Media sanción al voto electrónico en la provincia de Buenos Aires
La Cámara de Diputados bonaerense aprobó el proyecto que autoriza al Ejecutivo a instrumentar el voto electrónico en la provincia de Buenos Aires, iniciativa que había enviado a la Legislatura el gobernador Felipe Solá.
El proyecto, que fue sancionado con el voto del oficialismo
peronista y el apoyo de bloques aliados, recoge en gran parte la
propuesta original de Solá, aunque sufrió algunos cambios a
instancias del propio justicialismo, de acuerdo con lo señalado en
su edición de la fecha por el diario “El Día” de esta ciudad.
De esa manera, la intención del gobernador de instrumentar el
voto electrónico en algunos distritos en forma experimental en las
elecciones de septiembre dio el primer paso en la Legislatura.
Concretamente, se modificó la ley electoral para facultar al
Gobierno provincial a utilizar total o parcialmente “sistemas de
voto electrónico en los distritos que lo considere pertinente”.
El peronismo echó por tierra así el reclamo de la oposición de
que la autorización fuera con forma experimental, ya que tal como
está redactada la norma el nuevo mecanismo quedó incluido como
sistema electoral de manera permanente, coexistiendo con el
tradicional de la urna de cartón y las boletas.
Además, se dejó librado al Ejecutivo la elección de los
distritos donde se aplicará, como así también la potestad de
reglamentar la ley.
Ahora el proyecto pasó al Senado donde deberá ser aprobado para
convertirse en ley, pero aún con esta norma, para poder aplicar
este sistema en forma de prueba piloto la Provincia necesita de la
sanción de una ley nacional que modifique el Código Electoral.
Sólo así se estará en condiciones de que por el mecanismo de
voto electrónico se elijan, además de gobernador, legisladores
provinciales, intendentes y concejales, y los diputados nacionales
en los comicios del 14 de septiembre en esta provincia.
La iniciativa sancionada anoche, que fue rechazada por el
radicalismo, el ARI y otras bancadas minoritarias, recoge buena
parte de la iniciativa de Solá, modificada en parte por el
vicepresidente de la Cámara, el peronista Isidoro Laso.
Así, por caso, se le eliminó, según señalaron legisladores del
PJ, la “direccionalidad” que contaba y que apuntaba sólo “al
modelo brasileño”, por lo que el gobernador “podrá optar por el
sistema que considere más conveniente”.
Quizás a tono con el rechazo que este proyecto generó en el
propio bloque peronista, la iniciativa no fue fundamentada por el
PJ, y sólo salieron en su defensa los bloques del Paufe y la UCeDé
que acompañaron al justicialismo.
El radicalismo, en tanto, hizo un despacho en minoría que
otorgaba al sistema de voto electrónico el carácter de
experimental y sólo aplicable a las elecciones del próximo 14 de
septiembre.
Avanzaba además un poco más al precisar que esa experiencia se
realizaría en distritos de diferentes secciones electorales de no
más de 100 mil electores.
El proyecto, que fue sancionado con el voto del oficialismo
peronista y el apoyo de bloques aliados, recoge en gran parte la
propuesta original de Solá, aunque sufrió algunos cambios a
instancias del propio justicialismo, de acuerdo con lo señalado en
su edición de la fecha por el diario “El Día” de esta ciudad.
De esa manera, la intención del gobernador de instrumentar el
voto electrónico en algunos distritos en forma experimental en las
elecciones de septiembre dio el primer paso en la Legislatura.
Concretamente, se modificó la ley electoral para facultar al
Gobierno provincial a utilizar total o parcialmente “sistemas de
voto electrónico en los distritos que lo considere pertinente”.
El peronismo echó por tierra así el reclamo de la oposición de
que la autorización fuera con forma experimental, ya que tal como
está redactada la norma el nuevo mecanismo quedó incluido como
sistema electoral de manera permanente, coexistiendo con el
tradicional de la urna de cartón y las boletas.
Además, se dejó librado al Ejecutivo la elección de los
distritos donde se aplicará, como así también la potestad de
reglamentar la ley.
Ahora el proyecto pasó al Senado donde deberá ser aprobado para
convertirse en ley, pero aún con esta norma, para poder aplicar
este sistema en forma de prueba piloto la Provincia necesita de la
sanción de una ley nacional que modifique el Código Electoral.
Sólo así se estará en condiciones de que por el mecanismo de
voto electrónico se elijan, además de gobernador, legisladores
provinciales, intendentes y concejales, y los diputados nacionales
en los comicios del 14 de septiembre en esta provincia.
La iniciativa sancionada anoche, que fue rechazada por el
radicalismo, el ARI y otras bancadas minoritarias, recoge buena
parte de la iniciativa de Solá, modificada en parte por el
vicepresidente de la Cámara, el peronista Isidoro Laso.
Así, por caso, se le eliminó, según señalaron legisladores del
PJ, la “direccionalidad” que contaba y que apuntaba sólo “al
modelo brasileño”, por lo que el gobernador “podrá optar por el
sistema que considere más conveniente”.
Quizás a tono con el rechazo que este proyecto generó en el
propio bloque peronista, la iniciativa no fue fundamentada por el
PJ, y sólo salieron en su defensa los bloques del Paufe y la UCeDé
que acompañaron al justicialismo.
El radicalismo, en tanto, hizo un despacho en minoría que
otorgaba al sistema de voto electrónico el carácter de
experimental y sólo aplicable a las elecciones del próximo 14 de
septiembre.
Avanzaba además un poco más al precisar que esa experiencia se
realizaría en distritos de diferentes secciones electorales de no
más de 100 mil electores.
