Gran triunfo de Obama en el Senado: seguro de salud

Jóvenes y negros están desencantados con un presidente que ven próximo a Wall Street y a guerras inútiles, pero lejos de posturas progresistas. Pero, tras el fracaso de Copenhague, el Senado le aprobó días atrás la ampliación del seguro médico.

27 diciembre, 2009

<p>&ldquo;Aunque t&iacute;mida e imperfecta, la legislaci&oacute;n pasada por la c&aacute;mara alta casi en nochebuena -como un Ebenezer Scrooge al rev&eacute;s&ndash;, que pronto ser&aacute; ley, ir&aacute; trasformando a Estados Unidos en un pa&iacute;s mejor&rdquo;, afirma Paul Krugman, Nobel econ&oacute;mico 2008. Pudo haber dicho, de paso, que las coberturas asistenciales en casi toda Europa y Latinoam&eacute;rica llevan generaciones de adelanto sobre la todav&iacute;a mayor econom&iacute;a del mundo.<br />
<br />
No obstante, apunta el disc&iacute;pulo de Paul Samuelson, &ldquo;hay tres sectores relevantes de quejosos. Primero, la ultraderecha blanca, ya no tan perif&eacute;rica pues maneja el n&uacute;cleo del partido Republicano&rdquo;. A diferencia de lo prevaleciente hasta no hace mucho, la extrema irracional o b&iacute;blica se impone a los conservadores tradicionales: Sarah Palin influye m&aacute;s que John McCain. <br />
<br />
El segundo grupo se compone de eternos opositores a pagar impuestos, cuya fijaci&oacute;n radica en la deuda p&uacute;blica. Sin embargo, apunta Krugman, &ldquo;debieran sentirse felices pues, a largo plazo, la reforma social reducir&aacute; los rojos presupuestarios y facilitar&aacute; el control de costos&rdquo;. En tercer lugar aparecen los progresistas a cuyo criterio &ldquo;los subsidios resultan inadecuados y muchas familias seguir&aacute;n teniendo dificultades para pagarle al m&eacute;dico. Pero sus reclamos no debieran justificar un rechazo a la futura ley&rdquo;. <br />
<br />
En realidad, lo que este tercer sector necesita es aprovechar los comicios de 2010 y 2012 para mejorar el perfil atrabiliario del Senado. Ah&iacute; se interpone un fen&oacute;meno ingrato para Barack Obama: su aceptaci&oacute;n p&uacute;blica cedi&oacute; de 56 a 47% entre febrero y mediados de noviembre, seg&uacute;n el instituto de sondeos Pew. Entretanto, s&oacute;lo 56% de j&oacute;venes entre 18 y 29 a&ntilde;os y 34% de negros indican que acudir&aacute;n a las urnas en 2010. Vale decir, para elecciones parlamentarias, estaduales y municipales de medio tiempo, que influir&aacute;n en las generales de 2012.<br />
<br />
Las facturas que le pasan al presidente vienen por derecha &ndash;ampliaci&oacute;n del seguro m&eacute;dico a 30 millones de personas hoy sin cobertura- e izquierda (efecto invernadero, Afganist&aacute;n-Pakist&aacute;n). Para colmo, los republicanos viven una euforia casi fundamentalista. De acuerdo con Research 2000, a mediados de mes 81% votar&aacute; en 2010 y s&oacute;lo 14% no lo har&iacute;a. Este clima explica que un moderado como McCain tema que Obama tal vez no se presente en 2012 para renovar mandato. Particularmente si la guerra afgana sigue el camino de la iraqu&iacute;.</p>
<p>&nbsp;</p>

Compartir:
Notas Relacionadas

Suscripción Digital

Suscríbase a Mercado y reciba todos los meses la mas completa información sobre Economía, Negocios, Tecnología, Managment y más.

Suscribirse Archivo Ver todos los planes

Newsletter


Reciba todas las novedades de la Revista Mercado en su email.

Reciba todas las novedades