Lavagna: “se negocia un acuerdo hasta diciembre de 2003”
El ministro de Economía aseguró además que todo el equipo económico, excepto él, permanecerá en Washington para terminar de "escribir la letra fina" de la nueva Carta de Intención que será presentada al Fondo Monetario.
Lavagna indicó que, si es necesario, la próxima semana podría
volver a viajar a Washington para terminar de cerrar las
negociaciones con el Fondo.
“La idea del acuerdo es que pueda terminar en diciembre de
2003, para que el próximo presidente no tenga que ponerse a
negociar inmediatamente sino que tenga el tiempo suficiente como
para poder organizar sus equipos y su política”, afirmó.
Lavagna dijo que “uno de los problemas que tenemos como
sociedad es la falta de equilibrio” y agregó que “hace una semana
se había expandido una ola de pesimismo, la idea de que no había
acuerdo y esa situación de conflicto extremo nunca existió”.
“Hoy, en cambio, se ha expandido la idea de que el acuerdo es
inminente”, consideró el titular del Palacio de Hacienda.
En tal sentido, Lavagna agregó que “ni lo que se dijo hace una
semana era cierto ni lo que se dijo el día de hoy es cierto”.
“Ni las catástrofes de la semana pasada ni nada en el sentido
de festejar locamente en el dia de hoy”, sostuvo el titular del Palacio de Hacienda.
El ministro señaló que “lo que sí es cierto es que en las
negociaciones hay momentos en los cuales uno tiende a alejarse o a
diverger y hay momentos en los que uno encuentra mayor grado de
entendimiento, mayor grado de convergencia”.
Lavagna reveló que junto con el titular del FMI, Horst Köhler,
se tomó la decisión de que todo el equipo económico se quede en
Washington para “tener una semana muy intensa de negociaciones y
poner las cosas en papel”.
El jefe de Economía consideró que “una negociación se debe
hacer por etapas, seriamente” y añadió que “a veces es mejor un
poco más de silencio que el que algunos hacen, incluso, de
funcionarios argentinos, que hablan demasiado”.
Al revelar los términos de la conversación con Köhler, Lavagna
sostuvo que le recordó el diálogo telefónico con el presidente
Eduardo Duhalde, en cuanto a la idea del gobierno de buscar
“consenso político” sobre todo con el Congreso y los
gobernadores.
En los últimos dos días, Lavagna se reunió con funcionarios del
Banco Mundial, del Banco Interamericano de Desarrollo y del FMI y
con ministros de Economía de los países del Grupo de los Siete.
Indicó que en estos encuentros “se discutió el tema argentino”
y señaló que “hubo alguna pregunta sobre cuál era nuestra opinión
sobre la situación de Brasil”.
“En todos los casos hemos señalado que a nuestro entender no
hay razones para esperar una desestabilización profunda, que estos
son los momentos de agitación preelectoral”, comentó.
Dijo, además, que “estamos convencidos de que después la
situación va a tender a estabilizarse y en definitiva que la
región, que hoy está siendo muy golpeada, en Brasil, Uruguay,
Paraguay, la Argentina, pueda por lo menos estabilizarse y empezar
a orientarse hacia una recuperación económica”.
Lavagna indicó que, si es necesario, la próxima semana podría
volver a viajar a Washington para terminar de cerrar las
negociaciones con el Fondo.
“La idea del acuerdo es que pueda terminar en diciembre de
2003, para que el próximo presidente no tenga que ponerse a
negociar inmediatamente sino que tenga el tiempo suficiente como
para poder organizar sus equipos y su política”, afirmó.
Lavagna dijo que “uno de los problemas que tenemos como
sociedad es la falta de equilibrio” y agregó que “hace una semana
se había expandido una ola de pesimismo, la idea de que no había
acuerdo y esa situación de conflicto extremo nunca existió”.
“Hoy, en cambio, se ha expandido la idea de que el acuerdo es
inminente”, consideró el titular del Palacio de Hacienda.
En tal sentido, Lavagna agregó que “ni lo que se dijo hace una
semana era cierto ni lo que se dijo el día de hoy es cierto”.
“Ni las catástrofes de la semana pasada ni nada en el sentido
de festejar locamente en el dia de hoy”, sostuvo el titular del Palacio de Hacienda.
El ministro señaló que “lo que sí es cierto es que en las
negociaciones hay momentos en los cuales uno tiende a alejarse o a
diverger y hay momentos en los que uno encuentra mayor grado de
entendimiento, mayor grado de convergencia”.
Lavagna reveló que junto con el titular del FMI, Horst Köhler,
se tomó la decisión de que todo el equipo económico se quede en
Washington para “tener una semana muy intensa de negociaciones y
poner las cosas en papel”.
El jefe de Economía consideró que “una negociación se debe
hacer por etapas, seriamente” y añadió que “a veces es mejor un
poco más de silencio que el que algunos hacen, incluso, de
funcionarios argentinos, que hablan demasiado”.
Al revelar los términos de la conversación con Köhler, Lavagna
sostuvo que le recordó el diálogo telefónico con el presidente
Eduardo Duhalde, en cuanto a la idea del gobierno de buscar
“consenso político” sobre todo con el Congreso y los
gobernadores.
En los últimos dos días, Lavagna se reunió con funcionarios del
Banco Mundial, del Banco Interamericano de Desarrollo y del FMI y
con ministros de Economía de los países del Grupo de los Siete.
Indicó que en estos encuentros “se discutió el tema argentino”
y señaló que “hubo alguna pregunta sobre cuál era nuestra opinión
sobre la situación de Brasil”.
“En todos los casos hemos señalado que a nuestro entender no
hay razones para esperar una desestabilización profunda, que estos
son los momentos de agitación preelectoral”, comentó.
Dijo, además, que “estamos convencidos de que después la
situación va a tender a estabilizarse y en definitiva que la
región, que hoy está siendo muy golpeada, en Brasil, Uruguay,
Paraguay, la Argentina, pueda por lo menos estabilizarse y empezar
a orientarse hacia una recuperación económica”.
