fiscal.
“No hay otro camino; se esperan esas señales para despegar; si no, seguirá una gran volatilidad en los mercados”, dijo.
El Presidente, por su parte, busca agilizar el cumplimiento de las exigencias de la banca internacional para sustentar el blindaje financiero.
Fernando de la Rúa habría recibido otro reclamos para que garantice la rápida concreción del acuerdo fiscal y la reforma previsional; éstos fueron hechos por mandatarios y funcionarios de distintos países de la región.
En el encuentro que se llevara a cabo en Panamá, el jefe de Estado argentino escuchó las inquietudes de sus pares del Mercosur; éstos hicieron saber su temor respecto de que una eventual falta de confianza en la economía argentina llegue a perjudicar a los países vecinos.
El viernes último la tasa de riesgo país tocó los 880 puntos por la indefinición del acuerdo entre la Nación y las provincias.
A los inversores los volvió a invadir el temor de que la Argentina no tenga capacidad para el pago de su deuda y entre en default.
Para el economista Martín Redrado, de la Fundación Capital, “tarde o temprano el pacto se va a firmar porque la clase política no se suicida; lo que han querido hacer hasta último momento es llevarse ventajas, pero esto no va más allá de esta semana”, pronosticó.
De todos modos, fue escéptico respecto del aire fresco que pueden recibir los inversores una vez que los gobernadores pongan su firma en el documento. “No creo que la perspectiva vaya a cambiar radicalmente, porque todavía no hay respuesta del Gobierno sobre cómo va a crecer la Argentina”, dijo.
Luciano Rolón, de Allaria Ledesma Sociedad de Bolsa, coincidió en que “los tiempos se están aplazando más de lo previsto y hasta que no se definan las medidas, mayor será la intranquilidad de los inversores”.
Para el analista, el mercado endureció su posición frente al Gobierno la semana última ante la evidencia de que no le será fácil a la gestión de De la Rúa convencer al PJ de la necesidad de firmar un nuevo pacto fiscal.