Más iniciativas para reducir impuestos
La necesidad agudiza el ingenio: para recaudar más se reducen impuestos, se ofrecen descuentos a los buenos contribuyentes y hasta se sortean electrodomésticos y automóviles.
El miércoles el Poder Ejecutivo promulgó la ley de Compromiso Federal con las provincias, firmado en noviembre de 2000. Tema que está estrechamente ligado con diversas iniciativas destinadas a la reducción de impuestos, estimuladas por el éxito que se atribuye Córdoba en ese terreno.
Este mismo días el diputado Oscar Lamberto, del Partido Justicialista, le hizo conocer al jefe del Gabinete, Chrystian Colombo, su coincidencia de opiniones con las vertidas el día anterior por su colega y compañero de bancada, Jorge Remes Lenicov.
El legislador y economista, designado delegado oficial por Carlos Ruckauf para la negociación de la reforma tributaria, expresó a Colombo que el justicialismo apoyará una reforma que incluya rebajas impositivas, con la condición de que no se vea afectada la recaudación fiscal.
Trascendió que en el mayor partido opositor existe consenso acerca de la necesidad de la reforma, la que debe ser discutida en el transcurso de 2001 y ser aplicada sin demoras en 2002, previo su debate público y abierto en el Parlamento y en estrecha relación con los gobernadores.
Tres serían los puntos focales de la negociación: reforma de impuestos nacionales, substitución de impuestos provinciales y consideración de la administración tributaria.
La comisión de notables propuesta por el Gobierno, debería tener meramente carácter asesor.
En el terreno de sondear iniciativas para mejorar la recaudación, los medios se ocuparon de señalar las adoptadas por varios municipios del Gran Buenos Aires, entre ellos Avellaneda, Quilmes, Ituzaingó y Lomas de Zamora, que apelan a diversos arbitrios para estimular a los contribuyentes a estar al día con sus obligaciones fiscales.
Se trata de rebajas de hasta 15% en el pago de los tributos, en especial alumbrado, barrido y limpieza.
Los vecinos son tentados, además, con sorteos de electrodomésticos y automóviles, reducción del número de cuotas a pagar en el año y otros beneficios.
Una reivindicación de la consigna parisina de “La imaginación al poder”.
El miércoles el Poder Ejecutivo promulgó la ley de Compromiso Federal con las provincias, firmado en noviembre de 2000. Tema que está estrechamente ligado con diversas iniciativas destinadas a la reducción de impuestos, estimuladas por el éxito que se atribuye Córdoba en ese terreno.
Este mismo días el diputado Oscar Lamberto, del Partido Justicialista, le hizo conocer al jefe del Gabinete, Chrystian Colombo, su coincidencia de opiniones con las vertidas el día anterior por su colega y compañero de bancada, Jorge Remes Lenicov.
El legislador y economista, designado delegado oficial por Carlos Ruckauf para la negociación de la reforma tributaria, expresó a Colombo que el justicialismo apoyará una reforma que incluya rebajas impositivas, con la condición de que no se vea afectada la recaudación fiscal.
Trascendió que en el mayor partido opositor existe consenso acerca de la necesidad de la reforma, la que debe ser discutida en el transcurso de 2001 y ser aplicada sin demoras en 2002, previo su debate público y abierto en el Parlamento y en estrecha relación con los gobernadores.
Tres serían los puntos focales de la negociación: reforma de impuestos nacionales, substitución de impuestos provinciales y consideración de la administración tributaria.
La comisión de notables propuesta por el Gobierno, debería tener meramente carácter asesor.
En el terreno de sondear iniciativas para mejorar la recaudación, los medios se ocuparon de señalar las adoptadas por varios municipios del Gran Buenos Aires, entre ellos Avellaneda, Quilmes, Ituzaingó y Lomas de Zamora, que apelan a diversos arbitrios para estimular a los contribuyentes a estar al día con sus obligaciones fiscales.
Se trata de rebajas de hasta 15% en el pago de los tributos, en especial alumbrado, barrido y limpieza.
Los vecinos son tentados, además, con sorteos de electrodomésticos y automóviles, reducción del número de cuotas a pagar en el año y otros beneficios.
Una reivindicación de la consigna parisina de “La imaginación al poder”.
