Finalmente, los quince británicos estaban espiando

Ni siquiera los “pasdarán” que los capturaron lo sospechaban. Pero, ahora, vuelve la tensión Irán-Gran Bretaña: el comandante del grupo, Christopher Air, reveló que realizaban tareas de inteligencia.

6 abril, 2007

Al mando de siete infantes de marina (“marines” no existe en castellano) y ocho marineros, los dos lanchones practicaban reconocimientos en aguas iraníes. En declaraciones a la cadena Sky News, el capital Air dejó sin sustento la explicación oficial, dada por boca de dos altos funcionarios y el primer ministro Antony Blair.

Por supuesto, la pública admisión del militar –que lo expone a un sumario interno, si la misión era secreta- pone en aprietos diplomáticos al gobierno. Tehrán sacará todo el partido posible de este “faux pas”, máxime porque el espionaje se admitió recién después de liberados los quince efectivos, al cabo de catorce días.

Hasta ahora, los iraníes sólo los acusaban por haber ingresado ilegalmente en aguas territoriales. Pero hay un detalle que agrava las cosas: la conversación con Air data del 13 de marzo (ocho días antes de la captura), pero recién se divulgó el jueves santo, “para no trabar la liberación”. Por ende, fue un doble ocultamiento. Sin contar con que, antes del episodio, un cronista de Sky News acompañó a la pequeña fuerza mientras realizaba tarea de inteligencia. Sólo por casualidad ya no estaba embarcado cuando apresaron al grupo.

Al mando de siete infantes de marina (“marines” no existe en castellano) y ocho marineros, los dos lanchones practicaban reconocimientos en aguas iraníes. En declaraciones a la cadena Sky News, el capital Air dejó sin sustento la explicación oficial, dada por boca de dos altos funcionarios y el primer ministro Antony Blair.

Por supuesto, la pública admisión del militar –que lo expone a un sumario interno, si la misión era secreta- pone en aprietos diplomáticos al gobierno. Tehrán sacará todo el partido posible de este “faux pas”, máxime porque el espionaje se admitió recién después de liberados los quince efectivos, al cabo de catorce días.

Hasta ahora, los iraníes sólo los acusaban por haber ingresado ilegalmente en aguas territoriales. Pero hay un detalle que agrava las cosas: la conversación con Air data del 13 de marzo (ocho días antes de la captura), pero recién se divulgó el jueves santo, “para no trabar la liberación”. Por ende, fue un doble ocultamiento. Sin contar con que, antes del episodio, un cronista de Sky News acompañó a la pequeña fuerza mientras realizaba tarea de inteligencia. Sólo por casualidad ya no estaba embarcado cuando apresaron al grupo.

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