Las exigencias del Fondo Monetario

Un aumento del 30 por ciento en las tarifas de servicios, la reestructuración de bancos y la confirmación de que la renegociación de la deuda será realizada por el próximo gobierno, son los puntos relevantes de la carta de intención del FMI.

16 octubre, 2002

Ese documento -de 29 páginas- estaría listo para la firma el
4 de noviembre próximo, cinco días antes de que la Argentina
deba cumplir con un vencimiento ante el Banco Mundial.

El “último borrador” de la carta de intención
contempla que el PBI se contraerá un 11 por ciento este año,
mientras que la inflación minorista llegaría al 60 por ciento en
2002 y no superaría el 35 por ciento el año próximo.
Además, se estima un superávit primario consolidado del 2,5 por
ciento para 2003; las provincias deberían obtener un déficit
primario no superior al 0,5 por ciento del PBI y se limitaría la
intervención del Banco Central en el mercado de cambios, a medida
que se consolide la estabilidad de la economía.

Trascendió también que, como medidas de contención del gasto,
se incluirá en el acuerdo una reforma del empleo público a nivel
nacional y provincial, y reformas del sistema de seguridad social
y del financiamiento del sistema de salud de los jubilados.

En tanto, el programa monetario prevé el levantamiento del
stock de cuasi monedas (o bonos provinciales) para diciembre de
2003.
Por su parte, el “corralito” sería levantado “si las
condiciones económicas lo permiten”; se acelerará la
reestructuración de la banca pública y se enviará un proyecto
de ley al Congreso para que el Banco Central se maneje con
independencia presupuestaria.

Otro de los puntos de la carta de intención estipula que el
Ministerio de Economía establecerá los mecanismos necesarios para
compensar a los bancos por la indexación asimétrica de activos y
pasivos.

Ese documento -de 29 páginas- estaría listo para la firma el
4 de noviembre próximo, cinco días antes de que la Argentina
deba cumplir con un vencimiento ante el Banco Mundial.

El “último borrador” de la carta de intención
contempla que el PBI se contraerá un 11 por ciento este año,
mientras que la inflación minorista llegaría al 60 por ciento en
2002 y no superaría el 35 por ciento el año próximo.
Además, se estima un superávit primario consolidado del 2,5 por
ciento para 2003; las provincias deberían obtener un déficit
primario no superior al 0,5 por ciento del PBI y se limitaría la
intervención del Banco Central en el mercado de cambios, a medida
que se consolide la estabilidad de la economía.

Trascendió también que, como medidas de contención del gasto,
se incluirá en el acuerdo una reforma del empleo público a nivel
nacional y provincial, y reformas del sistema de seguridad social
y del financiamiento del sistema de salud de los jubilados.

En tanto, el programa monetario prevé el levantamiento del
stock de cuasi monedas (o bonos provinciales) para diciembre de
2003.
Por su parte, el “corralito” sería levantado “si las
condiciones económicas lo permiten”; se acelerará la
reestructuración de la banca pública y se enviará un proyecto
de ley al Congreso para que el Banco Central se maneje con
independencia presupuestaria.

Otro de los puntos de la carta de intención estipula que el
Ministerio de Economía establecerá los mecanismos necesarios para
compensar a los bancos por la indexación asimétrica de activos y
pasivos.

Compartir:
Notas Relacionadas

Suscripción Digital

Suscríbase a Mercado y reciba todos los meses la mas completa información sobre Economía, Negocios, Tecnología, Managment y más.

Suscribirse Archivo Ver todos los planes

Newsletter


Reciba todas las novedades de la Revista Mercado en su email.

Reciba todas las novedades