Expectativas por las relaciones con Cuba

Alvarez y Alfonsín coincidieron en que Castro cometió una "ofensa" hacia la Argentina, pero no consideran correcto votar contra este país en las Naciones Unidas. Recomiendan tomar distancia de EE.UU. Hoy hablará el embajador cubano.

7 febrero, 2001

Los titulares de la UCR, Raúl Alfonsín, y del Frepaso, Carlos Chacho Alvarez, se manifestaron hoy (miércoles 7) en favor de que la Argentina se abstenga en la votación contra Cuba en las Naciones Unidas. No obstante, coincidieron en que Fidel Castro cometió una “ofensa” hacia la Argentina cuando trató a sus gobernantes de “lamebotas de los yanquis”.

“Creo que el presidente de Cuba ha sido muy desafortunado en sus declaraciones hacia la Argentina. Pero también creo que no hay que avivar este fuego porque son dos pueblos amigos. Tenemos ideologías distintas, eso está claro”, dijo Alfonsín, en un reportaje publicado hoy por el diario La Nación.

Asimismo, el ex presidente añadió que “el fundamento de mi voto es que existen muchos países en los que hay violación a los derechos humanos y se remarca, pero de los Estados Unidos nunca se dice nada”. De este modo, señaló que “en el Gobierno no queremos ser clientela cautiva de los Estados Unidos”.

Alvarez, por su parte, advirtió que el gobierno de la Alianza debe “romper la idea de obsecuencia, de seguimiento automático” hacia Estados Unidos.

“Las palabras de Castro es evidente que no son favorables a un país que debe tener relaciones normales, buenas, con el principal país del mundo, pero tenemos que romper esta idea de obsecuencia, de seguimiento automático, porque los países tenemos muchas coincidencias que hay que profundizar y también podemos tener diferencias que tienen que ver con los intereses nacionales”, aseveró Alvarez.

Ayer, martes, el diario cubano Granma publicó la versión completa del discurso de Castro, lo que encendió los ánimos de la cancillería argentina.

Castro señaló, además del ya conocido “lamer la bota yanqui”, que en la Argentina “todo está vendido, hasta la tierra”, y aconsejó “convertir el Obelisco en una bandera norteamericana”.

“La nota trasunta el desagrado por los agravios vertidos por el presidente Castro”, explicó la cancillería por medio de un comunicado.

En tanto, el embajador cubano en el país, Alejandro González Galeano, expresará hoy en conferencia de prensa su postura ante la rispidez generada por la manifestación de Castro, aunque voceros de la de la representación no precisaron la posición que expondrá.

El embajador argentino en La Habana, Oscar Torres Avalos, fue convocado a esta ciudad apenas se desató el escándalo y no tiene previsto un pronto regreso.

Por el momento, la sede diplomática de la Argentina en Cuba está bajo el mando del encargado de negocios, José María Allert, y es probable que esta situación se mantenga durante algún tiempo.

Los titulares de la UCR, Raúl Alfonsín, y del Frepaso, Carlos Chacho Alvarez, se manifestaron hoy (miércoles 7) en favor de que la Argentina se abstenga en la votación contra Cuba en las Naciones Unidas. No obstante, coincidieron en que Fidel Castro cometió una “ofensa” hacia la Argentina cuando trató a sus gobernantes de “lamebotas de los yanquis”.

“Creo que el presidente de Cuba ha sido muy desafortunado en sus declaraciones hacia la Argentina. Pero también creo que no hay que avivar este fuego porque son dos pueblos amigos. Tenemos ideologías distintas, eso está claro”, dijo Alfonsín, en un reportaje publicado hoy por el diario La Nación.

Asimismo, el ex presidente añadió que “el fundamento de mi voto es que existen muchos países en los que hay violación a los derechos humanos y se remarca, pero de los Estados Unidos nunca se dice nada”. De este modo, señaló que “en el Gobierno no queremos ser clientela cautiva de los Estados Unidos”.

Alvarez, por su parte, advirtió que el gobierno de la Alianza debe “romper la idea de obsecuencia, de seguimiento automático” hacia Estados Unidos.

“Las palabras de Castro es evidente que no son favorables a un país que debe tener relaciones normales, buenas, con el principal país del mundo, pero tenemos que romper esta idea de obsecuencia, de seguimiento automático, porque los países tenemos muchas coincidencias que hay que profundizar y también podemos tener diferencias que tienen que ver con los intereses nacionales”, aseveró Alvarez.

Ayer, martes, el diario cubano Granma publicó la versión completa del discurso de Castro, lo que encendió los ánimos de la cancillería argentina.

Castro señaló, además del ya conocido “lamer la bota yanqui”, que en la Argentina “todo está vendido, hasta la tierra”, y aconsejó “convertir el Obelisco en una bandera norteamericana”.

“La nota trasunta el desagrado por los agravios vertidos por el presidente Castro”, explicó la cancillería por medio de un comunicado.

En tanto, el embajador cubano en el país, Alejandro González Galeano, expresará hoy en conferencia de prensa su postura ante la rispidez generada por la manifestación de Castro, aunque voceros de la de la representación no precisaron la posición que expondrá.

El embajador argentino en La Habana, Oscar Torres Avalos, fue convocado a esta ciudad apenas se desató el escándalo y no tiene previsto un pronto regreso.

Por el momento, la sede diplomática de la Argentina en Cuba está bajo el mando del encargado de negocios, José María Allert, y es probable que esta situación se mantenga durante algún tiempo.

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