Más violencia en Medio Oriente

Las manifestaciones populares constituyen uno de los focos de violencia más activo. Estados Unidos y la Unión Europea convocan a una cumbre por la paz. Rusia teme una “gran Guerra”.

13 octubre, 2000

(EFE).- Unos 50 palestinos resultaron heridos hoy (viernes 13) en distintos incidentes en Cisjordania, al enfrentarse manifestantes con fuerzas israelíes, informaron fuentes palestinas.

En dos de los incidentes, cerca de la ciudad de Naplusa y junto al campamento de refugiados de Kalandia, al norte de Jerusalén, se registraron tiroteos entre palestinos armados y soldados israelíes.

En Hebrón, manifestantes lanzaron una botella incendiaria contra efectivos militares israelíes.

Cerca de Ramala, en el cruce de Ayosh, seguían registrándose tiroteos entre palestinos armados y soldados israelíes.

Junto al pueblo palestino de Jahuara, también en la zona de Ramala, un colono judío denunció que había sido atacado por un grupo de palestinos que salía de la mezquita tras la oración de hoy.

Asimismo, otro grupo de manifestantes palestinos cercanos a la organización integrista Hamas atacaron un hotel de Gaza, capital donde se sirve alcohol, e incendiaron dos restaurantes donde por las noches hay espectáculos de música y la danza típica del vientre.

Gaza se diferencia mucho en ese sentido de ciudades palestinas de Cisjordania, especialmente Ramala, donde existen numerosos locales donde es posible consumir alcohol abiertamente.

En la pobre y superpoblada franja de Gaza, donde viven 1,2 millones de palestinos, la mayoría de ellos en campos de refugiados, Hamas tiene un fuerte apoyo social.

Por su parte, los líderes de la Unión Europea (UE) y el Gobierno de Estados Unidos pidieron “el cese inmediato de todas las violencias”, en un “solemne” llamamiento a los dirigentes y pueblos israelí y palestino ante el “peligro real de un estallido general”.

Al mismo tiempo instaron a las partes a participar, “con un espíritu constructivo”, en una cumbre para reanudar el diálogo “con toda urgencia”.

“Es imperativo que cada uno dé muestras de valentía política y de responsabilidad para que la razón venza al miedo, el odio y el extremismo antes de que se alcance el punto de no retorno”, recalcaron los líderes de los Quince en una declaración en el primer día de su cumbre en la ciudad vascofrancesa de Biarritz.

El primer ministro israelí, Ehud Barak, y el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yaser Arafat, no tienen otra vía que la de la paz y la negociación, sobre la base de lo conseguido en Camp David, que es “esencial preservar”, afirmaron.

“Hay que salvar el proceso de paz”, recalcaron los líderes mientras los enfrentamientos continuaban en Jerusalén y en Ramala.

“El tiempo apremia”, dijeron los Quince, que urgieron a las partes a participar en una cumbre para reanudar el diálogo con “toda urgencia”.

Hay esfuerzos en curso para concertar una cumbre entre los líderes israelí y palestino y otros dirigentes para mañana, con el fin de tratar de rebajar la tensión, tras el linchamiento de tres soldados israelíes por palestinos ayer en Ramala y los bombardeos israelíes de represalia en varias ciudades palestinas.

“La Unión Europea que, más que nunca, sigue comprometida a favor de la paz, apoya plenamente los esfuerzos del secretario general de la ONU”, señalaron los Quince, que decidieron encargar al representante de política exterior y de seguridad de la UE, Javier Solana, que continúe su misión en Oriente Medio.

Solana, quien llegó esta mañana a Biarritz procedente de Israel, dió cuenta de la situación en el terreno en una reunión a primera hora con el presidente francés y de turno de la UE, Jacques Chirac, el primer ministro francés, Lionel Jospin, y el ministro de Exteriores, Hubert Védrine.

Esta reunión, que duró unos 40 minutos, muestra cómo el deterioro de la crisis en el Oriente Medio está eclipsando las discusiones de los líderes sobre la reforma de las instituciones comunitarias.

Por su parte, el presidente del Gobierno español, José María Aznar, se reunió esta mañana a su llegada al aeropuerto de Biarritz con el enviado especial de Barak, el ministro israelí de Cooperación Regional, Simón Peres.

Aznar, quien había hablado por teléfono con Arafat unas horas antes, abogó ante Peres para que los lideres israelí y palestino y los dirigentes de otros países de la región y el presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, se reúnan mañana sábado con el fin de reanudar el diálogo.

Solana, por su parte, indicó que “aún hay tiempo para la paz” entre israelíes y palestinos y expresó la esperanza de que dé fruto la iniciativa en curso para organizar la mencionada cumbre, probablemente mañana por la tarde, en la región.

“Todavía no estoy seguro de si va a ser realidad, pero esperemos que sí”, explicó Solana, quien confirmó que cuando concluya el Consejo Europeo mañana, volverá a Oriente Medio para reanudar sus esfuerzos.

Paralelamente, el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Igor Ivanov, consideró hoy que la situación en Oriente Medio “se agrava rápidamente y ha llegado a un límite tras el cual se vislumbran los contornos de una gran guerra regional”.

En una intervención ante la Duma (cámara de diputados rusa), tras reunirse con el presidente Vladímir Putin, Ivanov dijo que la crisis en Oriente Medio “ha derivado en un enfrentamiento directo entre Israel y los Estados árabes”.

Las declaraciones del jefe de la diplomacia rusa se producen pocas horas después de haber regresado de una gira mediadora por Oriente Medio.

(EFE).- Unos 50 palestinos resultaron heridos hoy (viernes 13) en distintos incidentes en Cisjordania, al enfrentarse manifestantes con fuerzas israelíes, informaron fuentes palestinas.

En dos de los incidentes, cerca de la ciudad de Naplusa y junto al campamento de refugiados de Kalandia, al norte de Jerusalén, se registraron tiroteos entre palestinos armados y soldados israelíes.

En Hebrón, manifestantes lanzaron una botella incendiaria contra efectivos militares israelíes.

Cerca de Ramala, en el cruce de Ayosh, seguían registrándose tiroteos entre palestinos armados y soldados israelíes.

Junto al pueblo palestino de Jahuara, también en la zona de Ramala, un colono judío denunció que había sido atacado por un grupo de palestinos que salía de la mezquita tras la oración de hoy.

Asimismo, otro grupo de manifestantes palestinos cercanos a la organización integrista Hamas atacaron un hotel de Gaza, capital donde se sirve alcohol, e incendiaron dos restaurantes donde por las noches hay espectáculos de música y la danza típica del vientre.

Gaza se diferencia mucho en ese sentido de ciudades palestinas de Cisjordania, especialmente Ramala, donde existen numerosos locales donde es posible consumir alcohol abiertamente.

En la pobre y superpoblada franja de Gaza, donde viven 1,2 millones de palestinos, la mayoría de ellos en campos de refugiados, Hamas tiene un fuerte apoyo social.

Por su parte, los líderes de la Unión Europea (UE) y el Gobierno de Estados Unidos pidieron “el cese inmediato de todas las violencias”, en un “solemne” llamamiento a los dirigentes y pueblos israelí y palestino ante el “peligro real de un estallido general”.

Al mismo tiempo instaron a las partes a participar, “con un espíritu constructivo”, en una cumbre para reanudar el diálogo “con toda urgencia”.

“Es imperativo que cada uno dé muestras de valentía política y de responsabilidad para que la razón venza al miedo, el odio y el extremismo antes de que se alcance el punto de no retorno”, recalcaron los líderes de los Quince en una declaración en el primer día de su cumbre en la ciudad vascofrancesa de Biarritz.

El primer ministro israelí, Ehud Barak, y el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yaser Arafat, no tienen otra vía que la de la paz y la negociación, sobre la base de lo conseguido en Camp David, que es “esencial preservar”, afirmaron.

“Hay que salvar el proceso de paz”, recalcaron los líderes mientras los enfrentamientos continuaban en Jerusalén y en Ramala.

“El tiempo apremia”, dijeron los Quince, que urgieron a las partes a participar en una cumbre para reanudar el diálogo con “toda urgencia”.

Hay esfuerzos en curso para concertar una cumbre entre los líderes israelí y palestino y otros dirigentes para mañana, con el fin de tratar de rebajar la tensión, tras el linchamiento de tres soldados israelíes por palestinos ayer en Ramala y los bombardeos israelíes de represalia en varias ciudades palestinas.

“La Unión Europea que, más que nunca, sigue comprometida a favor de la paz, apoya plenamente los esfuerzos del secretario general de la ONU”, señalaron los Quince, que decidieron encargar al representante de política exterior y de seguridad de la UE, Javier Solana, que continúe su misión en Oriente Medio.

Solana, quien llegó esta mañana a Biarritz procedente de Israel, dió cuenta de la situación en el terreno en una reunión a primera hora con el presidente francés y de turno de la UE, Jacques Chirac, el primer ministro francés, Lionel Jospin, y el ministro de Exteriores, Hubert Védrine.

Esta reunión, que duró unos 40 minutos, muestra cómo el deterioro de la crisis en el Oriente Medio está eclipsando las discusiones de los líderes sobre la reforma de las instituciones comunitarias.

Por su parte, el presidente del Gobierno español, José María Aznar, se reunió esta mañana a su llegada al aeropuerto de Biarritz con el enviado especial de Barak, el ministro israelí de Cooperación Regional, Simón Peres.

Aznar, quien había hablado por teléfono con Arafat unas horas antes, abogó ante Peres para que los lideres israelí y palestino y los dirigentes de otros países de la región y el presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, se reúnan mañana sábado con el fin de reanudar el diálogo.

Solana, por su parte, indicó que “aún hay tiempo para la paz” entre israelíes y palestinos y expresó la esperanza de que dé fruto la iniciativa en curso para organizar la mencionada cumbre, probablemente mañana por la tarde, en la región.

“Todavía no estoy seguro de si va a ser realidad, pero esperemos que sí”, explicó Solana, quien confirmó que cuando concluya el Consejo Europeo mañana, volverá a Oriente Medio para reanudar sus esfuerzos.

Paralelamente, el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Igor Ivanov, consideró hoy que la situación en Oriente Medio “se agrava rápidamente y ha llegado a un límite tras el cual se vislumbran los contornos de una gran guerra regional”.

En una intervención ante la Duma (cámara de diputados rusa), tras reunirse con el presidente Vladímir Putin, Ivanov dijo que la crisis en Oriente Medio “ha derivado en un enfrentamiento directo entre Israel y los Estados árabes”.

Las declaraciones del jefe de la diplomacia rusa se producen pocas horas después de haber regresado de una gira mediadora por Oriente Medio.

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