(EFE).- El Banco de Japón decidió continuar hoy (lunes 17) con las tasas de interés en los niveles mínimos próximos a cero que ha mantenido en los últimos 17 meses para fomentar el despegue económico del país.
La decisión se tomó por mayoría en una reunión de los nueve directores del Consejo de Política Monetaria del banco central japonés.
El banco emisor japonés ha resistido en las últimas semanas fuertes presiones para no elevar el costo del dinero, procedentes de Japón y del extranjero, donde se pide facilitar por más tiempo una política de dinero fácil.
El banco central mostró su voluntad de poner fin a esa política al conocer, en junio, la relativa mejora del optimismo empresarial en el futuro económico del país y el aumento de los pedidos de maquinaria industrial.
El ministro de Finanzas, Kiichi Miyazawa, se mostró contrario a la suba porque la confianza empresarial sólo había experimentado mejoras entre los grandes consorcios, mientras que entre la pequeña y mediana industria había empeorado.
Estados Unidos pidió claramente a Japón, antes de la reunión de ministros de Finanzas del Grupo de los Siete países más industrializados (G-7), celebrada en Fukuoka el 8 de este mes, que facilitara medidas que aumenten el consumo individual y el gasto de capital corporativo.
En las conclusiones de la reunión monetaria del Banco de Japón se destacó la mención de Sogo, la cadena de grandes supermercados que se declaró en quiebra la semana pasada, tras cancelarse un plan oficial que preveía una fuerte condonación de sus deudas e inyección de dinero público.
Según el banco central, un nuevo plan para la reconstrucción de Sogo deberá ser observado con atención para determinar los efectos en los mercados y en el ambiente empresarial.
La tasa oficial de descuento japonesa se encuentra en 0,5% anual y la tasa de interés a muy corto plazo, el día a día, en 0,15%.
(EFE).- El Banco de Japón decidió continuar hoy (lunes 17) con las tasas de interés en los niveles mínimos próximos a cero que ha mantenido en los últimos 17 meses para fomentar el despegue económico del país.
La decisión se tomó por mayoría en una reunión de los nueve directores del Consejo de Política Monetaria del banco central japonés.
El banco emisor japonés ha resistido en las últimas semanas fuertes presiones para no elevar el costo del dinero, procedentes de Japón y del extranjero, donde se pide facilitar por más tiempo una política de dinero fácil.
El banco central mostró su voluntad de poner fin a esa política al conocer, en junio, la relativa mejora del optimismo empresarial en el futuro económico del país y el aumento de los pedidos de maquinaria industrial.
El ministro de Finanzas, Kiichi Miyazawa, se mostró contrario a la suba porque la confianza empresarial sólo había experimentado mejoras entre los grandes consorcios, mientras que entre la pequeña y mediana industria había empeorado.
Estados Unidos pidió claramente a Japón, antes de la reunión de ministros de Finanzas del Grupo de los Siete países más industrializados (G-7), celebrada en Fukuoka el 8 de este mes, que facilitara medidas que aumenten el consumo individual y el gasto de capital corporativo.
En las conclusiones de la reunión monetaria del Banco de Japón se destacó la mención de Sogo, la cadena de grandes supermercados que se declaró en quiebra la semana pasada, tras cancelarse un plan oficial que preveía una fuerte condonación de sus deudas e inyección de dinero público.
Según el banco central, un nuevo plan para la reconstrucción de Sogo deberá ser observado con atención para determinar los efectos en los mercados y en el ambiente empresarial.
La tasa oficial de descuento japonesa se encuentra en 0,5% anual y la tasa de interés a muy corto plazo, el día a día, en 0,15%.