La situación del petróleo (I)
Los hidrocarburos constituyen al mismo tiempo la principal fuente energética y materia prima del mundo. Sin embargo, su costo no guarda relación con su contribución a la economía.
Por Daniel Carranza
Es evidente que existe un problema de precios relativos con respecto al precio de los hidrocarburos, este articulo procurará analizar los fenómenos anteriores y en función del contexto político económico y la naturaleza de la oferta y la demanda de hidrocarburos predecir el futuro comportamiento del mercado.
Los hidrocarburos constituyen además la única matera prima y fuente energética por cuya posesión se generaron conflictos armados. Las batallas del El Alamein y Stalingrado decisivas en la Segunda Guerra Mundial fueron libradas por el control del petróleo del Cercano Oriente y el mar Caspio respectivamente.
Por otra parte, Japón decidió el ataque a Pearl Harbour después que Estados Unidos declarara el embargo de los suministros de petróleo y acero a dicho país en la primavera boreal de 1941. El derrocamiento de Mossadegh en Iran en 1951 y más recientemente la guerra del Golfo tuvieron mucho que ver con el petróleo. Sin embargo a pesar de su importancia es un producto maltratado y descuidado.
El consumo mundial de petróleo solamente equivale a 400.000 camiones diarios de 30 metros cúbicos cada uno de capacidad extendidos a lo largo de 6.000 kilómetros.
Esta situación se demuestra en varios ámbitos de la economía mundial, tal como destacan algunos ejemplos.
El precio de la nafta para mantener a un automóvil argentino promedio con todos los impuestos incluidos para recorrer entre 10.000 y 12.000 kilómetros por año es de $ 100 por mes, del orden que lo que seguramente paga por el seguro del automóvil, en Estados Unidos el desbalance relativo del precio del petróleo es todavía mayor. Es evidente que el combustible es un costo de peso pero que no guarda relación alguna con su contribución a la economía.
La capitalización o el capital social de las dos empresas petroleras más importantes del mundo, ExxonMobil y Royal Dutch no supera los US$ 120.000 millones, mientras que en su momento la capitalización de Microsoft alcanzó US$ 300.000 millones.
Algunos analistas económicos interpretan que el petróleo esta dejando de ser importante para la economía porque su peso relativo al Producto Bruto ha descendido. Esta afirmación es básicamente falsa porque ese descenso relativo se debe únicamente a un efecto precio lo que reafirma la idea de que precio relativo de los hidrocarburos esta totalmente desbalanceado a favor de otros sectores de la economía.
Un litro de hidrocarburo elaborado diesel o nafta sin impuestos cuesta US$ 0,5 aproximadamente la mitad de lo que cuesta un litro de una gaseosa que es agua carbonatada con un componente importante de promoción. La diferencia entre ambos productos es que se necesitan aproximadamente 150 millones de años para formar un litro de petróleo y el agua es un producto reciclable que no se agota en el proceso productivo. La conclusión es que la valuación monetaria de ambos productos no tiene nada que ver con su importancia económica.
Por Daniel Carranza
Es evidente que existe un problema de precios relativos con respecto al precio de los hidrocarburos, este articulo procurará analizar los fenómenos anteriores y en función del contexto político económico y la naturaleza de la oferta y la demanda de hidrocarburos predecir el futuro comportamiento del mercado.
Los hidrocarburos constituyen además la única matera prima y fuente energética por cuya posesión se generaron conflictos armados. Las batallas del El Alamein y Stalingrado decisivas en la Segunda Guerra Mundial fueron libradas por el control del petróleo del Cercano Oriente y el mar Caspio respectivamente.
Por otra parte, Japón decidió el ataque a Pearl Harbour después que Estados Unidos declarara el embargo de los suministros de petróleo y acero a dicho país en la primavera boreal de 1941. El derrocamiento de Mossadegh en Iran en 1951 y más recientemente la guerra del Golfo tuvieron mucho que ver con el petróleo. Sin embargo a pesar de su importancia es un producto maltratado y descuidado.
El consumo mundial de petróleo solamente equivale a 400.000 camiones diarios de 30 metros cúbicos cada uno de capacidad extendidos a lo largo de 6.000 kilómetros.
Esta situación se demuestra en varios ámbitos de la economía mundial, tal como destacan algunos ejemplos.
El precio de la nafta para mantener a un automóvil argentino promedio con todos los impuestos incluidos para recorrer entre 10.000 y 12.000 kilómetros por año es de $ 100 por mes, del orden que lo que seguramente paga por el seguro del automóvil, en Estados Unidos el desbalance relativo del precio del petróleo es todavía mayor. Es evidente que el combustible es un costo de peso pero que no guarda relación alguna con su contribución a la economía.
La capitalización o el capital social de las dos empresas petroleras más importantes del mundo, ExxonMobil y Royal Dutch no supera los US$ 120.000 millones, mientras que en su momento la capitalización de Microsoft alcanzó US$ 300.000 millones.
Algunos analistas económicos interpretan que el petróleo esta dejando de ser importante para la economía porque su peso relativo al Producto Bruto ha descendido. Esta afirmación es básicamente falsa porque ese descenso relativo se debe únicamente a un efecto precio lo que reafirma la idea de que precio relativo de los hidrocarburos esta totalmente desbalanceado a favor de otros sectores de la economía.
Un litro de hidrocarburo elaborado diesel o nafta sin impuestos cuesta US$ 0,5 aproximadamente la mitad de lo que cuesta un litro de una gaseosa que es agua carbonatada con un componente importante de promoción. La diferencia entre ambos productos es que se necesitan aproximadamente 150 millones de años para formar un litro de petróleo y el agua es un producto reciclable que no se agota en el proceso productivo. La conclusión es que la valuación monetaria de ambos productos no tiene nada que ver con su importancia económica.
