Futuro optimista para las exportaciones
Según una estimación de la Cámara de Exportadores de la República Argentina, las ventas al exterior de este año crecerían 3,5% respecto a las del año pasado, cuando se vendieron bienes por US$ 26.400 millones.
(NA).- Las exportaciones argentinas crecerán 3,5% este año respecto del anterior, para
llegar a alrededor de US$ 27.300 millones, según estimó hoy (viernes 1) el presidente de la Cámara de Exportadores de la República Argentina (Cera), Enrique Mantilla.
El dirigente consideró que en este cálculo no están incluidos los posibles “efectos de la implementación de los planes de competitividad” que impulsa el Gobierno para el segundo semestre del año, por lo que el registro a fin de año podría ser mayor.
En el año anterior las ventas por exportaciones totalizaron US$ 26.400 millones.
Mantilla consideró que la desaceleración de la economía mundial y los problemas del mercado brasileño “son factores que afectan el resultado exportador”.
Consideró que las crisis energética de Brasil, la suba en la tasa de interés y la debilidad de la moneda de ese país, que acumula 50% frente al peso desde la crisis cambiaria de enero de 1999 “impactan en los flujos comerciales entre ambos países”.
Mantilla estimó que esta situación “muestra además la incapacidad que ha tenido Brasil para dar estabilidad cambiaria al Mercosur”.
Al referirse a la polémica sobre si profundizar el Mercosur o adherir a la Asociación de Libre Comercio para las Américas (Alca), dijo que el debate “no ha sido bien planteado”.
El titular de la Cera calificó al Mercosur de “objeto político no identificado, pese a la denominada política de relanzamiento o el anuncio de un pequeño Maastrich, y el Alca es sólo un proceso en gestación”.
Además, indicó que desde la institución que preside se impulsa “un cambio de formato en el Mercosur” en el que “primero hay que sincerarlo y diseñar una política de integración positiva”.
Añadió que al Alca “le falta tiempo para ver claramente cuál es el espacio real de oportunidades que se abrirá y parte de la respuesta la tienen decisiones, que no están a la vista, del Parlamento de Estados Unidos”.
A la vez, calificó al Alca como un “proceso difícil, si nos ponemos a pensar que 34 países tienen que tratar en 11 áreas principales de negociación más de 60 temas claves”.
“El simple hecho de tratar estos temas desde el punto de vista intelectual, excede, al margen de solucionar los intereses de todos, la capacidad real de muchos delegados que tienen
responsabilidad para negociar”, añadió Mantilla.
En este marco, consideró que como este proceso “se debe realizar en 8 ó 10 reuniones, me parece que asistiéramos a un proceso de tratar de reducir la complejidad, y por eso es
conveniente conocer bien el acuerdo del Nafta, que tendrá una influencia preponderante”.
Mantilla señaló además que para mejorar la performance exportadora del país, la Cera propone una estrategia global con una estrategia sistemática de competitividad, otra de inserción internacional y una de economía del conocimiento.
“Nos parece que adoptar una estrategia global no sólo comunica una política, sino que favorece tener conductas positivas e innovadoras”, añadió.
El dirigente propuso implementar un nuevo IVA “que sea eficaz para favorecer un shock inversor-exportador sustentable”.
Por otra parte, manifestó que el cambio económico global acelerado “ha puesto a muchos sectores productivos en crisis y lo primero que se busca son paliativos”.
(NA).- Las exportaciones argentinas crecerán 3,5% este año respecto del anterior, para
llegar a alrededor de US$ 27.300 millones, según estimó hoy (viernes 1) el presidente de la Cámara de Exportadores de la República Argentina (Cera), Enrique Mantilla.
El dirigente consideró que en este cálculo no están incluidos los posibles “efectos de la implementación de los planes de competitividad” que impulsa el Gobierno para el segundo semestre del año, por lo que el registro a fin de año podría ser mayor.
En el año anterior las ventas por exportaciones totalizaron US$ 26.400 millones.
Mantilla consideró que la desaceleración de la economía mundial y los problemas del mercado brasileño “son factores que afectan el resultado exportador”.
Consideró que las crisis energética de Brasil, la suba en la tasa de interés y la debilidad de la moneda de ese país, que acumula 50% frente al peso desde la crisis cambiaria de enero de 1999 “impactan en los flujos comerciales entre ambos países”.
Mantilla estimó que esta situación “muestra además la incapacidad que ha tenido Brasil para dar estabilidad cambiaria al Mercosur”.
Al referirse a la polémica sobre si profundizar el Mercosur o adherir a la Asociación de Libre Comercio para las Américas (Alca), dijo que el debate “no ha sido bien planteado”.
El titular de la Cera calificó al Mercosur de “objeto político no identificado, pese a la denominada política de relanzamiento o el anuncio de un pequeño Maastrich, y el Alca es sólo un proceso en gestación”.
Además, indicó que desde la institución que preside se impulsa “un cambio de formato en el Mercosur” en el que “primero hay que sincerarlo y diseñar una política de integración positiva”.
Añadió que al Alca “le falta tiempo para ver claramente cuál es el espacio real de oportunidades que se abrirá y parte de la respuesta la tienen decisiones, que no están a la vista, del Parlamento de Estados Unidos”.
A la vez, calificó al Alca como un “proceso difícil, si nos ponemos a pensar que 34 países tienen que tratar en 11 áreas principales de negociación más de 60 temas claves”.
“El simple hecho de tratar estos temas desde el punto de vista intelectual, excede, al margen de solucionar los intereses de todos, la capacidad real de muchos delegados que tienen
responsabilidad para negociar”, añadió Mantilla.
En este marco, consideró que como este proceso “se debe realizar en 8 ó 10 reuniones, me parece que asistiéramos a un proceso de tratar de reducir la complejidad, y por eso es
conveniente conocer bien el acuerdo del Nafta, que tendrá una influencia preponderante”.
Mantilla señaló además que para mejorar la performance exportadora del país, la Cera propone una estrategia global con una estrategia sistemática de competitividad, otra de inserción internacional y una de economía del conocimiento.
“Nos parece que adoptar una estrategia global no sólo comunica una política, sino que favorece tener conductas positivas e innovadoras”, añadió.
El dirigente propuso implementar un nuevo IVA “que sea eficaz para favorecer un shock inversor-exportador sustentable”.
Por otra parte, manifestó que el cambio económico global acelerado “ha puesto a muchos sectores productivos en crisis y lo primero que se busca son paliativos”.
