La Legislatura busca acuerdo

La falta de una mayoría legislativa absoluta estimula las negociaciones. Aníbal Ibarra y Gustavo Béliz procuran acordar posiciones. Un "acuerdo de responsabilidad compartida".

23 junio, 2000

La Alianza y Encuentro para la Ciudad configuran los dos bloques relativamente mayoritarios de la Legislatura de la Ciudad de Buenos aires. Nadie tiene suficientes bancas como para imponer sus decisiones políticas. De ahí la necesidad de establecer bases para gobernar el distrito sin perturbaciones mayores. Estas son las razones que trascendieron para justificar el diálogo abierto entre Aníbal Ibarra, gobernante electo, y Gustavo Béliz, quien asume la representación de la coalición que integra con Domingo Cavallo.

La búsqueda de un “acuerdo de responsabilidad compartida” se genera en torno a temas concretos, como el Código de Planeamiento Urbano y la integración del Ente Único Regulador de los Servicios Públicos.

Trascendieron algunos puntos en los que existe un principio de acuerdo:
1. Sancionar sobre tablas y con los dos tercios la autorización a la Jefatura de gobierno para llamar a licitación para construir playas subterráneas en plazas públicas alejadas del centro de la ciudad y otorgar concesiones para la renovación del sistema de carteleras en sitio públicos.

2. Establecer una tregua hasta promediar el 2001, cuando se estima que comenzará la campaña política para la renovación del Congreso Nacional.

La Alianza y Encuentro para la Ciudad configuran los dos bloques relativamente mayoritarios de la Legislatura de la Ciudad de Buenos aires. Nadie tiene suficientes bancas como para imponer sus decisiones políticas. De ahí la necesidad de establecer bases para gobernar el distrito sin perturbaciones mayores. Estas son las razones que trascendieron para justificar el diálogo abierto entre Aníbal Ibarra, gobernante electo, y Gustavo Béliz, quien asume la representación de la coalición que integra con Domingo Cavallo.

La búsqueda de un “acuerdo de responsabilidad compartida” se genera en torno a temas concretos, como el Código de Planeamiento Urbano y la integración del Ente Único Regulador de los Servicios Públicos.

Trascendieron algunos puntos en los que existe un principio de acuerdo:
1. Sancionar sobre tablas y con los dos tercios la autorización a la Jefatura de gobierno para llamar a licitación para construir playas subterráneas en plazas públicas alejadas del centro de la ciudad y otorgar concesiones para la renovación del sistema de carteleras en sitio públicos.

2. Establecer una tregua hasta promediar el 2001, cuando se estima que comenzará la campaña política para la renovación del Congreso Nacional.

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