Las elecciones presidenciales serán el 27 de abril
El Gobierno y la mayoría de los mandatarios provinciales acordaron pedirle al Congreso que fije por ley el 27 de abril próximo como fecha para la realización de los comicios generales. El 11 de mayo sería una eventual segunda vuelta.
El acuerdo fue alcanzado por el presidente Eduardo
Duhalde y los gobernadores de la mayoría de las provincias en la
residencia de Olivos, pese a que fue rechazado en duros términos
por los mandatarios alineados con Carlos Menem y Adolfo Rodríguez
Saá.
Ese es el consenso al que llegaron Duhalde y la mayoría de los
gobernadores, a excepción de los mandatarios de La Rioja, San
Luis, Salta y La Pampa.
Con el acuerdo para fijar un nuevo cronograma electoral, el
Gobierno busca emitir una señal de certidumbre política sobre la
duración de la transición que encabeza Duhalde, tanto de cara al
frente político interno como ante el Fondo Monetario
Internacional.
Es que el organismo de crédito internacional incluyó en su
lista de exigencias a la Argentina la construcción de un consenso
político que sustente la instrumentación de las reformas que pide
a cambio de la firma de un acuerdo con el Gobierno.
Un aspecto imprescindible para lograr ese sustento político,
según indicaron fuentes oficiales, es la implementación de un cronograma definitivo que garantice una salida electoral a la actual transición.
Si bien en principio se había establecido que las elecciones se
celebren el 20 de abril, mientras se redactaba el texto final del
acuerdo, funcionarios y gobernadores notaron que esa fecha
coincidía con la celebración católica del domingo de Pascuas, por
lo que resolvieron postergar la convocatoria por una semana.
Tras el acuerdo entre Duhalde y los gobernadores de 20
provincias, la Cámara de Diputados discutirá el próximo miércoles
un proyecto para suspender, por única vez, la ley que estableció
las internas abiertas y simultáneas de los partidos políticos.
Este camino fue apoyado por los gobernadores radicales, con el
chaqueño Angel Rozas a la cabeza, quien se pronunció a favor de
que “esta semana” se fije el nuevo cronograma electoral.
La semana pasada la Cámara Nacional Electoral había revocado un
fallo de primera instancia y repuso el 15 de diciembre como fecha
para las internas abiertas y simultáneas, pero ahora el Gobierno
consiguió que el Congreso discuta la suspensión de esa
convocatoria.
La fecha del 15 de diciembre es defendida por los seguidores de
Menem y Rodríguez Saá, los precandidatos presidenciales que
enfrentan al presidente Duhalde en la interna justicialista.
“Queremos que se respete el cronograma original y que las
elecciones se realicen el 30 de marzo del 2003”, aseguró esta
tarde la gobernadora de San Luis, Alicia Lemme, al retirarse de
Olivos sin firmar el acuerdo que propuso Duhalde.
Idéntica postura había adoptado minutos antes el gobernador de
La Rioja, Angel Maza, mientras que el salteño Juan Carlos Romero
-compañero de fórmula de Menem- directamente no participó hoy de
la cumbre de Olivos.
Tampoco avaló el nuevo cronograma electoral el gobernador de La
Pampa, Rubén Marín, quien ejerce la jefatura del Consejo Nacional
del PJ porque Menem está de licencia.
El menemismo pretende ahora contrarrestar el nuevo cronograma
por medio de un pedido a la Corte Suprema de Justicia para que
fije las fechas electorales el 15 de diciembre (internas), el 30
de marzo (generales) y el 27 de abril (segunda vuelta).
“Denunciaremos estas maniobras en el orden nacional e
internacional, pues los candidatos con mayor intención de voto no
pueden quedar al margen de un acuerdo que comprometerá a la
Argentina con la comunidad financiera”, señalaron esta tarde Menem
y Romero por medio de un comunicado de prensa.
Por su lado, el gobernador de Córdoba y precandidato
presidencial José Manuel de la Sota apoyó el nuevo cronograma
electoral, a la espera de que la primera dama, Hilda “Chiche”
Duhalde, acepte sumarse a su fórmula de cara a la interna del PJ.
“El acuerdo remarca la madurez de la dirigencia política”, dijo
De la Sota al retirarse de la residencia de Olivos, desde donde
partió directamente a Rosario para encabezar un acto de campaña.
También avaló el nuevo cronograma electoral el gobernador de
Santa Cruz, Néstor Kirchner, otro de los precandidatos
justicialistas que busca alcanzar un acuerdo con el duhaldismo
para enfrentar a Menem en la interna peronista.
El acuerdo fue alcanzado por el presidente Eduardo
Duhalde y los gobernadores de la mayoría de las provincias en la
residencia de Olivos, pese a que fue rechazado en duros términos
por los mandatarios alineados con Carlos Menem y Adolfo Rodríguez
Saá.
Ese es el consenso al que llegaron Duhalde y la mayoría de los
gobernadores, a excepción de los mandatarios de La Rioja, San
Luis, Salta y La Pampa.
Con el acuerdo para fijar un nuevo cronograma electoral, el
Gobierno busca emitir una señal de certidumbre política sobre la
duración de la transición que encabeza Duhalde, tanto de cara al
frente político interno como ante el Fondo Monetario
Internacional.
Es que el organismo de crédito internacional incluyó en su
lista de exigencias a la Argentina la construcción de un consenso
político que sustente la instrumentación de las reformas que pide
a cambio de la firma de un acuerdo con el Gobierno.
Un aspecto imprescindible para lograr ese sustento político,
según indicaron fuentes oficiales, es la implementación de un cronograma definitivo que garantice una salida electoral a la actual transición.
Si bien en principio se había establecido que las elecciones se
celebren el 20 de abril, mientras se redactaba el texto final del
acuerdo, funcionarios y gobernadores notaron que esa fecha
coincidía con la celebración católica del domingo de Pascuas, por
lo que resolvieron postergar la convocatoria por una semana.
Tras el acuerdo entre Duhalde y los gobernadores de 20
provincias, la Cámara de Diputados discutirá el próximo miércoles
un proyecto para suspender, por única vez, la ley que estableció
las internas abiertas y simultáneas de los partidos políticos.
Este camino fue apoyado por los gobernadores radicales, con el
chaqueño Angel Rozas a la cabeza, quien se pronunció a favor de
que “esta semana” se fije el nuevo cronograma electoral.
La semana pasada la Cámara Nacional Electoral había revocado un
fallo de primera instancia y repuso el 15 de diciembre como fecha
para las internas abiertas y simultáneas, pero ahora el Gobierno
consiguió que el Congreso discuta la suspensión de esa
convocatoria.
La fecha del 15 de diciembre es defendida por los seguidores de
Menem y Rodríguez Saá, los precandidatos presidenciales que
enfrentan al presidente Duhalde en la interna justicialista.
“Queremos que se respete el cronograma original y que las
elecciones se realicen el 30 de marzo del 2003”, aseguró esta
tarde la gobernadora de San Luis, Alicia Lemme, al retirarse de
Olivos sin firmar el acuerdo que propuso Duhalde.
Idéntica postura había adoptado minutos antes el gobernador de
La Rioja, Angel Maza, mientras que el salteño Juan Carlos Romero
-compañero de fórmula de Menem- directamente no participó hoy de
la cumbre de Olivos.
Tampoco avaló el nuevo cronograma electoral el gobernador de La
Pampa, Rubén Marín, quien ejerce la jefatura del Consejo Nacional
del PJ porque Menem está de licencia.
El menemismo pretende ahora contrarrestar el nuevo cronograma
por medio de un pedido a la Corte Suprema de Justicia para que
fije las fechas electorales el 15 de diciembre (internas), el 30
de marzo (generales) y el 27 de abril (segunda vuelta).
“Denunciaremos estas maniobras en el orden nacional e
internacional, pues los candidatos con mayor intención de voto no
pueden quedar al margen de un acuerdo que comprometerá a la
Argentina con la comunidad financiera”, señalaron esta tarde Menem
y Romero por medio de un comunicado de prensa.
Por su lado, el gobernador de Córdoba y precandidato
presidencial José Manuel de la Sota apoyó el nuevo cronograma
electoral, a la espera de que la primera dama, Hilda “Chiche”
Duhalde, acepte sumarse a su fórmula de cara a la interna del PJ.
“El acuerdo remarca la madurez de la dirigencia política”, dijo
De la Sota al retirarse de la residencia de Olivos, desde donde
partió directamente a Rosario para encabezar un acto de campaña.
También avaló el nuevo cronograma electoral el gobernador de
Santa Cruz, Néstor Kirchner, otro de los precandidatos
justicialistas que busca alcanzar un acuerdo con el duhaldismo
para enfrentar a Menem en la interna peronista.
