(NA). – El presidente Fernando de la Rúa aseguró esta mañana (martes 30) que la “reprogramación” de la deuda externa que negocia el Gobierno será “consensuada” y “no habrá nada forzado” para los acreedores, a la vez que ratificó que “no habrá devaluación ni default”.
De la Rúa dejó en claro, en declaraciones formuladas en la Casa de Gobierno, que la reestructuración será “voluntaria y beneficiosa para los tenedores de títulos” públicos.
En un contexto en el que remarcó la necesidad de buscar un consenso con los distintos sectores, el Presidente, sin dar mayores precisiones, anticipó que hoy mantendrá “reuniones con dirigentes de diversas fuerzas políticas”, tras precisar que “los programas que desde el gobierno pondremos en marcha tendrán el signo de la participación”.
En ese sentido, De la Rúa precisó que “todos los sectores reclamaban una reprogramación consensuada, voluntaria de la deuda”, y enfatizó que “eso es sobre lo que estamos trabajando, por eso quiero reafirmar muy claramente que no habrá nada forzado ni coercitivo”.
Además, precisó que los esperados anuncios económicos se darán a conocer “apenas estén los textos legales” y luego de que se hayan “hecho las consultas” necesarias, de modo que se le dé “la fuerza del consenso” de los sectores “empresarios, sociales e incluso religiosos”.
Agregó que todo “será absolutamente voluntario y beneficioso para los tenedores de títulos, que recibirán grandes ventajas por el canje con mayores garantías y seguridades”.
Luego, se quejó porque “algunos quieren poner la duda sobre si será voluntario o coercitivo” el tratamiento de la reprogramación de la deuda. “De ninguna manera habrá nada coercitivo, sino que será absolutamente voluntario, como corresponde a la seguridad jurídica que ratifico en este momento”, enfatizó el Presidente en su diálogo con los periodistas acreditados en la Casa Rosada.
El jefe de Estado dijo que los contactos que mantendrá de ahora en adelante serán “telefónica y personalmente”, porque “hay dirigentes que quieren ser oídos”.
Por otra parte, el Presidente atribuyó la demora en los anuncios de las medidas económicas al “error de interpretación” de algunos, sin mencionar a quién se refería. En ese sentido, el jefe de Estado insistió en señalar: “quiero ratificar el carácter absoluto que tendrá la reprogramación”. De inmediato precisó que “el programa” del gobierno “comprende otros aspectos de la política social”.
El Presidente aseguró que “nada puede extrañar cuando en el país se hablaba de una reprogramación consensuada o voluntaria de la deuda, de modo que no debería haber ocurrido un signo de preocupación, sino todo lo contrario”, porque “se estaba dando una respuesta a esa demanda política orgánica, jurídica y voluntaria”.
(NA). – El presidente Fernando de la Rúa aseguró esta mañana (martes 30) que la “reprogramación” de la deuda externa que negocia el Gobierno será “consensuada” y “no habrá nada forzado” para los acreedores, a la vez que ratificó que “no habrá devaluación ni default”.
De la Rúa dejó en claro, en declaraciones formuladas en la Casa de Gobierno, que la reestructuración será “voluntaria y beneficiosa para los tenedores de títulos” públicos.
En un contexto en el que remarcó la necesidad de buscar un consenso con los distintos sectores, el Presidente, sin dar mayores precisiones, anticipó que hoy mantendrá “reuniones con dirigentes de diversas fuerzas políticas”, tras precisar que “los programas que desde el gobierno pondremos en marcha tendrán el signo de la participación”.
En ese sentido, De la Rúa precisó que “todos los sectores reclamaban una reprogramación consensuada, voluntaria de la deuda”, y enfatizó que “eso es sobre lo que estamos trabajando, por eso quiero reafirmar muy claramente que no habrá nada forzado ni coercitivo”.
Además, precisó que los esperados anuncios económicos se darán a conocer “apenas estén los textos legales” y luego de que se hayan “hecho las consultas” necesarias, de modo que se le dé “la fuerza del consenso” de los sectores “empresarios, sociales e incluso religiosos”.
Agregó que todo “será absolutamente voluntario y beneficioso para los tenedores de títulos, que recibirán grandes ventajas por el canje con mayores garantías y seguridades”.
Luego, se quejó porque “algunos quieren poner la duda sobre si será voluntario o coercitivo” el tratamiento de la reprogramación de la deuda. “De ninguna manera habrá nada coercitivo, sino que será absolutamente voluntario, como corresponde a la seguridad jurídica que ratifico en este momento”, enfatizó el Presidente en su diálogo con los periodistas acreditados en la Casa Rosada.
El jefe de Estado dijo que los contactos que mantendrá de ahora en adelante serán “telefónica y personalmente”, porque “hay dirigentes que quieren ser oídos”.
Por otra parte, el Presidente atribuyó la demora en los anuncios de las medidas económicas al “error de interpretación” de algunos, sin mencionar a quién se refería. En ese sentido, el jefe de Estado insistió en señalar: “quiero ratificar el carácter absoluto que tendrá la reprogramación”. De inmediato precisó que “el programa” del gobierno “comprende otros aspectos de la política social”.
El Presidente aseguró que “nada puede extrañar cuando en el país se hablaba de una reprogramación consensuada o voluntaria de la deuda, de modo que no debería haber ocurrido un signo de preocupación, sino todo lo contrario”, porque “se estaba dando una respuesta a esa demanda política orgánica, jurídica y voluntaria”.